JUEVES Ť 1Ɔ Ť MARZO Ť 2001
Jean Meyer
Don Quijote en Ucrania
Ucrania es el país del mundo ex comunista que ha recibido la mayor ayuda financiera de Estados Unidos, que después de ha-berse resistido a la independencia de dicho país (como Francia y demás países europeos) vio en una Ucrania independiente la mejor manera de impedir el regreso de cualquier imperio ruso. Por eso apoyaron a los presidentes sucesivos, cerrando los ojos sobre corrupción, violencia y fraude electoral. Ucrania no es cualquier cosa: en territorio y población es comparable a Francia y era la más próspera, la menos pobre de todas las repúblicas soviéticas. Por lo tanto su población puso muchas es-peranzas en la independencia, hasta la nu-merosa minoría rusa concentrada en las provincias orientales.
Hoy el presidente Leonid Kuchma evoca seriamente el posible derrumbe de su país. Cuando un presidente habla así es que las cosas van mal. El declive económico y la pauperización consecuente de los ucranianos entra en su décimo año y no se ve el repunte; pero no es lo que preocupa al mandatario. Le preocupan las andanzas de un tal Mikola Melnichenko, 34 años, ex agente del KGB que trabajó un año en el Kremlin de Mijail Gorbachov y seis años en los servicios de seguridad del presidente de Ucrania. Aquel hombre que se presenta como el Quijote dice haber grabado 300 horas desde 1998 que documentan la inmoralidad absoluta de Kuchma y su círculo íntimo de políticos y empresarios. Le acusa no sólo de haber desviado mil millones de dólares para su uso político y personal, sino de haber usado todos los medios para ganar las elecciones de 1999 y de practicar hasta el asesinato político.
Hace tres meses que Melnichenko se sumió en la clandestinidad, con su esposa y su hijita, en el preciso momento en que el líder del partido socialista, V. Moroz, infeliz candidato contra Kuchma, dio a escuchar al Congreso en pleno una cinta en la cual se oye al presidente dar la orden de deshacerse, a toda costa, del periodista Georgy Gongadze. Ese valeroso internauta (www.pravda.com.ua) le estaba tirando durísimo al gobernante ucraniano; desapareció en septiembre y en noviembre encontraron su cuerpo decapitado. Fue cuando Melnichenko tomó la decisión de dar a conocer el material. Solo o instrumentado por otras personas de los mismos servicios de seguridad. ƑQuién sabe?
El presidente, después de negar que fuese su voz, aceptó el hecho, denunciando un montaje organizado quizá por una potencia "externa", para desestabilizar al país. En Ucrania, entre 1991 y 2000, cuando se hablaba de amenaza "externa", se trataba siempre de Rusia, considerada co-mo el enemigo número uno. Ciertamente Moscú ha reconocido la independencia de su vecino a regañadientes y muchos rusos piensan que se trata de una aberración pa-sajera. Ciertamente ha habido tensión permanente y muchas crisis. Lo que ha servido a los presidentes en turno para sacar muchos favores occidentales y, luego, para lograr concesiones rusas: "Si siguen así, entraremos a la Organización del Tratado del Atlántico Norte", etcétera
Pero Kuchma acaba de descubrirse un amor extremo para Rusia, cuando en 1999 armó su campaña presidencial como na-cionalista pro occidental y antimoscovita. "Un hombre que se ahoga, se agarra de una serpiente", dijo no recuerdo cuál sultán turco en graves problemas. Nada mejor para los planes de Vladimir Putin, pero eso sería tema de otro artículo. Putin llegó a Kiev el 14 de febrero, en plena tormenta política, al día siguiente del arresto de Julia Timoshenko, enemiga implacable de Kuchma. Esa mujer brillante, ministra de energía y viceprimera ministra, apoyada por el FMI y el banco BERD, líder de un partido que cuenta con 40 diputados, se encuentra acusada de corrupción y de complicidad en el asesinato de Gongadze...
Es cuando Putin y Kuchma firman una serie de acuerdos de cooperación civil y militar que preocupan mucho a Bruselas y a Washington. Hace dos meses, hace un mes, eso hubiera sido impensable y de repente... Cuando denuncia una potencia "externa", Ƒintenta Kuchma hacer creer que los occidentales son los autores de ese "complot" en su contra? ƑQuién lo va a creer? El caos en Ucrania, el "derrumbe" de Ucrania no les sería de ninguna utilidad. A los rusos, sí, pero Kuchma se ha forjado una lista larga de oponentes nacionales, sin que sea necesario buscar la mano de Mos-cú o del FBI. Hace semanas que aumenta el número de los manifestantes que piden una "Ucrania sin Kuchma".
Una vez más se averigua que es contraproducente apoyar o tolerar dirigentes autoritarios y corruptos, para no hablar de los dictadores, y eso que a Kuchma le falta poco para llegar a dictador. La lista sería larga de las inversiones y apuestas perdidas sobre los Fulgencio Batista, Jean-Claude Duvalier, Suharto, Ferdinand Marcos, etcétera... Ucrania ha perdido 10 años, cuando se encontraba en una situación estratégica inmejorable y en la posibilidad de despegar como Polonia y los países bálticos. Todo se fue en lavado de dinero y paraísos fiscales para provecho de un pu-ñado de bandidos. Ucrania conservará su independencia sólo si logra una verdadera democratización y su reconstrucción económica. No la amenaza Rusia, sino sus di-rigentes. Si Kuchma logra mantenerse en el poder será un nuevo Lukashenko, el dictador de la arruinada Bielorrusia.
Repito que Israel debe evacuar los territorios ocupados y desmantelar las colonias que los desvirtúan.