Ť Retornan las ejecuciones extrajudiciales, acusa

GAM: en retroceso, la situación de los derechos humanos en Guatemala
 

DPA Y AP

Guatemala, 24 de febrero. Este país vive una situación de "aletargamiento" que ha provocado una crisis social, económica y política y el retroceso en la protección de los derechos humanos, advirtió la organización humanitaria Grupo de Apoyo Mutuo (GAM) en su informe anual dado a conocer hoy, la víspera del Día Nacional de la Dignidad por las Víctimas de la Guerra Civil, en el que se recuerda a los 200 mil muertos o desaparecidos durante el conflicto.

Para el GAM, ese aletargamiento hace que Guatemala se asemeje más a un país de ficción de los que se encuentran en las no-velas del escritor Gabriel García Márquez "que a una nación real que busca la manera de avanzar hacia la democracia y la paz".

En su informe la organización pro derechos humanos denunció el reinicio de las desapariciones forzadas. El año pasado, agrega el documento, se produjeron siete desapariciones de este tipo "después de siete años de no registrarse un solo caso de esta naturaleza".

Además, 63 personas fueron ejecutadas extrajudicialmente, lo que representa un in-cremento de más de 200 por ciento".

La mayor parte de las ejecuciones "extrajudiciales ocurrieron de julio a diciembre, y casualmente esos meses coincidieron con el incremento de la lucha de pobladores, campesinos, defensores de derechos humanos y la sociedad civil organizada", y aunque no se conoce la identidad de los responsables lo más probable es que este tipo de crimen "se realice con el respaldo y apoyo de integrantes de los cuerpos de seguridad".

Durante el año 2000 también se informó de 729 casos de asesinatos individuales o colectivos, y 41 secuestros, en nueve de los cuales las víctimas fallecieron.

El GAM atribuyó a la crisis económica y al desempleo el aumento de la prostitución infantil, y denunció que varias organizaciones sociales fueron vigiladas, sus teléfonos interceptados e incluso hubo allanamiento de las oficinas y ataques a los activistas pro derechos humanos.

El documento puntualizó que "el año 2000 ha tenido como característica el incremento de la inseguridad ciudadana, aunque estos hechos no pueden señalarse como violaciones a los derechos humanos... Ha-cemos referencia a ello como secuelas que nos ha dejado la institucionalidad que existió durante muchas décadas en las violaciones a estos derechos".