La FMF finiquitó el caso, pero Omar Avilán sigue sin cobrar 500 mil pesos
Ť Chávez Carretero, el jugador que más sufrió cuando reclamó su porcentaje de transferencia
Ť El nuevo edificio de la federación costó más de 3 mdd: FIFA aportó un millón de dólares
MIGUEL ANGEL RAMIREZ /III y última
Para demostrar que la justicia es ciega en la Comisión de Resolución de Controversias, Francisco Rocha Bandala anunció el pasado día 2 que el Atlas, el club propiedad del presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Alberto de la Torre, había perdido el caso ante Omar Avilán. El pago del porcentaje por la transferencia del jugador al Monterrey quedó en 500 mil pesos, y los rojinegros prometieron liquidarlos el 6 de febrero. Sin embargo, el equipo del titular de la FMF se mantienen hasta la fecha sin cumplir.
A diversos métodos han recurrido los dirigentes del balompié para no jugar limpio también en el pago del porcentaje. Aunque para disimularlo crearon esta vez la comisión que preside Rocha Bandala. El conflicto Emilio Mora-Morelia, fue el caso más sonado, y en el que al jugador le quedó claro que podría ser desafiliado en caso de no aceptar el veredicto.
Rocha Bandala dijo que las resoluciones de la comisión deben cumplirse y que el 70 por ciento eran favorables a los jugadores. También, en su afán por demostrar que no es juez y parte, puso de ejemplo el caso de Avilán, al que ese 2 de febrero dio por finiquitado oficialmente.
Pero aún no lo estaba ni lo está. En el "acta administrativa" que se levantó el 1º de febrero en las oficinas de la Primera División, quedó establecido lo siguiente: "el ingeniero Javier Pulido Valdivia, en representación del Atlas, con el afán de finiquitar amistosamente el presente asunto a pesar de considerar que dicho reclamo no es del todo procedente, mas sin embargo, por la trayectoria del jugador y su buen desempeño en el equipo, propone pagar al jugador $500 mil mediante cheque que se entregará a la Comisión de Resolución de Controversias el próximo martes 6 de febrero previa firma del jugador del finiquito correspondiente". Pero los rojinegros han dejado muy mal parado al justiciero Rocha Bandala.
Rafael Chávez Carretero, actual auxiliar del técnico nacional Enrique Meza, comprende más que ninguno a los Mora, a los Avilán, aunque a él le fue peor. En 1989 el presidente del Atlante, José Antonio García, no quería pagarle su porcentaje por la transferencia a las Chivas. El entonces delantero pidió el consejo del presidente de la FMF, Marcelino García Paniagua, quien lo alentó a presentar una demanda en los tribunales. De parte del Guadalajara, vía el titular Sergio Ruiz Lacroix, recibió apoyo, aunque le advirtieron que únicamente ante una autoridad revelarían el costo del pase.
El ejemplo de Chávez Carretero
No fue necesario, Toño García dijo que "fue de 350 millones de pesos, en la audiencia que se llevó ayer en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje" (La Jornada, 12 de julio de 1989). Pero para ese entonces, Chávez Carretero ya vivía un calvario. El presidente azulgrana comentó en una junta de presidentes que si permitían que ganara Rafael, al rato todos los jugadores seguirían ese camino y saldrían perjudicados los clubes.
Empezaron a darle la espalda a Rafael quienes lo apoyaron, y Ruiz Lacroix lo citaba en el club a la misma hora y día, en que lo hacía la junta en el DF.
Como no podía creerlo, Chávez Carretero dejó constancia por escrito de lo que le estaba pasando. "...precisamente es para bloquearte y no puedas ir a ninguna audiencia y si faltas a nuestra cita te corro, es más, José Antonio García y yo estamos de acuerdo para darte en la madre, no vas a ganar ninguna demanda y yo me encargo de que no vuelvas a jugar futbol, la gente te aborrece, no mereces vestir el uniforme del equipo, te estás metiendo contra la institución, yo soy la institución y meterte contra mí es meterte contra la institución...".
Cumplieron lo que le dijo en esa ocasión Ruiz Lacroix; le empezaron a dejar de pagar, a impedirle el acceso al club, y Chávez Carretero sabía que estaba a su merced, pues, entre otras cosas, el contrato que había firmado estaba en blanco.
Pero los dirigentes también se arrepienten de una firma: la del ex tesorero Juan Antonio Hernández, cuando pagó (23 millones de pesos) por primera vez impuestos en la historia de la FMF. En la junta de presidentes del 24 de enero pasado se les entregó un informe de tesorería, en el que se detalla "la situación fiscal (recuperación ISR)".
Esta fue la información: "El 6 de diciembre de 1999 se presentó escrito ante el administrados local jurídico de ingresos del centro del DF, mediante el cual se formuló una consulta en la que se planteó el análisis del tratamiento al que está afecta la FMF en materia de impuesto sobre la renta".
"Con fecha 5 de junio del 2000 la administración general jurídico de ingresos, emite resolución de la consulta en el sentido de que la FMF Asociación, AC sí debió enterar el impuesto sobre la renta al recibir ingresos por enajenación de bienes distintos a su activo fijo, la cual fue notificada el día 7 de junio del mismo año".
"El 24 de agosto se promovió de demanda de nulidad, ante el tribunal fiscal de la federación en contra de dicha resolución".
El dinero del futbol
El informe agrega que les solicitaron "diversa documentación", y después de entregarla, resolvieron: "El 12 de octubre por acuerdo, notificado el 20 del mismo mes y año, la primera sala regional metropolitana del tribunal fiscal de la federación admite la demanda de nulidad, y ordena emplazar a las autoridades demandadas". Hasta ahí se encuentra el caso.
Los dirigentes conocieron también la "posición de efectivo". Les hicieron una comparación de lo que tenían hasta el 31 de diciembre de 1999 y al final del 2000. El monto total del primero (considerando FMF, Primera División, Primera A, Segunda División, Tercera División y Sector Aficionado) fue de $101 millones, 75 mil 943.
Para el 31 de diciembre del 2000 el total fue de 127 millones 724 mil 327 pesos, pero el "disponible total" se redujo a 81 millones 793 mil 827 pesos, porque se distribuyeron 20 millones 533 mil pesos, "por la participación de jugadores en el Mundial de 1998". También, 5 millones 400 mil pesos por "devolución" a clubes de la Primera División, y 19 millones 997 mil 500 pesos, por el anticipo que dieron por el nuevo edificio.
Este inmueble de la colonia Roma les costó en total 3 millones 105 mil dólares, y el millón de dólares restante lo liquidarán "en diez mensualidades". La FIFA apoyó con un millón de dólares para su jaulita de oro.