MIERCOLES Ť 21 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Roberto Vergara apenas ha devuelto 25 por ciento del quebranto que causó

Fraude de 8 millones de pesos en el Atlas por derechos de televisión

Ť Kiese, al igual que Tena, se salvó de una suspensión por agredir al árbitro Leanza

Ť La FMF pagó a sus empleados parte del aguinaldo como si fuera reparto de utilidades
 

MIGUEL ANGEL RAMIREZ /II

Alfredo Tena no es el único que ha puesto en jaque a la directiva del América por olvidarse del juego limpio. Al ex capitán del conjunto de Coapa lo salvaron cuando agredió al árbitro Carlos Castillo, pero antes lo hicieron con Hugo Enrique Kiese, presidente de la comisión de selecciones, quien en su época de jugador golpeó al silbante Jorge Alberto Leanza, junto con Miguel Angel Cornero.

El 5 de diciembre de 1991 los directivos del Correcaminos protestaron ante la Comisión Disciplinaria, por la fractura de tibia y peroné que sufrió Pablo Oceguera en un choque con Tena, y pedían que el americanista quedara inhabilitado hasta que su jugador volviera a la actividad. Pero Alfredo ya había mostrado su inmunidad para sanciones largas.

Cuando le puso una tunda a Castillo en las instalaciones de Coapa, después de un juego amistoso, el directivo Francisco Hernández pidió al nazareno arreglar el asunto para evitar la sanción (mínima de un año). El árbitro se negó y reportó kiese-hugoesto, así como los goles e insultos sufridos en su cédula. Sin embargo, cuando en la Federación Mexicana de Futbol se analizó el caso, Castillo ?aún con la marca de los golpes en la cara? fue obligado a cambiar su versión para favorecer a Tena.

Kiese también buscó que Leanza se retractara. Cornero y él fueron reportados por agresión, por lo que decidieron ir al restaurante del silbante para pedirle que modificara la cédula. No tuvieron éxito con palabras y recurrieron a los puños. El árbitro recurrió a un amigo de Gobernación, le contó la historia y le pidió un consejo. Si los acusaba Kiese (paraguayo) y Cornero (argentino) podían ser expulsados del país. Dirigentes del América y de la FMF intervinieron entonces y Leanza cambió todo por algunas promesas, una de ellas de promocionarlo.

Millonario quebranto

Si las alguna vez inviolables cédulas arbitrales fueron modificadas, con mayor razón un documento interno de algún club. El que fuera vicepresidente del Atlas, Roberto Vergara lo puede comprobar, pues se le metió el demonio de la codicia y se quedó con ocho millones 265 mil pesos, "por concepto de premios extraordinarios por derechos de televisión con la empresa Televisa", según les reportaron a los socios del club rojinegro en mayo pasado.

En la asamblea les pusieron a los socios la imagen de Vergara en una pantalla, mientras daban la información del quebranto económico. Y les reportaron: "A la fecha el responsable ha cubierto en efectivo 2 millones 250 mil pesos y el resto mediante un fideicomiso de garantía de bienes inmuebles en una proporción de dos a uno".

Vergara tenía de plazo hasta enero para pagar, pero ha incumplido. Ahora sabe lo que es estar en el lado de los deudores. "El vicepresidente del Atlas, Roberto Vergara, aseguró que si Tigres no pagaba ayer (lo cual no hizo) solicitarían la reincorporación de los jugadores transferidos (Martín Ubaldi, Juan Carlos Chávez y Miguel de Jesús Fuentes) en una operación aproximada de nueve millones de pesos". (Siglo 21, 22 de julio de 1995). "Nosotros entendemos que puede haber problemas con el patronato que se estaba formando, somos conscientes, pero necesitamos el dinero, podemos ser pacientes, pero no mucho", agregaba la nota.

Como el abuso se dio en la anterior gestión de Francisco Ibarra, circuló una versión de que Vergara lo involucró (en una confesión que quedó documentada) a él y a un representante en ese entonces de Televisa. "Si me quieren involucrar que me involucren; todo lo que yo firmé ya se revisó y fue aprobado", señaló Ibarra, en entrevista telefónica desde Guadalajara.

No le extraña la versión, porque "hay gente del club que no me quiere", pero puntualizó que Vergara, "antes de negociar" con la actual directiva la reposición del daño, lo hubiera señalado a él "o quien fuere; cómo vas a pagar dinero no más por pagarlo".

Recordó que el dinero del contrato "que se firmó en su momento, fue debidamente ingresado" como correspondía. "Que después hallan hecho extras del contrato, pues nada más sacas un papel membretado del club y tú lo puedes hacer. El problema es que la otra empresa, en un momento dado, te lo acepte, que fue lo que pasó, ¿no?".

Tomó esto como amenaza, como que alguien del club desea "que yo me asuste; que uno se desaparezca del mapa, ni que fuera esto la guerra. Pero si es guerra, pues le entramos a la guerra. No me asusta. Yo le entré a la guerra muchos años, allá en el DF. Me amenazaron, me asustaron y me involucraron en muchas situaciones, y mira, aquí estoy vivito y coleando".

Impuestos en la FMF

Lo que también sigue vivo en la FMF es el problema de los impuestos. Cuando a Juan Antonio Hernández, en su calidad de tesorero, se le ocurrió pagar 23 millones de pesos a Hacienda, el responsable del departamento jurídico de la federación, Guillermo Andrés Braham, les explicó a los empleados en una misiva fechada el 4 de junio de 1999, por qué no les dieron reparto de utilidades.

"1. La federación está constituida como una asociación civil, esto significa que no tiene fines de lucro, sino que su objeto social es el de fomentar, organizar, dirigir y difundir la práctica del futbol en toda la República Mexicana.

"2. En toda asociación civil no existe reparto de utilidades por las razones expuestas en el punto anterior.

"3. En caso de que por error, como es el caso, se paguen a Hacienda supuestos impuestos por utilidades generadas, procede la devolución de los mismos por ser un pago indebido.

"4. La federación está procediendo a presentar una declaración complementaria y en su momento tramitará la devolución de impuestos, documentos que se harán de su conocimiento" (La Jornada, 15 de agosto de 1999).

Hasta la fecha, ninguna respuesta positiva han recibido de Hacienda sobre la devolución de los 23 millones de pesos. Pero los empleados de la federación continúan sintiendo que tampoco juegan limpio con ellos los dirigentes. En diciembre pasado, algunos encontraron en sus recibos que les estaban pagando un mes de sueldo por concepto de reparto de utilidades.

Muy tarde, pero parecía una buena noticia. Sin embargo, pronto conocieron la noticia mala. Resulta que siempre cobraban dos meses de aguinaldo, pero en éste diciembre les dieron sólo un mes por ese concepto; el otro era el supuesto reparto de utilidades.