LUNES Ť 19 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Acuerda Hussein reforzar la defensa antiaérea

Siguen los sobrevuelos de EU y Gran Bretaña en el sur de Irak

Ť Se mantendrá la presión, pese a las críticas: Londres

AFP, REUTERS, AP Y DPA

Bagdad, 18 de febrero. Irak aseguró que aviones de combate de Estados Unidos y Gran Bretaña sobrevolaron hoy nuevamente el sur de su territorio, pero agregó que los disparos de su defensa antiaérea "los obligaron a huir", dos días del ataque anglo-estadunidense que dejó tres civiles muertos y más de 30 heridos según un nuevo reporte oficial.

Por lo pronto, la agencia oficial Ina indicó que tras una reunión del presidente Saddam Hussein con altos responsables militares se acordó reforzar la defensa antiaérea, al tiempo que unos diez mil iraquíes se manifestaron en esta capital para repudiar el ataque aliado del viernes pasado ocurrido cerca de Bagdad. Hubo protestas similares en Siria, Egipto y Palestina.

El ejército iraquí indicó que naves de Estados Unidos y Gran Bretaña "procedentes de los espacios aéreos de Arabia Saudita y Kuwait, sobrevolaron las provincias de Bassora, Missan, Zi Qar, Muthanna, Qadissiya y Kerbala (en el sur)" pero los disparos de la defensa antiaérea "los obligaron a huir".

irak31El comandante de la Defensa antiaérea, general Chanin Yassin, aseveró que Irak ha abatido 15 aviones "enemigos", e informó que desde el 17 de diciembre de 1998 los aparatos estadunidenses y británicos realizaron 600 mil horas de vuelo y lanzaron más de mil toneladas de bombas al norte y sur del país

No hubo confirmación por parte de Estados Unidos ni de Gran Bretaña sobre este operativo. Sin embargo, Londres advirtió que mantendrá la presión sobre el mandatario iraquí, pese a las críticas que ha recibido, junto a Estados Unidos, por el bombardeo, mientras el presidente egipcio, Hosni Mubarak, afirmó que Hussein "no es una amenaza para el mundo", en declaraciones al diario italiano La Reppublica.

El viceprimer ministro iraquí, Tarek Aziz, calificó como "inaceptable" la justificación de los bombardeos hecha por Estados Unidos y Gran Bretaña, en el sentido de que fue una operación para defender a los pilotos de ambos países que patrullan las "zonas de exclusión" ante el aumento de la actividad de la defensa antiaérea iraquí.

Medida unilateral

Esas "zonas de exclusión" o de prohibición de vuelos se establecieron en el norte y sur de Irak de forma unilateral tras la Guerra del Golfo, y no cuentan con la aprobación de la ONU. Según Washington y Londres el patrullaje es para defender a la población kurda, al norte, y a los chiítas, en el sur.

Aziz rechazó hablar sobre las implicaciones que tendrá el ataque de hace dos días en la reunión que sostendrá a fines de este mes el secretario general de la ONU, Kofi Annan, y canciller iraquí, Mohammed Said al Sahhaf.

Unas 10 mil personas se manifestaron en la capital iraquí coreando "si a la Jihad (guerra santa), no a la sumisión" y "apoyo total a Saddam para la liberación de Tierra Santa en Palestina". Los manifestantes, entre ellos responsables del partido en el poder Baas, quemaron banderas de Estados Unidos e Israel.

Para la prensa iraquí el bombardeo del viernes fue "un complot estadunidense-sionista", pero el primer ministro israelí saliente, Ehud Barak, afirmó que la población israelí no tiene razones para preocuparse por las amenazas iraquíes, al tiempo que el Ejército israelí anunció que realizará ejercicios conjuntos con el ejército estadunidense a partir del lunes, en maniobras que incluyen el lanzamiento de misiles-antimisiles Patriot.

Barak, quien también es ministro de Defensa, sentenció que "no hay motivos para tomar medidas especiales", después de una reunión con responsables militares israelíes y del servicio de seguridad.

Hasta el momento Irán no ha declarado respecto de los ataques aéreos, mientras Jordania y Vietnam se sumaron a las críticas contra Washington y Londres.

En otras reacciones el primer ministro británico, Tony Blair, recibió fuertes críticas al interior del Partido Laborista, al que pertenece, y del Partido Conservador. Sin embargo, el canciller, Robin Cook, las calificó como injustificadas y dijo que "algunos de los que preguntan por qué (atacamos) habrían sido los primeros en preguntar por qué ya no lo hacíamos y Saddam bombardeara a su propio pueblo desde el aire... cuando (Hussein) todavía podía volar sobre el territorio del norte de Irak, utilizó armas químicas contra los kurdos y volvería a hacerlo si se lo permitiéramos"  .