VIERNES Ť 16 Ť FEBRERO Ť 2001

Cuauhtémoc Cárdenas

Cuatro prominentes empresarios en la administración de Pemex

Recién ha tenido lugar un hecho que merece se le dé atención y seguimiento: el que cuatro prominentes representantes de la vida de los negocios se hayan incorporado al consejo de administración de Petróleos Mexicanos.

El hecho es relevante por lo que pueda representar en el desarrollo de la industria petrolera, sin duda la más importante entre las industrias estratégicas de la nación.

Si en la conducción de Pemex y de la industria del petróleo, que no se reduce a la actividad que realiza el organismo público, se aplicaran los criterios que se siguen en los grandes consorcios hoy representados en el consejo de la paraestatal, tendríamos que ver, entre otras cosas, cambios muy importantes, en aspectos como los siguientes:

a) En el régimen fiscal que se aplica al organismo, de modo que no se le arrebaten las utilidades que genera y con ello su capacidad para invertir en su expansión.

b) En destinar los recursos necesarios para la exploración -lo que permitiría una cuantificación precisa de las reservas, base indispensable para cualquier planeación con racionalidad- y en el desarrollo de nuevos campos productivos;

c) En llevar a cabo las obras que permitan la recuperación de gas -que hoy se quema en volúmenes del orden de los 500 millones de pies cúbicos, sólo en Campeche.

d) En revertir la tendencia de los últimos gobiernos para hacer de Pemex un monoproductor de crudo y lograr que recupere su carácter de organismo promotor de una industrialización diversificada y tecnológicamente de punta.

e) En la práctica de una política que mediante la modernización de las instalaciones y el incremento de sus capacidades de producción sustituya con producciones nacionales la onerosa importación que ahora se hace de gasolinas.

f) En la recuperación de una política de desarrollo que signifique al mismo tiempo integración, modernización y expansión de sus instalaciones y actividades, con lo que se aumentaría el grado de competitividad en los mercados internos y del exterior.

Ahora bien, no puede desconocerse, más allá de lo que diga el ex director de Dupont y hoy director de Pemex, que la presencia de los cuatro destacados hombres de negocios en la administración del organismo plantea un claro y grave conflicto de intereses, pues muchas de las empresas en las que tienen representación los cuatro empresarios, ahora consejeros, son proveedoras, prestan servicios o pretenden prestarlos y aprovisionar a Petróleos Mexicanos.

Esos conflictos dejarían de existir si la administración de Pemex y los cuatro consejeros empresarios tomaran la decisión de hacer que cese todo negocio de las empresas de las que son socios con Pemex, así como que las empresas en las que tienen intereses no realicen, de aquí en adelante y mientras ellos sean consejeros, ningún negocio ni directamente con Petróleos Mexicanos ni con empresas del sector petrolero donde este organismo tenga participación.

De proceder sólo en función del interés público funcionarios y empresarios, y renunciando éstos a todo negocio con Pemex, estarían dando un buen ejemplo de colaboración fructífera entre el sector público y la iniciativa privada, que de darse, debiera traducirse en el fortalecimiento de Petróleos Mexicanos como entidad productiva, con amplia diversificación y sólido potencial de desarrollo, altamente eficiente en el conjunto de sus operaciones y limpio de corrupción.

ƑQué será lo que veremos? Demos seguimiento cuidadoso a las decisiones que tome este consejo de administración, que cuenta con cuatro representantes de la iniciativa privada, para la recuperación y el desarrollo de Petróleos Mexicanos, y en poco tiempo podremos hacer juicios definitivos.