JUEVES Ť 15 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Acto intimidatorio, afirma el perredista Armando Chvarría

Intentan secuestrar a hijos de senador de Guerrero

LA JORNADA/EL SUR

Chilpancingo, Gro., 14 de marzo. El senador perredista Armando Chavarría Barrera, afirmó que el frustrado intento de rapto de sus dos hijos ocurrido anoche en su domicilio de esta ciudad, es un "acto de intimidación de los grupos de poder caciquil en el estado".

Cerca de las 8 de la noche de ayer, cinco hombres armados y vestidos de negro tipo militar, en una camioneta Windstar sin placas llegaron al domicilio del senador en la colonia Vicente Guerrero 200 de esta ciudad.

Con una metralleta, una escopeta y pistolas empujaron hacia dentro de la casa a los dos hijos del senador, Armando de 19 años y Osvaldo de 18, y dos de sus amigos con quienes platicaban sobre la banqueta.

Ya adentro empezaron a golpearlos con las cachas de las pistolas e insultándolos, uno de los hombres vestidos de negro, gritaba: "Súbelos, súbelos", narró la esposa del senador, Martha Idalia Obeso.

Añadió que al momento de que golpeaban a sus hijos, se interpuso ante los agresores y empezó a forcejear con ellos y entonces decidieron emprender la huida.

El senador ofreció una conferencia de prensa hoy acompañado del presidente del PRD estatal, René Lobato Ramírez, diputados locales, regidores, funcionarios de la UAG -de la que fue candidato a rector- y dirigentes perredistas estatales y municipales.

Lobato Ramírez asumió como "una agresión al PRD" la sufrida por Armando Chavarría y recordó que el senador ha participado en movilizaciones recientes en diversos municipios donde la población denuncia a los alcaldes por desvío de recursos públicos.

Exigió al gobernador, a la Procuraduría de Justicia estatal y a la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR), investigar a fondo el intento de secuestro y que le asignen al senador y a su familia una guardia de seguridad.

Por su parte, el director de Averiguaciones Previas de la Procuraduría de Justicia del Estado, Héctor Salvador Calleja Paniagua, descartó que exista un móvil político en los hechos.