SABADO Ť 10 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť ƑQué nos queda? ƑA dónde chingados nos vamos?, clama egresada del IPN
Repudio de jóvenes a la clausura de espacios alternativos en la capital
Ť El Circo Volador, Foro Alicia y otros, ''cerrados por intransigencia de autoridades'': Castillo Bertier
Ť Cada vez más el gobierno del DF se convierte en nuestro enemigo, lamenta Paco Barrios
JORGE CABALLERO
Con la reciente clausura del Foro Alicia, de El Circo Volador y la desaparición de otros espacios alternativos como Caja Dos y Obra Negra se cerraron los únicos espacios a los que los jóvenes capitalinos de los más disímbolos estratos sociales recurrían para escuchar las propuestas musicales, a precios accesibles y populares, de grupos nacionales y extranjeros de corrientes como: ska, surf, hard core, trova, rupestre, blues, expresiones artísticas y literarias paralelas a la oferta comercial e institucional.
El proyecto Circo Volador, que reunió a 125 mil jóvenes en tres años, que igual presentó al inglés Peter Murphy o a los holandeses de Lacrimosa que exposiciones plásticas de artistas noveles, fue clausurado por la administración pasada de la Delegación Venustiano Carranza, a través de la licenciada Patricia Sáenz de la Torre, quien declaró "clausura permanente" el 12 de septiembre para El Circo Volador (Calzada de La Viga 146, colonia Jamaica) por "carecer de licencia de funcionamiento para la prestación de servicio para más de 100 personas".
El sociólogo Héctor Castillo Bertier, director del proyecto El Circo Volador, apunta respecto de la clausura: "se nos exigió crear un estacionamiento para 225 autos, cuando la mayoría de jóvenes que asisten no tienen auto. Funcionamos sin licencia 3 años porque este proyecto es producto de una investigación de 12 años de trabajo para cambiar la percepción errónea que se tiene de los jóvenes; es crear un espacio de identidad juvenil incluyente; creo que su cierre fue una intransigencia de tratar de aparentar que aplicaban la ley. Esas autoridades aplicaron la ley no como una manera neopriísta, más bien como un priísmo neolítico, creo que les ganó el escritorio y el traje".
Más adelante, Castillo apunta: "El Circo Volador, en estos años, juntó a 125 mil chavos con la música, talleres, artes plásticas y proyectos de programas de radio. Hemos entablado un diálogo con la nueva administración para que revisen el origen de nuestro proyecto, no somos Lobohombo. Propiciar una reapertura, para que sea a prueba de sexenios y funcionarios. Pero seguimos trabajando, no dependemos del espacio y seguimos haciendo nuevos proyectos con los jóvenes".
Jueves de rebeldía en el Alicia
El jueves pasado se llevó a cabo el tercer Jueves de Rebeldía en la acera que resguarda el Foro Alicia, con mesas redondas que tratan de la próxima visita del Ejército Zapatista de Liberación Nacional a la ciudad. En esta ocasión participaron el músico rupestre Rafael Catana, el ex Botellita de Jerez Paco Barrios El Mastuerzo; Maco, de Guillotina, e Ignacio Pineda, regenteador del lugar. La mesa convocó aproximadamente a 200 jóvenes, que con sus testimonios del cierre de este tipo de lugares alternativos pusieron en entredicho la política cultural de las autoridades del gobierno capitalino. Estos son algunos de los testimonios del público y de los ponentes.
José Manuel González, estudiante de la carrera de ciencias políticas en la UNAM, opina: "creo que el cierre de estos espacios es algo que va en contra de las expresiones de los jóvenes; pediría a las autoridades que los reabrieran o que propusieran una vía para que tengan cabida las expresiones de los chavos, con las condiciones adecuadas y ahí se trabaje. Porque el trabajo que hace el Alicia es una obligación del gobierno de la ciudad; debe crear espacios para los jóvenes, špor eso votamos por ellos y no por los que estaban!".
La historia de los lugares alternativos en nuestra capital, a decir del estudiante de comunicación de la UNAM, presente también en Jueves de Rebeldía, Abel Muñoz, "es una historia cíclica. Se cierran o mueren por falta de apoyos. Pero con la clausura del Alicia se cerró el único espacio de expresión para las diferentes corrientes del rock subterráneo que existía en nuestra capital. No hay otro lugar donde los jóvenes podamos escuchar música. No hay a dónde ir. Existen las tocadas en los hoyos del estado de México, pero eso implica inseguridad y más varo".
Por su parte, Maco, del grupo Guillotina, opina: "evidentemente está mal que se cierre un espacio como el Alicia, el único donde se podía tocar rock. Finalmente le ponen en la madre a los chavos y a la vida del rocanrol. A lo que están obligando con el cierre de estos espacios es a que las bandas busquen otros lugares en donde son tratados de mala manera, donde a los grupos los ponen a vender una cierta cantidad de boletos y a los asistentes les exigen consumo mínimo. La banda que asiste al Alicia o lugares por el estilo es la banda rocanrolera que vive otra onda, que en su cabeza está pensando en rock y no en varo, no sólo asistir a un lugar y que lo traten como si trajera el signo de pesos en la cara".
Por otra parte, Kenia Ramírez, egresada del IPN, también dio su opinión: "Es demasiado intransigente que nos quiten a los jóvenes un espacio tan importante como estos, parece una cacería de brujas a raíz de la disco Lobohombo, Ƒcuantos años tiene el Alicia?, no ha sucedido ningún accidente y de repente lo cierran, šcomo si fuera el único que tiene malas condiciones de seguridad! ƑQué nos queda como jóvenes? ƑA dónde chingados nos vamos? Mi propuesta sería que el gobierno se debería preocupar por abrir más espacios con el concepto que tiene el Alicia, para que los jóvenes tengamos otra alternativa a lo que nos dan los medios masivos de comunicación".
Pérdida de empleos
Los lugares alternativos también dejaron sin empleo a los jóvenes que han encontrado en esos sitios un modo de sobrevivencia, como Antonio Cruz empleado del Alicia: "La labor que desempeño aquí es como un trabajo, saco dinero para mantenerme y seguir estudiando; desde el momento en que cerraron me quedé sin ingresos, porque es muy difícil que consigas trabajo en otro lado por la manera de pensar o vestir; me afectó mucho".
Ignacio Pineda informa de la situación del Alicia a 26 días de su clausura: "Seguimos trabajando; ya hemos cumplido con todas las obligaciones que nos pidió la delegación y esperamos que en los próximos días nos quiten los sellos; hacer eventos en la calle nos da pena. Tenemos eventos programados: música, video, mesas y la próxima semana viene Rosario Ibarra de Piedra para hablar de los desaparecidos y del contacto con el zapatismo a nivel mundial y en el país. Nos daría pena hacerlo en la calle".
El músico Rafael Catana: "La onda es abrir espacios, pues sólo está el Café de Nadie, el Estrés, en Tlalnepantla, el Alicia y el Circo Volador que se acabó y ya. Cuatro lugares en una ciudad de 20 millones de monos es muy poco, no hay opciones. Es muy chistoso que fuera del DF proporcionalmente hay más lugares: en Guadalajara hay cinco, en Aguascalientes hay cuatro y en Puebla hay tres del mismo corte que los mencionados. Están obligando a las bandas a que se vayan a los hoyos en la periferia de la ciudad, a una marginación y automarginación; por ejemplo la gente de ska se está yendo para allá".
Por último, el ex Botellita de Jerez, Paco Barrios El Mastuerzo concluye: "Horroroso el cierre de este tipo de espacios, lo que he visto de los roqueros, roleros, artistas, trovadores rupestres y la banda en general han mantenido un apoyo para reivindicar sus espacios, donde hay una retroalimentación entre el público y los que se presenten arriba del escenario. Mi experiencia en este tipo de lugares es de censura, cada vez como que te esperas menos y más con un gobierno como el del PRD, con el que tanto tenemos que ver en el surgimiento del CEU en 1987 y en otros movimientos, y te das cuenta de que no son tus amigos sino tus enemigos".