JUEVES Ť 8 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Es necesario adecuar la Ley de Desarrollo Rural, reiteró ante diputados federales
Presentó Usabiaga nuevas reglas de operación de los programas destinados a la agricultura
Ť Se pretende dar certeza jurídica al presupuesto que se dará al Procampo, señaló
Ť Usarán criterios de equidad y estímulo para asignar recursos de Alianza para el Campo
MATILDE PEREZ U.
La Ley de Desarrollo Rural necesita muchas adecuaciones para que deje de ser "una camisa de fuerza" tanto para el Ejecutivo como para el Legislativo, insistió el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), Javier Usabiaga Arroyo, y dijo que un posible veto corresponde al Presidente de la República.
Antes de la reunión con la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados, el titular de la Sagarpa comentó que ha buscado abrir un diálogo con los legisladores de ambas cámaras para ver cómo se enriquece dicha ley.
"Una nueva iniciativa no depende de mí sino de la Presidencia de la República y del Congreso de la Unión; lo que quisiera es una ley más acorde, flexible, y con otras visiones", explicó.
Atención especial a la nueva estrategia
Durante el encuentro con los diputados federales, Usabiaga Arroyo -acompañado por cuatro de sus colaboradores, entre ellos el oficial mayor de la Sagarpa- presentó los detalles de las nuevas reglas de operación para el Procampo, la Alianza para el Campo y el programa especial para los productores de caña de azúcar, café y frijol, y la micro y pequeña agroindustria.
En el caso del Procampo, explicó, "liberamos a los productores de la ignominia democrática, de un calvario y de los focos de corrupción, del vicio financiero en el que se estaba cayendo". Aseguró que este año habrá una atención especial al funcionamiento de esta naciente estrategia y el próximo año habrá nuevos cambios.
Una de esas nuevas formas está prevista en la propuesta de Ley de Capitalización Rural, con la que se pretende dar certeza jurídica al presupuesto destinado al Procampo durante los próximos ocho años. "Sólo espero que los diputados la conozcan y la aprueben".
Aseguró que en el caso de la Alianza para el Campo "se acabó la discreción con la que el secretario de Agricultura asignaba a cada uno de los estados los recursos". Con el nuevo mecanismo, que es perfectible, asignamos los recursos federales bajo un criterio de "equidad y estímulo"; para ello se revisan el producto interno bruto estatal y agropecuario, el padrón de productores y los índices de marginalidad y pobreza, y además el monto que destina cada estado al sector agropecuario, forestal y pesquero.
Correspondió al coordinador de delegaciones de la Sagarpa, Ricardo Boisson García, explicar las abstracciones matemáticas de dichos criterios a los legisladores. "De los 4 mil 273 millones de pesos del presupuesto asignado a Alianza para el Campo, mil 73 millones se destinan a cultivos específicos regionales; de los 3 mil 200 millones restantes se destinaron (cerca de) 2 mil 500 millones a los fideicomisos regionales, por lo que hay disponibles 669 millones de pesos para los estímulos".
Agregó que en la recopilación de los datos estatales se encontró que 15 estados
no destinan ni el uno por ciento de su presupuesto al sector agropecuario, forestal y pesquero. Por ello, con el estímulo se pretende asignar más recursos al sector. Así, "los gobiernos estatales que no otorguen más de 35 por ciento del valor de equidad no tendrán un estímulo, los que sí lo hagan tendrán una parte de esos 669 millones".
La presentación fue tan técnica, que el propio Usabiaga Arroyo bromeó: "gracias por la explicación, pero a todos nos hiciste más bolas".
Respecto del programa de apoyos especiales, el titular de la Sagarpa mencionó que las reglas de entrega para el caso de los productores de café y frijol se publicaron la semana pasada en el Diario Oficial de la Federación, para el caso de los azucareros y la micro y pequeña agroindustria, siguen las negociaciones con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y en breve se publicarán los normas.
Adelantó que en el caso de los cañeros, se acordó ya no entregar los créditos a los productores a través de la industria, con eso se tratará de evitar que los recursos sean utilizados para atender las necesidades de la primera y queden sin ninguna oportunidad los campesinos. "Nuestra idea es formar una verdadera industria de servicio y moderna, que no sea acaparada por una sola persona".
Usabiaga Arroyo comentó a los legisladores que en estos cambios "hay gente que le está apostando a que fracasemos, pero actuaremos con inteligencia y siempre abiertos al diálogo".