MIERCOLES Ť 7 Ť FEBRERO Ť 2001
PAGINA 9
Ť Lourdes Galaz
La madre de las cruzadas
Mexicano, revisa tu Constitución, si la tienes en el armario
Desde 1787, la ley suprema de EU... y tiene 27 enmiendas
Una gran reforma con tamaña zanahoria: la reelección
Una de las ediciones más baratas -o menos caras, como quiera- en librerías, es el texto de la Carta Magna. Porque el presidente Fox convocó a los mexicanos a un debate para la revisión integral del texto constitucional, sería bueno que cada ciudadano tuviera a su alcance un ejemplar de nuestra Constitución para que todo mundo opinara con conocimiento de causa. Bastaría con que el gobierno de la República ordenara a los Talleres Gráficos de la Nación (empresa pública, todavía) una impresión en rústico de la Carta Magna, y que se obsequiara a los ciudadanos que la soliciten en oficinas públicas, terminales del Metro, en escuelas y hasta en las iglesias. Así todos aportaríamos una opinión en esa revisión que propone el jefe del Ejecutivo, aunque lo que se advierte es que no se revisará la Constitución y, como urge Porfirio Muñoz Ledo, se creará una nueva arquitectura constitucional con el sello y la firma de Vicente Fox, y como autor el otro político que alguna vez reclamó el derecho de sangre para alcanzar -también- la gubernatura de Guanajuato.
Por cierto, Ƒvio usted en la tv al señor Fox el 5 de febrero cuando leía el discurso -"esa excelente pieza oratoria, el mejor discurso político de los últimos tiempos", diría Muñoz Ledo, uno de los coautores del texto- ante las fuerzas vivas y redivivas de la nación? Seguramente se dio cuenta de su error, pues inmediatamente corrigió: "Con esta iniciativa me propongo abolir la historia...", leyó, cuando en el papel decía: "con esta iniciativa no me propongo abolir la historia, sino proseguirla". Y es que, con todo oportunismo, Fox quiere ser protagonista de la historia como los héroes que nos dieron patria: José María Morelos y Pavón y su Constitución de Apatzingán, en 1824. El innombrable del sexenio, aquel Benemérito de las Américas y sus Leyes de Reforma en 1857. El presidente Venustiano Carranza y el Congreso Constituyente de Querétaro que dieron vigencia a la Constitución de 1917. Vicente Fox quiere ser el arquitecto constitucional del 2001-200(?), al alimón con su maestro de obras, Porfirio Muñoz Ledo. Sólo que a los dos visionarios guanajuatenses (uno por derecho de sangre, cuentan) se les olvida que su proyecto de nación, el que colma sus expectativas, estaría muy lejos de ser el proyecto de nación de esos 50 millones de mexicanos en pobreza extrema, de esos 10 millones de trabajadores que sufren el desempleo, de esos millones de niños y jóvenes que no tienen acceso a la educación ni a la salud, a una vivienda digna.
Los juristas, los expertos constitucionalistas ya han opinado y seguirán expresando sus reconocidos puntos de vista acerca de la revisión integral del marco constitucional. Un día después de la proclama presidencial ya se advierte que el debate nacional podría no celebrarse. Tal vez se supla por una encuesta de la casa presidencial. El señor Fox, en su discurso del 5 de febrero, adelantó que el grupo que encabezó Muñoz Ledo "ha propuesto y realizó una revisión integral de la Constitución". O sea que la revisión, como era de esperarse, ya la hicieron otros... Pero hay quienes ya opinan: el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Genaro Góngora Pimentel, declara que el proyecto del 5 de febrero es "muestra clara de que hay un líder al frente del país". Contundente, el jurista Raúl Carrancá y Rivas dice que la propuesta de Fox es "una decisión desacertada, inoportuna y totalmente fuera de sentido histórico". Más aún, alerta sobre ciertas tendencias de grupos de poder estadunidenses que sugieren cambios radicales a nuestra Constitución.
Vale la advertencia del maestro Carrancá y Rivas, porque serían precisamente aquellos artículos de la ley fundamental que tienen que ver con los recursos propiedad de la nación y con la rectoría del Estado en materia económica (arts. 27 y 28), ahora que al foxismo le urge la apertura del sector energético al capital privado, hoy que EU ha sugerido la creación de un bloque energético continental (de Alaska a la Patagonia), donde México aparece como su principal aliado. Con la soberanía del Estado (art. 39), en estos tiempos de globalización y en momentos que el Congreso de EU y la OEA sugieren una alianza para la seguridad hemisférica. Con los derechos de los mexicanos al trabajo y a la previsión social (art. 123), hoy que los patrones exigen una reforma laboral para dar cumplimiento a las exigencias de la apertura de mercados y cuando Canadá y Estados Unidos se empeñan en hacer avanzar el proyecto del área de libre comercio de las Américas (ALCA). Y qué decir de las enmiendas al artículo 3o. y la revisión al 130 a las que invita el cardenal Norberto Rivera como vocero de la nueva derecha.
Claro, quienes estiman que cualquier Crítica incide en la desunión nacional habrán de tranquilizarse porque con la gran enmienda constitucional también hay una gran zanahoria con miel para atraer a los mexicanos de buena fe que luchan por los derechos humanos. Dijo Santiago Creel que "será consagrados en la Constitución" (sic), también "el derecho a votar y ser votado" (sic), aunque esté establecido en el art. 35 vigente. Aunque la gran trufa de chocolate es para atraer a los legisladores que votarían a favor de la gran enmienda: šla relección de diputados y senadores! Y, en un descuido, hasta la relección de gobernadores. En el 2003, cuando el Congreso llegue a ser totalmente foxista, podría plantearse la relección presidencial, con todo y su gabinete.
Debate habrá, a querer y no del foxismo. Por eso sería mejor que el gobierno regalara impresiones rústicas de la Carta Magna. Se opinaría con la ley en la mano si es prioritario hoy, hoy, hoy, "renovar la Constitución para consolidar la modernidad" y sobre todo si, como dice Fox, "el ordenamiento (ya) ha sido rebasado". Habría que recordar sin más al mandatario y sus maestros en derecho que allá en aquella nación que tanto admiran y respetan, Estados Unidos, tienen una Constitución promulgada el 17 de septiembre de 1787, a los once años de la proclamación de su independencia. Y hasta ahora, con todo y su reciente fraude electoral, nadie, ni su presidente W. Bush ni su democrático Congreso sugieren tamaña cruzada de cambiar su ley fundamental... Pareciera que eso es de países atrasados donde el hombre en el poder reinterpreta la ley a su antojo, como en el Perú de Fujimori, o se allana el camino a la dictadura como en la Venezuela de Chávez, publica el conservador neoyorquino The Wall Street Journal.
EN 3 TIEMPOS
la clase media urge una reforma fiscal, pero como la de estados unidos
bush si cumple sus ofertas de campaña, y baja impuestos
advierten a fox: sin reformas, habra "medidas dolorosas"
EN CHARLA INFORMAL, el presidente Fox decía que en las naciones ricas la gente paga hasta 40 por ciento de impuestos sobre los ingresos que recibe. "Y todos tan contentos -sonreía- porque los impuestos se convierten en bienestar y en buena pensión cuando el contribuyente deja de trabajar". Pues aquí, le cuento, un trabajador con ingresos de clasemediero paga entre 34 y 38 por ciento de su salario al fisco, más los impuestos por la tenencia y el Renave de su vocho, el predial de su depa, el 2 por ciento del hotel en Acapulco, etcétera. Y por si fuera poco, las alzas de impuestos (desde que usted y yo tenemos memoria) no han mejorado el bienestar de un clasemediero, que ha venido a menos en los últimos tiempos... ƑSerá que con revisar la Constitución se garantiza una mejor calidad de vida?
SIN TANTO ASPAVIENTO, W. Bush sí cumple lo que promete en campaña. Ganó votos ofreciendo bajar impuestos y ya anunció su programa. Claro, al gobierno estadunidense le sobrarán 5 billones 600 mil millones de dólares y Bush se propuso usar 1.6 billones en reducir impuestos. Dice el texano que cada familia de EU, en promedio, recibirá mil 600 dólares anuales adicionales. Y el ahorro fiscal podrá utilizarlo, por ejemplo, en comprar gasolina para dos coches todo un año, o en pagar un mes de la hipoteca de la casa o dos años de electricidad en California. Más aún, la reducción de impuestos significará bajar de 40 a 33 por ciento la tasa marginal más alta de impuestos. Porque, dice el nuevo jefe de la Casa Blanca, "nadie debe entregar al gobierno más de la tercera parte de lo que gana"... Y eso que a Bush ni se le ocurre revisar su Constitución, que es más vieja que la de Apatzingán.
Y A PROPOSITO de reformas fiscales -porque la de EU también lo es-, resulta que la calificadora Standard and Poor's advirtió al gobierno foxista que si el país no mejora sus políticas monetaria y fiscal, al tiempo que amplía la base de contribuyentes y eleva su recaudación de 11 a 18 por ciento del PIB, México no tendrá su estrellita como país bueno o excelente para la inversión. Y es que la influyente correduría afirmó que el ciclo económico de EU puso al presidente Fox "en el peor de los mundos", porque si no logra las reformas legales que requiere (fiscal, de apertura del sector eléctrico y petroquímica, etcétera) el gobierno tendrá que tomar posturas y, sobre todo, "medidas antipopulares". Por cierto, ya el secretario de Economía, Luis Ernesto Derbez, aseguró en el extranjero que "hay un plan de contingencia", más de lo mismo, como decían los priístas... ƑY Fox quiere mejor revisar la Constitución?
Ilustración: Mauricio Gómez Morín / Serie: Zapateando
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