Ť Buscan a toda costa llamar la atención de la Academia
Estudios gastan millones de dólares en publicidad en la lucha por el Oscar
AFP
Los Angeles, EU, 3 de febrero. Aunque falta todavía más de una semana para el anuncio de los candidatos al Oscar, el 13 de febrero, la campaña por la estatuillas más preciada de la meca del cine lleva meses en plena ebullición.
Para ganarse el corazón de los cerca de 5 mil 600
electores de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas
que disponían hasta este pasado viernes para elegir a sus candidatos
al Oscar, los estudios gastaron millones de dólares en publicidad
y las estrellas no tuvieron reparos en mostrarse ante el público.
"Todos hemos estado trabajando hasta el último
momento con la esperanza de llamar la atención de los votantes de
la Academia, para asegurarnos de que vean nuestras películas", declara
Steve Elzer, portavoz de New Line Films que este año apuesta fuerte
con la dramatización de la crisis de los misiles de Cuba Thirteen
Days.
Un pequeño empujón
A veces los electores necesitan "un pequeño empujón" para ver las más de 200 películas en competición, agrega Laura Sosin, de Lions Gete Films, una productora que promueve Shadow of the Vampire.
Lo que está en juego no es sólo el honor del premio, sino también el oro de la taquilla. Un Oscar en la ceremonia del 25 de marzo puede traducirse en millones de dólares entre entradas de cine, vídeo y DVD .
Numerosos actores, entre ellos el niño británico Jamie Bell (Billy Elliot), el veterano Geoffrey Rush (Quills) y la francesa Juliette Binoche (Chocolat) han sido entrevistados en televisión.
Los promotores de la fantasía de artes marciales Crouching Tiger, Hidden Dragon lograron un gran golpe cuando los protagonistas de la cinta, Chow Yun-Fat y Michelle Yeoh, coparon la portada de un número especial sobre el Oscar del semanario Entertainment Weekly.
Los anuncios en la prensa especializada "se han incrementado en los últimos años", explica un responsable de la Academia, Ric Robertson, cuya oficina establece las reglas de la campaña.
Pero el público no percibió realmente el fenómeno hasta hace dos años, cuando tras una agresiva y onerosa campaña Miramax acaparó siete Oscar, incluido el de mejor película para Shakespeare enamorado, que derrotó al claro favorito Salven al soldado Ryan.
La Academia tiene ahora reglas estrictas que prohiben los regalos promocionales, las campañas telefónicas organizadas y las invitaciones a sus miembros a recepciones y otros eventos.
El cambio se produjo a raíz de "la revolución provocada por el envió de cintas de vídeo a los miembros a principios de los 90', explicó Robertson.
"Llamaba más la atención el paquete que todo los demás", agregó.
Las oficinas de premios
Pero eso no ha frenado a las "oficinas de premios" de los estudios.
Lions Gate ofrece "para consideración" de los miembros de la Academía Shadow of the Vampire en los apartados de mejor película, mejor actor (John Malkovich) mejor actor secundario (Dafoe), mejor actriz secundaria (Catherine McCormack) y otras categorías.
"Tratamos de ser optimistas", explica Sosin.
Otros estudios tienen que luchar contra el mito de que los electores tienen la memoria corta.
Erin Brockovich se estrenó en marzo pasado, pero Universal Pictures se gastó recientemente entre 100 mil y 150 mil dólares multiplicados por dos para plasmar la cara de Julia Roberts en un anuncio de doble página a todo color en los diarios Los Angeles Times y en el New York Times.
DreamWorks hizo lo mismo con Gladiador y con Almost Famous .