TIEMPO DE BLUES
Ť Raul De La Rosa
Los Espirituales
Primera llamada
"POR SU PODER para despertar emociones fuertes, la música ha sido desde los primeros tiempos una parte vital de las ceremonias mágicas y religiosas".Ť
EN 1524, MARTIN Lutero escribió: "Me propongo ante el ejemplo de los profetas y de los primeros Padres de la iglesia, escribir para el pueblo himnos en alemán y canciones espirituales''. Esto trajo grandes cambios en la liturgia protestante al hacer partícipes a los feligreses de una forma mas dinámica: cantando.
EN EL SIGLO XIX estos himnos religiosos se les impusieron a los esclavos a partir de una oleada evangelizadora en los estados sureños, aprovechando esa capacidad natural en el canto colectivo que traían consigo desde su natal Africa.
ASI SURGIERON LAS primeras iglesias ?en su mayoría bautistas? para la población negra (juntos pero no revueltos) separación que permanece hoy día.
Segunda llamada
ESTOS CANTOS RELIGIOSOS fueron transformados por la población negra a una escala pentatónica de origen africano en donde se integran elementos que rebasan las estructuras de los originales himnos protestantes: el ritmo, que se lleva principalmente con las palmas de las manos, la formación de grupos musicales con órgano, guitarras y batería, el pastor que lleva su sermón a extremos del paroxismo y la comunidad que responde al unísono, los estados de trance al que llegan algunos fieles, que nos recuerdan las ceremonías de santería y de vudú en culturas del Caribe y las Antillas en las que baja el santo y se posesiona de una o mas personas.
HOY SE LES conoce a estos cantos religiosos como Spiritual´s o Gospel´s (de God Spell, Dios habla), y es una escuela en la que se formaron la mayoría de los blusistas, incluso algunos de elos han compuesto espirituales (Cash Mc Call v.gr.); así, la trinidad musical se integra por los cantos de trabajo, los gospel y el blues,y si los cantos de trabajo quedan como un recuerdo infame, el canto religioso es la esperanza dominical de una vida mejor en el más allá, y el blues son los hechos de la vida, la cruda y a veces triste e irónica realidad, pero no por eso menos alegre, con una fuerza que ha influído a casi toda la música popular de los Estados Unidos.
Tercera llamada
LE HA TOCADO al que esto escribe, presenciar varias de estas manifestaciones y aquí van dos anécdotas: la primera fué en el Festival de Música y Danza Afroamericana al que asistieron grupos de comunidades negras de 10 países de América Latina y el Caribe. Uno de estos grupos era el de Haití. En la función que dieron en la Arena México, los tambores y la danza estaban en su apogeo cuando algunas bailarinas entran en trance, se agitan y caen al suelo convulsionadas. El director del grupo, con la ayuda de los bailarines, las sacan del foro. A mi lado estaba una jovencita garífuna de Honduras que me confesó que nunca había visto una ceremonia como esa y que ellos no entraban en trance. Unos minutos más tarde, la joven garífuna empezó a arquearse en la butaca, pedí ayuda y la sacamos como si fuera una tabla, rígida. La impresión fué mayúscula.
LA SEGUNDA FUÉ en una iglesia bautista en Lafayette, Louisiana (1986). Estaba un preacher (predicador) invitado. Era todo un espectáculo verlo: gritaba, brincaba, gesticulaba y la comunidad le respondía con gritos y la palabra amén. Teníamos (iba acompañado de otra persona) temor de habernos entrometido, pero afortunadamente nos recibieron con sonrisas y nos toman de la mano. El sermón sube de intensidad, todos cantaban y gritaban, pero la mujer que tenía tomada de la mano empieza a convulsionarse, quería soltarme pero tenía tal fuerza que resultó imposible. El predicador se acerca y le pone la mano en la frente para calmarla. Al final nos preguntó hacia donde íbamos, contestamos que a Nueva Orleans y nos bendijo poniéndonos sus manos en la frente. Ya en el auto tardamos más de media hora en pronunciar palabra, no había por qué.
¿Que escuchar?
MAHALIA JACKSON. CUALQUIER disco que compren de esta cantante, considerada como las más grande interprete de Gospel, es excelente, por lo que no recomendamos ninguno en especial. Todos son extraordinarios, así de sencillo.
ŤElie Siegmeister/ Música y sociedad.