MARTES Ť 30 Ť ENERO Ť 2001
Ť Magistrado Fernando Ojesto: el conflicto "tiene muchas soluciones" por la vía legal
Pide De la Peza a priístas cordura para realizar comicios en Yucatán
Ť La soberanía que defienden es del estilo Luis XV; todo el poder para una persona, dice
MIREYA CUELLAR
El magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial José Luis de la Peza hizo a los diputados priístas del Congreso yucateco un llamado a "la cordura" para que el proceso electoral de esa entidad pueda desarrollarse.
Consideró que el concepto de soberanía que los legisladores del PRI están defendiendo es "de estilo Luis XV, de todo el poder concentrado en una persona".
Apuntó que el tribunal está en contra de esa concepción de soberanía porque la verdadera reside en el pueblo y se ejerce mediante la designación de sus autoridades en un proceso electoral limpio, sano, y ésta es la que "estamos protegiendo".
Cualquier solución podría ser un buen camino a seguir
En tanto, José Fernando Ojesto, presidente del Tribunal Electoral, señaló que el conflicto yucateco tiene "muchas soluciones", y que cualquiera de ellas que sea legal podría ser un buen camino a seguir.
Entrevistado en las instalaciones de dicho órgano, donde se concentraron sus miembros para escuchar al politólogo italiano Giovanni Sartori, consideró que la integración de un tercer consejo en Yucatán que organice las elecciones podría ser una solución, pero que tendría que darse el procedimiento dentro de la ley.
Precisó que el tribunal no le corresponde determinar que solución es buena o mala, porque lo único que se debe buscar es "una salida legal".
Cuando se le interrogó sobre la posibilidad de recurrir a medios coercitivos, dijo que si es necesario "también se tendrían que utilizar todos los instrumentos que da la ley para vencer la oposición de las voluntades".
Explicó que el tribunal está a la espera de las acciones que tome el Consejo Estatal Electoral por el designado y que si hay algún obstáculo en sus operaciones tiene la posibilidad de pedir que se remuevan.
Insistió en que el tribunal sólo actúa a petición de parte, es decir, no tomará decisiones sola.