Ť Cuervos buscará por primera vez el título de la NFL; Gigantes va por el tercero

Domingo de gloria o fracaso

Ť Los entrenadores de Baltimore y NY son buenos amigos y les encanta atacar por aire y tierra

Tampa, 27 de enero. Gracias a su férrea defensa, que estableció varios récords durante la temporada regular, los Cuervos no dependen mucho de lo que haga su ataque. Incluso, hubo un tramo de la campaña, cinco partidos consecutivos, en los que no anotaron ningún touchdown.

Fue precisamente durante ese lapso en el que Trent Dilfer se apoderó de la titularidad como quarterback, y los Cuervos tienen una foja de 10-1 desde entonces.

Lo único que se le pide a Dilfer es que no cometa errores y que, de vez en cuando, complete una jugada fulminantes, como el pase de 96 yardas al ala cerrada Shanon Sharpe, que fue la única anotación en la victoria 16-3 sobre los Raiders de Oakland en la final de la Conferencia Americana.

Los Cuervos les darán el balón a sus acarreadores, Jamal Lewis, quien acumuló mil 364 yardas en su año de novato. Sharpe es el blanco favorito de Dilfer, al igual que Qadry Ismail.

Pero se anticipa que será muy difícil que la fórmula de entregarle el balón a Lewis prospere ante Nueva York, la segunda mejor defensa, detrás de los de los Cuervos, contra el ataque por tierra. El defensivo Keith Hamilton tuvo la mejor temporada de su carrera. Aterrorizando a más de un quarterback. También sobresalen su compañero de formación Michael Strahanb, además de los linieros Jessie Armstead y Mike Barrow, entre los más ágiles de la liga.

A comienzos de la temporada, la secundaria de los Gigantes fue muy vulnerable a los pases de larga distancia, pero ha mejorado enormemente. Los esquineros James Sebornb y Dave Thomas anularon a sus rivales en playoffs.

Al igual que Baltimore, los Gigantes dependen bastante de la defensa y por ello su ataque suele ser conservador. No obstante, la ofensiva de Nueva York figuró a mitad de tabla entre todas las demás de la liga. El quarterback Kerry Collins lanzó para 3 mil 610 yardas, pero esas cifras seguramente tendrán poco valor ante los Cuervos. Encabezados por el medio liniero Ray Lewis, el mejor defensor de la NFL, los Cuervos se dieron el gusto de maniatar a los ataques más fuertes, como el de Oakland, el equipo más prolífico de la liga en cuanto a yardas por tierra. Es muy probable que los Gigantes busquen el pase primero y luego traten de ganar terreno por tierra.

Amand Toomer fue el primer ala receptor de los Gigantes en lograr temporadas consecutivas con más de mil yardas en casi cuatro décadas. Collins tiene otros blancos peligrosos en Ike Hilliard, Joe Jurevicius y el novato Ron Dixon. El corredor Tiki Barber fue el segundo mejor del equipo en pases capturados y el fullback Greg Comella es otra opción viable. El temido Lewis es acompañado por los mastodontes Peter Boulware, Jamie Shrper, Sam Adams y Tony Suragusa. Los Gigantes buscarán correr con Barber y Ron Dayne.

Equipos especiales

El pateador de Baltimore Matt Stover prácticamente cargó con la ofensiva del equipo durante las primeras cinco semanas de la temporada en las que Baltimore no anotó touchdowns. Stover, completó 35 de sus 39 intentos de gol de campo, entre ellos 14 desde distancias obre las 40 yardas. Jermaine Lewis anotó dos touchdowns al devolver patadas y fue el mejor en esa categoría en la NFL. Barber es el encargado de retornar las patadas por los Gigantes, a pesar de que se rompió el brazo al final de la temporada. Dixon anotó un touchdown de 97 yardas tras una patada en la victoria 20-10 sobre Filadelfia en los playoffs. Un punto débil es el pateador Daluiso.

Jim Fassel de los Gigantes y Brian Billic de los Cuervos son grandes amigos. A ambos les fascina atacar, pero les ha tocado dirigir equipos que sobresalen en la defensa. Los Gigantes se han alzado dos veces con el Super Bowl, en 1987 y 1991, la última vez que la final de la NFL se disputó en Tampa. Baltimore nunca lo ha ganado, al igual que los Cafés de Cleveland, el equipo precursor de los Cuervos.

En tanto, Marv Levy y seis jugadores más fueron elegidos para ingresar al Salón de la Fama de la NFL.

Además de Levy, fueron admitidos Lynn Swann, Roy Yary, Jackie Slater, Nick Buoniconti, Jack Youngblood y Mike Munchak. (AP)