DOMINGO Ť 28 Ť ENERO Ť 2001
Opiniones y paradojas

Pío Baroja

La agudeza de un escritor

El escritor vasco Pío Baroja (San Sebastián, 1872-Madrid, 1956) cedió continuamente a la tentación de verter en su extensa obra opiniones, juicios y sentencias sobre una variedad de asuntos. Esta semana empieza a circular en México el libro Opiniones y paradojas, que incluye una selección de aforismos hecha por Miguel Sánchez-Ostiz, en la cual se trasluce la agudeza y actualidad del prolífico autor donostiarra perteneciente a la generación del 98. Con autorización de Tusquets Editores presentamos a nuestros lectores algunos fragmentos del volumen.

[a contrapelo] Para los que no dependemos del público, ni nos importa el ambiente periodístico, la opinión general no nos intranquiliza. Hay que nadar contra corriente; eso es todo. [1918]

[adulterio] El adulterio es a veces crimen, es a veces delito, a veces falta; es a veces, en los pueblos en que no existe el divorcio, un derecho, el derecho que todos los hombres tenemos al amor y a la felicidad. (...) Presenta diversos grados de inmortalidad, según las clases sociales en donde se presenta. (...) Creo que el divorcio es la única solución humana del conflicto; creo que España debe irse preparando para implantarlo. [1904]
PIO, PIO, PIO
[afinidades] La gente muchas veces quiere encontrar motivos ideológicos para su antipatía, y la mayoría de las veces no los hay; es el instinto el que reina, como entre los animales; las rivalidades y los celos. [1941]

[amor] Al que llevado por una gran pasión de amor salta por encima de la ley, no hay que vituperarle, sino aplaudirle. El hombre o la mujer que cometió un error, al unirse a su cónyuge, y al reconocer este error, lo destruye, salvando su individualidad, hace bien. Sólo los mezquinos y los miserables pueden condenar y acusar al que, llevado por una gran pasión, rompe todas las leyes de la sociedad para imponer por su fuerza el derecho de su pasión.

El amor, que es el principio y el fin de la vida, tiene todos los derechos; el hombre del Renacimiento no debe de reconocer obstáculos a la felicidad de dos seres humanos. [1904]

Hay que jugar limpio o con trampas. Para jugar limpio, no hay que hacer trampa ninguna, ni pequeña ni grande; pero si se hacen trampas, no se puede pedir limpieza en el juego al adversario.

Es lo que ocurre ahora con el juego amoroso, con la lucha de sexos. Se juega siempre sucio. El uno engaña, la otra también. ¿Cómo exigir lealtad en el adversario o compañero? [1933]

Al español le indigna que se diga que su vida amorosa es, en general, pobre, sin dramatismos; pero así es, ¡qué le vamos a hacer! Yo creo que el país rural que no es rico no tiene una ética libre. Solamente en los países industriales y comerciales de clima blando es donde se destaca la personalidad de la mujer y triunfa el amor apasionado. [1944]

 

Me han achacado la falta de amor. En eso de la falta de amor, en gran parte es evidente, si se me compara con los místicos; ahora no sé si se me compara con la gente corriente. Creo que por muy fea que se presente la humanidad al místico, al hombre de espíritu piadoso y caritativo no le hará nunca que la odie. Sea cristiano, budista o librepensador, espere algo de su acción o no espere nada, no hará que cambie el amor en odio. El asesino cruel o la mujer perversa serán sus hermanos y los compadecerá. [1944]

[autoridad] Nadie se puede burlar claramente del que tiene posibilidades de meterle a uno en la cárcel ipso facto, como dicen los que quieren lucir algunas palabras en latín. [1945]

[catolicismo] Como disciplina moral, no creo en el catolicismo. Yo, prácticamente, no me fío más en el católico fervoroso que en el hombre de poca religión. (...)

Desde un punto de vista cultural el catolicismo es una fatalidad, porque el catolicismo español, y sobre todo el vasco, no es el catolicismo yanqui, ni el alemán, ni el francés, ni el romano, es el catolicismo exasperado que forma el cuadro. Los pueblos vascos viven en plena teocracia, el cura interviene en todo. La gente cree que el párroco puede mandar, y como los alcaldes en general son pobres diablos, mandan de hecho. (...)

-Usted cree que de todo tiene la culpa el cristianismo.

Y es cierto. (...) Si no hay escuelas y la gente no sabe leer es porque el cura les convence de que la verdad está en rezar y  no en leer; si las alcantarillas están sucias y hay enfermedades, es porque el cura está convencido de que sólo Dios da y quita los males; si la gente no es capaz de dar un céntimo para cosas del Municipio, es porque todos sus ahorros los gasta en la iglesia en escuchar el latín de cocina de los clérigos. [1918]

[condición humana] Quizás esta posibilidad de ser desgraciado sea uno de los motivos de la grandeza del hombre. [1933]

[democracia] ¡Oh la democracia! Es la palabra más insulsa que se ha inventado. Es como la pirueta del cómico de mi pueblo, la mayoría ni sabemos lo que es democracia ni lo que significa, y sin embargo, nos sugestiona y nos hace efecto. Como la música cancanesca de Offenbach, los aires democráticos nos dan ganas de echar los pies por alto y de amenazar con la punta de la bota la nariz del vecino. [1904]

[intimidad] Nuestra época se ha hecho absolutamente imposible. Ya no se puede ni escribir ni pensar, como podía hacerse antes. Ya no se acepta que cada uno quiera vivir con su pequeña vida interior, sin dar al público lo que es naturalmente privado. [1955]

[mujer] La mujer es casi siempre realista, optimista y social; lo que hacen los demás tiene siempre mucha fuerza para ella, y el camino solitario del inadaptado no la seduce. En el inadaptado ve un energúmeno o un pedante. [1945]

[oficio de vivir] La vida se va haciendo cada vez más pobre y más miserable. Como remedio al instinto sexual, el prostíbulo; como resolución por la lucha por la existencia, la intriga y el engaño; como diversión el fútbol y los toros. La literatura y el arte secos, la ciencia moderna que el hombre medianamente culto no la entiende. Guerras civiles y guerras internacionales a cada paso. Las utopías echando a los hombres al crimen, sin libertad posible de opinión. Esta pobre Europa va mal, cada vez peor. [1947]

[pubertad] El despertar de la pubertad en una de nuestras ciudades levíticas era algo grave. Lo seguirá siendo aún, aunque quizá no tanto.

Al llegar a ese periodo, hay que inocularse varios virus para reaccionar normalmente, vacunarse para las alergias de la vida psíquica. Si se resiste a estas inoculaciones se queda uno inadaptado para siempre. [1944]