SABADO Ť 27 Ť ENERO Ť 2001

Rosario Robles Berlanga

Se impondrá la juventud en el PRD

La ex jefa del Gobierno del DF admite que la derrota del 2 de julio reflejó el alejamiento que tuvo el partido del sol azteca con sus bases, pero confía en que con el liderazgo de Cuauhtémoc Cárdenas se recuperará el terreno perdido y se creará el partido que necesita México

JOSE GIL OLMOS

Instalada como uno de los actores principales en el escenario de transformación del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Rosario Robles Berlanga reconoce la crisis por la que atraviesa su partido luego de la derrota electoral sufrida el 2 de julio del 2000. A pesar de ello, su optimismo se desborda y prevé una recuperación pronta y el fortalecimiento del perredismo, así como la llegada de una nueva directiva nacional joven, impulsada por Cuauhtémoc Cárdenas, que rescate la credibilidad ciudadana perdida en las elecciones pasadas.

Para la ex jefa del Gobierno capitalino, el descalabro en la pasada elección presidencial no socavó la figura de Cárdenas como algunos piensan.

Lista para la respuesta a botepronto, en entrevista con La Jornada asegura que su partido está preparado para la refundación, para recuperar la confianza de los movimientos sociales que le dieron origen y hacer frente al gobierno neoliberal y de derecha conservadora, como caracteriza a la administración de Vicente Fox.

Rosario Robles, junto con Cuauhtémoc Cárdenas y un grupo numeroso de perredistas, presentaron la semana pasada un documento de propuesta de cambio para el partido del sol azteca en el que plantean la necesidad de renovar las alianzas políticas, sociales y ciudadanas. Ahora, en entrevista, reconoce que el "revés" del 2 de julio fue parte del alejamiento que el PRD tuvo de la sociedad en los últimos años.

"El haberse ensimismado, el haberse simplemente volteado a ver hacia el interior y haber roto esos puentes con la sociedad, con las aspiraciones del pueblo de México y con sus luchas, tuvo un gran costo político", acepta desde el inicio.

Sin embargo, ataja los horizontes catastrofistas y sostiene que "si bien existió un revés en el plano electoral, nuestro partido tiene un gran arraigo, tiene una gran historia, tiene una gran autoridad moral, tiene liderazgos fuertes y reconocidos, tiene todo para reconstruirse, refundarse, regenerarse".

Dice que la crisis en el PRD es parte de la que también sufren PRI y PAN al cabo de la última elección presidencial, en la que terminó el régimen de partido de Estado, pero en el caso perredista, afirma que se trata de una crisis que se está asumiendo de una forma positiva, porque ya se discute en el Consejo Nacional los futuros cambios que habrán de concretarse en el sexto Congreso Nacional, a efectuarse en abril en Zacatecas.

Identidad a prueba de fracasos

No obstante, aclara que al dejar de gobernar el PRI, el PRD ha tenido que modificar de cierta manera su programa de lucha. "ƑQuiere decir esto que vamos a perder nuestra identidad? No, seremos un partido de izquierda moderno, propositivo, plural, tolerante, con un perfil claramente definido; un partido que sabe que es alternativo al proyecto que hoy nos gobierna, y que así como era alternativo al proyecto del PRI, lo es ante Fox y la propuesta del PAN".

Segura de un futuro prometedor del PRD como partido de opción y de gobierno, considera que en la medida en que las expectativas generadas por Fox no se cumplan, el desencanto en ciertos sectores sociales podría ser capitalizado por el partido para encabezar todas estas luchas y presentar propuestas que tengan que ver con el sentimiento mayoritario de la población.

-ƑY si no se aprovechan estas circunstancias qué podría suceder?

-Bueno, los riesgos son enormes, perder nuestra identidad y todavía más: la co nfianza de la gente, pero yo creo que hay la suficiente madurez, visión y perspectiva de la dirección de nuestro partido para conducir a un buen puerto este proceso de refundación del PRD.

-ƑCómo quedó la figura de Cárdenas después de la derrota del 2 de julio?

-Cuauhtémoc Cárdenas sigue siendo un líder... el líder opositor hasta el momento más importante en este país, un estadista con una gran autoridad moral, una gente que trasciende las fronteras del PRD y que evidentemente seguirá jugando un papel muy importante en toda esta lucha por la transición democrática.

"El es un activo del PRD, un patrimonio de los perredistas, ocupa un lugar y seguirá ocupándolo en todo este proyecto político. Pero al mismo tiempo que tenemos ese liderazgo histórico, tenemos nuevos liderazgos de toda una generación digamos emergente, que tiene hoy la responsabilidad y la oportunidad histórica de conducir a la izquierda de nueva cuenta a una posición de mayoría a nivel nacional".

Sustituta de Cárdenas en el gobierno capitalino, Robles agrega que nadie, ni adversarios, ni aliados, puede regatear el papel que jugó Cuauhtémoc en estos últimos 12 años para lograr esta derrota del régimen de partido de Estado.

-ƑLa directiva es un dique para el cambio generacional en el PRD?

-Al contrario, Cárdenas es el más promotor (del cambio), a mí me tocó vivir directamente la experiencia con él en el Gobierno del Distrito Federal, y si hay alguien que ha alentado a una generación más joven, y además mujeres, para que asumamos estas responsabilidad se llama Cuauhtémoc Cárdenas. Y a mí, en todo el tiempo que estuve al frente de la jefatura de gobierno, jamás me pesó su figura y nadie puede decir ahora que yo soy títere o fui títere de Cárdenas.

"Yo lo veo como un promotor de este nuevo liderazgo, como una gente que sabe y que al frente del partido tendrán que estar nuevos liderazgos y así lo ha promovido. Lo he vivido y también está el caso del apoyo incondicional a López Obrador".

-ƑQué papel va a jugar usted en este proceso de cambio?

-Pues como una militante más que hoy tiene la posibilidad de contribuir a toda esta discusión, a esta reflexión. Tengo el interés de que todo este debate no sea de corrientes o de unos cuantos que ocupamos puestos al interior del partido, sino un debate de ideas, de lo que debe ser nuestra plataforma política en esta nueva etapa del país, dentro de un contexto de globalización y donde nos gobierna un partido diferente al PRI.

El proyecto neoliberal

Como parte del papel que ahora debe desempeñar el PRD, Robles no descarta llegar a acuerdos con el gobierno de Fox en el Congreso de la Unión para avanzar en la cobertura de las necesidades sociales de la población. "Acuerdos transparentes, de cara a la nación, no alianzas, porque con Fox tenemos proyectos diferentes, en lo económico él representa el proyecto neoliberal y no puede haber democracia, ni régimen de libertades, si esto se construye sobre la pobreza y la desigualdad".

Cambio, la actitud clave

De la propuesta de cambio del PRD que presentaron en el Polyforum Siqueiros, Robles Berlanga insiste que no es la presentación de una nueva corriente.

"Es una convocatoria abierta a la militancia del partido, independientemente de que sean corrientes, a la base para que discutamos una propuesta política y dejemos la pugna interna, que entendamos que todos somos compañeros, que estamos en un partido que ha luchado. Se trata de una invitación a la discusión de ideas y de propuestas políticas frente a la globalización, frente al gobierno de Fox y su Estado gerencial".

Para cerrar, Rosario Robles aleja por el momento las versiones de que aspira a la presidencia nacional del PRD, en lugar de Amalia García. "Pues ahorita no está planteada en el orden del día", contesta entre risas, anteponiendo a la sucesión otras tareas importantes como ganar en las elecciones de Michoacán, Tabasco y Chiapas, apoyar la marcha del EZLN y concretar los cambios necesarios en el perredismo. "Lo que necesitamos es un nuevo partido para México y no una nueva o un nuevo dirigente para el PRD", acota.