Ť Comenzamos un periodo complicado, dicen feministas
Corta Bush toda ayuda financiera a instituciones que
apoyan el aborto
AFP, AP Y REUTERS
Washington, 22 de enero. El presidente George W. Bush realizó un primer gesto hacia los conservadores estadunidenses, al anunciar hoy el corte de toda asistencia financiera a organizaciones internacionales que apoyan el aborto, restableciendo así una medida aplicada por el presidente republicano Ronald Reagan en 1984 y luego mantenida por su sucesor, George Bush padre.
"Es mi convicción que los fondos de los contribuyentes no deberían ser usados para pagar abortos, defenderlos o fomentarlos, ya sea aquí o en el extranjero", escribió en su primer memorando ejecuivo dirigido a la Agencia Internacioal de Desarrollo, que supervisa la asistencia de planificación familiar a los países extranjeros.
De esta manera, el mandatario republicano revirtió la política del gobierno de su antecesor, el demócrata Bill Cilnton, que brindaba asistencia irrestricta para la planificación familiar.
Kate Michelman, defensora del derecho al aborto, consideró que Bush "está usando sus poderes de una manera agresiva para socavar el derecho de la mujer a elegir, y allanar así el camino para revertir Roe versus Wade", el caso que exactamente hace 28 años consagró el derecho constitucional de las mujeres a abortar, invalidando una ley del estado de Texas que prohibía el aborto.
Otra de las preocupaciones de las feministas es la designación de John Ashcroft, ultraconservador y cercano a la derecha cristiana, en el puesto de Fiscal General.
"Temo que estemos ingresando en un periodo complicado en el cual deberemos luchar", afirmó este lunes Betty Friedan, considerada la "madre de las femnistas estadunidenses".
Bush emitió además una declaración de apoyo a los miles de manifestantes contra el aborto que se reunieron en el centro de Washington: "Las promesas de nuestra Declaración de Independencia no son sólo para la gente poderosa, independiente (...) Son para todos, incluyendo los niños que aún no han nacido".
Aunque el mandatario ha dicho que no intentará prohibir la recientemente aprobada píldora abortiva Ru-486, el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Andrew Card, dijo la víspera que esa regulación será revisada.