LUNES Ť 22 Ť ENERO Ť 2001
Ť Anuncia el presidente salvadoreño programas de ayuda
Sólo se atiende a 10 por ciento de los 750 mil damnificados, admite Flores
CARLOS RAMIREZ CORRESPONSAL
San Salvador, 21 de enero El terremoto que sacudió a El Salvador hace una semana dejó 750 mil damnificados, pero sólo 10 por ciento de ese total es atendido, reconoció el presidente Francisco Flores, quien anunció hoy un programa de ayuda a los municipios más afectados, a fin de que sean distribuidos entre las familias que perdieron sus viviendas.
Flores reconoció anoche que la ayuda para la población no está llegando a todo los lugares afectados por el terremoto y que las labores de atención se han desarrollado con mayor énfasis en 28 lugares, a pesar de que son 97 los sitios afectados.
El presidente trató de justificar la deficiente distribución de la ayuda bajo el argumento de que se canaliza primariamente hacia los más necesitados.
Las autoridades del Comité de Emergencia Nacional, que ubicó el número de muertos en 704 y el de heridos en 3 mil 883, ha abierto unos 84 albergues para atender a los afectados en todo el país, pero su capacidad se ve rebasada.
Flores, blanco de duras críticas de la prensa y de la población en general por su demora en la entrega de ayuda, anunció hoy un programa para entregar fondos a los alcaldes de 10 de los 28 municipios calificados como prioritarios.
Se estima que la operación en su fase inicial beneficiará a unas 8 mil 335 familias de esos 10 municipios del este y noroeste del país con un total de 714 mil 428 dólares. El mandatario dijo que la asignación de recursos es parte todavía de la etapa de emergencia, tras señalar que posteriormente vendrá la etapa de rehabilitación del país y sólo entonces la de reconstrucción.
En ese sentido, el Programa Mundial de Alimentos de la Organización de Naciones Unidas, formuló la víspera un llamado internacional para canalizar ayuda para la reconstrucción de El Salvador.
Más tarde, Flores puso en marcha el plan Pueblo Valiente mediante el cual distribuirá de forma descentralizada donativos de la comunidad internacional a la población afectada. Así, la distribución de alimentos se realizará desde la base aérea de Comalapa, a 44 kilómetros al sureste de San Salvador, en el departamento de La Paz.