LUNES Ť22 Ť ENERO Ť 2001
Ť Durante el fin de semana afectaron a 75 mil hogares durante 20 minutos
Siguen los cortes de electricidad en California
Ť Inesperada baja en la producción hidroeléctrica en el noroeste forzó la medida
AP
Sacramento, California, 21 de enero. Este fin de semana las autoridades de California volvieron a imponer un plan de emergencia que incluyó apagones rotativos, debido a una nueva baja en la capacidad de abastecimiento de energía eléctrica en el estado. El hecho afectó a cerca de 75 mil hogares californianos durante 20 minutos.
La Operadora Independiente de Sistemas (ISO, por sus siglas en inglés) a cargo de la energía eléctrica de California había vaticinado una reducción de la demanda para el fin de semana; sin embargo, una inesperada baja en la producción hidroeléctrica en la región del noroeste forzó la imposición de un alerta sin precedentes. La decisión se dio en el momento en que las reservas llegaron a 1.5 por ciento.
Las autoridades esperaban no tener que imponer nuevos apagones, pero estos fueron necesarios cuando la demanda superó a los operadores por tercer día en menos de una semana.
Al mismo tiempo que se imponía el plan de emergencia que será extendido hasta este lunes, las autoridades estatales junto con la legislatura estatal discutían este fin de semana ideas para un plan a largo plazo que rescate de la ruina económica a las compañías privadas Gas and Electric Co. y Southern California Edison.
Estas compañías habrían intentando pasarle la factura a los consumidores mediante aumentos de las tarifas mensuales, pero las normas que regulan la industria los prohibieron.
En una medida de emergencia, el gobernador Gray Davis ordenó recientemente la compra temporal de energía a productores mayoristas para suministrarla a instalaciones de servicio eléctrico. El costo de la medida le acarrearía al estado cerca de 400 millones de dólares, pero se calcula que podría servir para una semana o dos.
Desde la semana pasada cientos de miles de usuarios en el norte del estado habían sido afectados por los apagones, y casi medio millón de consumidores sufrieron interrupciones de energía en ciudades como San Francisco y Sacramento.
El sur de California, donde reside la gran mayoría de la población del estado, se salvó del plan de emergencia debido a que la ciudad de Los Angeles cuenta con sus propios recursos para satisfacer la demanda.