SABADO Ť 20 Ť ENERO Ť 2001

Ť Afirma la escritora Elena Poniatowska en radiodifusora de Veracruz

Fox no tiene autoridad moral para exigir al sub Marcos se retire el pasamontañas

Ť La capucha, signo de identificación que en 16 años se han ganado los zapatistas, señala

ANDRES T. MORALES CORRESPONSAL

Veracruz, Ver., 19 de enero. Ni el gobierno de Vicente Fox Quesada ni los miembros del Congreso de la Unión, en especial el coordinador de los senadores panistas Diego Fernández de Cevallos, tienen la autoridad moral para exigir al subcomandante Marcos y los demás jefes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) a que se retiren el pasamontañas en su visita al Distrito Federal, manifestó la escritora Elena Poniatowska.

La capucha es un signo de identificación que durante 16 años se han ganado los zapatistas y únicamente ellos deben decidir cuándo descubrirse el rostro y esto no debe ser tomado como pretexto para bloquear cualquier intento de dialogo, afirmó.

En breve entrevista concedida a una radiodifusora local, la autora de La Noche de Tlatelolco fustigó a quienes intentan desprestigiar el arribo de los zapatista a la Ciudad de México durante los primeros días de marzo y donde vendrán los líderes del EZLN.

Sin mencionarlos directamente, se refirió en especial a algunos asesores del presidente Vicente Fox y a Fernández de Cevallos, quienes han expresado su condena a que el gobierno y los legisladores dialoguen con encapuchados.

No veo ningún problema en que los zapatistas ingresen encapuchados en nuestra querida ciudad, señaló.

También criticó a quienes comparan al subcomandante Marcos con Ernesto Guevara, pues dijo que el líder zapatista es una figura superior y ya tiene un lugar asegurado en la historia de México.

El Che Guevara es alguien admirable pero tuvo muchos errores estratégicos como el ir a pelear en otro país donde murió junto con muchos compañeros y Marcos está ayudando a su propia gente, a los indígenas de México, dijo.

Se dijo confiada en que Fox Quesada cumpla con su palabra de buscar una solución negociada al conflicto chiapaneco y demuestre una verdadera disponibilidad para otorgar las garantías y derechos a las etnias del país.