MARTES Ť 16 Ť ENERO Ť 2001

Resistencia en algunas zonas a la presencia militar


Entra el Ejército a Iztapalapa

SUSANA GONZALEZ Y BERTHA TERESA RAMIREZ

La llegada de más de un centenar de oficiales y soldados del Ejército a la delegación Iztapalapa, al oriente de la ciudad de México, para ejecutar labores de asistencia social, despertó una polémica entre la población, dentro del PRD y también al interior del aparato gobernante.

Mientras muchos pobladores y el propio delegado de la demarcación política apoyan la presencia militar y consideran necesario sumar la intervención de la Policía Federal Preventiva (PFP) para el combate contra la delincuencia, el jefe de Gobierno y el PRD rechazan la intervención de la PFP y subrayan la labor asistencial de los miembros del Ejército.

iztapalapa-servicios-5No obstante, desde las delegaciones Milpa Alta, Azcapotzalco y Cuajimalpa, sus delegados han hecho llegar al gobierno de la capital su petición para obtener la ayuda militar en las demarcaciones que gobiernan y ya se empiezan a crear programas asistenciales de apoyo a la población.

El jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que el Ejército no puede ocuparse de asuntos que le corresponden a la policía e insistió en que, según los reportes del comportamiento de la delincuencia en la capital, "sin triunfalismos puedo afirmar que la situación está bajo control, que hay gobernabilidad y que incluso se están abatiendo los índices delictivos".

También explicó que la presencia militar o de cualquier policía de nivel federal en el DF es una facultad del jefe de Gobierno. Al respecto, el líder del PRD en el DF, Carlos Imaz, se manifestó por fortalecer la legalidad civilista consagrada en la misma Constitución, producto dijo, "de la historia de nuestro país".

Para confirmar su dicho señaló el artículo 129 de la Carta Magna, en donde se apunta que "en tiempos de paz ninguna autoridad militar puede ejercer más funciones que las que tengan exacta conexión con la disciplina militar. Solamente habrá comandancias militares fijas y permanentes en los castillos, fortalezas y almacenes que dependan inmediatamente del Gobierno de la Unión; o en los campamentos, cuarteles y depósitos que fuera de las poblaciones estableciere para estación de tropas".

Por su parte, el coordinador parlamentario del PRD en la Asamblea Legislativa, Armando Quintero, dijo que las labores del Ejército en Iztapalapa no significa que las heridas que dejó la actuación en la SSP de los militares en la Colonia Buenos Aires, tras el secuestro y ejecución de seis jóvenes en 1997, se hubieran restañado.

Dijo que el Ejército no está perdonado por la flagrante violación a los derechos humanos en que incurrió al detener de manera ilegal en un operativo a seis jóvenes, a quienes después se halló asesinados.

Ayer por la mañana elementos del Ejército comenzaron sus labores de asistencia en las colonias iztapalapenses La Joya y José María Morelos, colindantes con el municipio mexiquense de Nezahualcóyotl. Determinaron abandonar sus funciones dos horas antes de lo previsto por "cuestiones de seguridad", según Verónica Carrasco, una de las coordinadoras de proyectos de la Dirección de Desarrollo Social de la delegación.

Aunque en general la población no mostró mayor rechazo a la llegada de los militares, en algunos predios como el llamado Degollado la oposición de sus habitantes, identificados como miembros del grupo Francisco Villa, hizo que el trabajo de asistencia no pudiera llevarse a efecto.

Para el Coordinador de Seguridad Pública en Iztapalapa, Federico Peña Arce, la polémica desatada por la presencia militar resulta extraña puesto que las labores de asistencia pertenecen a un programa que aplica por segundo año consecutivo.

Para hoy, según el programa de la delegación se triplicará el número de efectivos. La agenda advierte que iniciarán trabajos de albañilería y carpintería, principalmente, en diferentes escuelas de la demarcación. De la misma manera irán ampliado su radio de acción hasta cubrir cinco colonias consideradas marginales y marcadas como parte de las 80 más peligrosas de Iztapalapa.


Ť Aducen "cuestiones de seguridad"

Concluyen soldados labor social antes de lo previsto

Ť Integraron el contingente militar 111 efectivos Ť Aceptación y rechazo a la presencia de personal castrense en la delegación Iztapalapa
 

SUSANA GONZALEZ GUTIERREZ

Un total de 111 oficiales y soldados --entre ellos una decena de médicos y dentistas-- participaron en las Jornadas de Labor Social del Ejercito Mexicano que arrancaron ayer en la delegación Iztapalapa, quienes a pesar haber sido bien recibidos por los habitantes de las colonias La Joya y José María Morelos, colindantes con el municipio mexiquense de Nezahualcóyotl, determinaron retirarse del lugar dos horas antes de lo previsto por "cuestiones de seguridad".

Las autoridades de la demarcación anunciaron que las brigadas castrenses proporcionarían hasta ocho servicios distintos a la comunidad --desde atención médica hasta peluquería --de las 9 de la mañana a las 18 horas. Sin embargo el horario fue modificado por petición de los militares, según confirmó Verónica Carrasco, una de las encargadas de la coordinación de proyectos de la Dirección de Desarrollo Social de Iztapalapa, por lo que a las 16 horas los uniformados comenzaron a retirarse.

iztapalapa-servicios-7Incluso la funcionaria mencionó que originalmente se contempló que entre las cinco colonias que el Ejército Mexicano tiene previsto visitar se incluiría el llamado Predio Degollado, localizado en la Avenida Benito Juárez y Manuel Cañas, cerca de la delegación Tláhuac, pero que se acordó no hacerlo debido a la oposición que mostraron los líderes del Frente Popular Francisco Villa (FPFV) a la incursión de los militares.

Dicha organización no fue la única que rechazó la presencia de los soldados dado que a nombre de la UPREZ-Democrática, David Contreras Silva, consejero estatal y delegacional del PRD, repudió que el Ejército Mexicano esté presente en la delegación. El perredista acusó al delegado René Arce de no haber consultado a los iztapalapenses y advirtió que existen organizaciones sociales, comités vecinales y dirigentes partidistas que no están de acuerdo con tal política y se opondrán a lo que considera una "militarización" de la demarcación.

"Si nos opusimos a que Oscar Espinosa Villarreal militarizara Iztapalapa y actualmente exigimos que el Ejército salga de Chiapas, lo seguiremos haciendo en Iztapalapa, así se enojen los capos del PRD", sentenció Contreras Silva.

Datos preliminares de la primera jornada social de los militares en esa demarcación indican que se atendieron a más de 400 personas puesto que se hicieron 184 cortes de pelo, la mayoría para niños y jóvenes; se brindaron 153 consultas médicas y 95 de atención odontológica, y se repararon al menos 30 aparatos electrodomésticos entre planchas, radios, televisores y estéreos. Además de hicieron seis servicios de plomería y cuadrillas de soldados rasos se encargaron de limpiar de basura y lodo en al menos diez cuadras de la colonia La Joya además de que se pintaron las guarniciones.

No obstante, faltaron servicios de atención psicológica, vacunación infantil y antirrábica para las mascotas, pláticas para prevención de adicciones; reparación de calzado; revisión optométrica y otras especialidades que personal de la delegación sí ofrece tradicionalmente como lo demuestran las más de 400 visitas a colonias que se realizaron a lo largo del año 2000, según datos de la Dirección de Desarrollo Social.

Para este martes se prevé que otros 200 soldados acudan a Iztapalapa para hacer reparaciones en planteles escolares de la zona, lo mismo en cuestiones de albañilería, plomería y pintura que en carpintería.

La víspera, con una hora y media de atraso debido a la ceremonia efectuada en la explanada delegacional, un centenar de soldados apoyados por personal de la Dirección de Desarrollo Social instalaron tres carpas en la cerrada formada por las calles de Congreso de Apatzingán y Sitio de Tixtla de la colonia La Joya, vecina de la Unidad Ejército de Oriente.

Decenas de colonos, en su mayoría amas de casa, esperaban ya la llegada de los soldados de cuya labor fueron enterados durante el fin de semana gracias a los volantes informativos distribuidos por la delegación. Hasta ahí, luego de atravesar calles mal trazadas e inclinadas que rodean un peñón, llegaron cuatro camiones militares de redilas comandados por Alberto Zaragoza González, del Octavo Regimiento de Artillería.

En lugar de muestras de rechazo o incidentes de repudio, a lo largo de la mañana se formaron varias filas de colonos en espera de ser atendidos por los médicos, dentistas, peluqueros o reparadores de aparatos electrónicos, mientras varias cuadrillas de soldados recorrieron las accidentadas calles de la zona con palas, picos y escobas proporcionadas por la delegación o cubetas y brochas para pintar banquetas.

En general ocho servicios fueron los que prestaron los militares: barrido de calles, desazolve de coladeras, servicios de plomería, arreglo de aparatos electrodomésticos, servicio médico, revisión odontológica, pinta de banquetas y guarniciones así como corte de pelo, el más solicitado por niños y jóvenes.

Además de La Joya, los uniformados visitarán durante los próximos doce días otras cuatro colonias de la demarcación: Barrancas de Guadalupe, Ejército Constitucionalista de Oriente, Desarrollo Urbano Quetzalcóatl y la Unidad Habitacional El Salado.

Segundo año del Ejército en Iztapalapa

Para la Coordinación de Seguridad Pública de Iztapalapa, a cargo de Federico Piña Arce, resulta "extraño" que se haya desatado una polémica sobre este programa de colaboración cuando ha sido un trabajo que el Ejército Mexicano ha desempeñado tanto en el Distrito Federal como en diversas comunidades del interior de la república.

En tal sentido, remarcó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) seleccionó por segundo año consecutivo a Iztapalapa para este tipo de tareas, ya que el año pasado, cuando Ramón Sosamontes era titular de la demarcación hubo tareas similares sin que se suscitara tanto revuelo.

Sin embargo, admitió que la intención de las autoridades de la demarcación es que los soldados no nada más acudan una vez al año a las colonias de la delegación sino que lo hagan de manera permanente, pero acotó que esto se decidirá al final del programa una vez que autoridades militares y delegacionales evalúen los resultados en relación a la aceptación y afluencia de la gente.

Por lo pronto sólo se atenderán 5 de las 230 colonias que conforman la delegación, quinteto que se incluye en las 80 colonias que las autoridades consideran como de alta incidencia delictiva y donde habita la tercera parte del millón 800 mil habitantes de Iztapalapa.