LUNES Ť 15 Ť ENERO Ť 2001
Ť El golazo de Miguel Zepeda definió el partido para los rojinegros
En vibrante clásico, Atlas venció 3-2 a Chivas
Ť Primera anotación de Hermosillo con el Guadalajara, que aún no consigue triunfo
Guadalajara, Jal., 14 de enero. En vibrante encuentro, que respondió el lleno en el estadio Jalisco, el Atlas se impuso 3-2 al Guadalajara con un gol para recordar, anotado por Miguel Zepeda al minuto 77.
Fue el primer triunfo del torneo para los rojinegros, que habían empatado en la apertura, mientras que para los rojiblancos, que siguen sin ganar, lo más destacado fue que Carlos Hermosillo marcó su primer tanto con el uniforme de Chivas y llegó a 289 en su cuenta personal.
Atlas se fue al frente apenas al minuto 4, en una anotación de Juan Pablo Rodríguez, quien aprovechó un mal rechace de Eduardo Medina y golpeó con fuerza el esférico, para vencer con tiro a la derecha al arquero Oswaldo Sánchez.
Los pupilos de Ricardo LaVolpe aprovecharon el desconcierto de Chivas y anotaron el 2-0 al minuto 20, mediante jugada personal de Daniel Osorno, quien ingresó por el centro ante la tibia marca de cuatro zagueros y con tiro suave y rasante doblegó otra vez a Oswaldo.
El Gusano Nápoles, que había mostrado gran movilidad, realizó una jugada personal dentro del área y con tiro cruzado y a la izquierda dejó sin oportunidad a Cabuto para plasmar el 2-1 al minuto 34.
El vaivén era constante sobre ambas porterías y mientras Marco Antonio Chima Ruiz remató demasiado picado un cabezazo, Guadalupe Castañeda le regresó el alma a los fanáticos rojiblancos y evitó el tercer tanto al alejar un tiro sobre la línea de gol.
En tiempo de compensación del primer lapso, Ramón Morales desbordó por la izquierda y mandó un centro al área chica, donde Carlos Hermosillo se levantó ante la marca de dos defensas y conectó con la cabeza para vencer a Cabuto, quien alcanzó a tocar el esférico. Fue el 2-2 que reflejó lo sucedido en ese periodo.
Al minuto 67 ingresó el veterano Benjamín Galindo y ocho minutos después mandó un tiro de media distancia que obligó a Cabuto a otro efectivo lance.
En pleno dominio del conjunto de Jesús Bracamontes, Miguel Zepeda recibió un pase por la banda derecha y sin ángulo de disparo mandó un tiro bombeado a segundo palo, que techó a Oswaldo, quien cubría el primer poste. Fue un golazo que definió el 3-2, en un clásico emotivo. Cerca del final, Nápoles estrelló un tiro en el poste.