DOMINGO Ť 14 Ť ENERO Ť 2001

Ť El compositor retrató musicalmente el México de su tiempo

Salvador Chava Flores cumpliría hoy 80 años

NOTIMEX

Salvador Chava Flores, quien fue capaz de retratar musicalmente y de una manera burlesca la realidad de la gente del México de su tiempo, festejaría su cumpleaños número 80 este 14 de enero.

Salvador Flores Rivera, su nombre completo, nació el 14 de enero de 1920, en la Ciudad de México, en las calles de Soledad, en el popular barrio de La Merced. Sus padres fueron Don Enrique Flores Flandes y doña Trinidad Rivera.

Chava vivió durante algún tiempo en barrios como Peralvillo, San Rafael, Guerrero, Doctores, Roma, Romita, Santa María la Ribera, lugares llenos de vecindades, con gente humilde donde surgían pleitos por un lavadero, pero cuando había un problema serio, todos ayudaban.

De Dos horas de balazos a Relatos de mi barrio
CHAVA
En diciembre de 1951 surgió su primera canción corrido: Dos horas de balazos, inspirado en sus héroes del oeste norteamericano: Tom Mix, Buck Jones, Bill Boyd y Tim McCoy.

Un año después, en companía de unos amigos en el café de la radiodifusora XEW, entonó la canción Dos horas de balazos, la cual gustó a Von Hausen, quien se la pidió para su explotación comercial, a lo que no accedió debido a que Chava no vivía de ello.

Más tarde, esta misma composición le fue solicitada por su amigo Fernando Rosas, quien a su vez se la dio a Mariano Rivera Conde de la disquera RCA, este último llamó a Chava Flores para conocer su producción musical y quedó admirado porque era única.

En este sentido, no faltó quien dijera que esa creación era "pocha" y sin valor comercial, lo cual molestó a Chava e hizo una canción "muy mexicana": La tertulia, que quedó grabada junto con Dos horas de balazos el 11 de enero de 1952 por RCA Víctor.

A estas le siguieron: La boda de vecindad, La Bartola, La interesada, Un chorro de voz, El gato viudo, Ingrata pérjida y Llegaron los gorrones.

Su música reflejaba todo aquello que ve y siente el mexicano, en particular el que vive en las grandes ciudades: amores, pasiones, vida en vecindad y multifamiliares, fiestas tradicionales, costumbres provincianas, su actitud hacia el trabajo y la sociedad, entre otras vivencias.

Su vida artística transcurrió entre carpas, cabarets y cine. En el séptimo arte  realizó seis películas: Mi influyente mujer (1955), La esquina de mi barrio (1957), Rebeldes sin causa, Bajo el cielo de México, El correo del norte y La máscara de la muerte.

Fue conocido primeramente como El compositor festivo de México, después, El folclorista urbano y por último: Cronista musical de la Ciudad de México.

Por algún tiempo permaneció en el olvido, hasta que resucitó con los jóvenes preparatorianos que lo buscaban para recitales, revivió tiempos idos como el homenaje del que fuera objeto en 1973 cuando Tomás Perrín lo invitó a su programa La canción desconocida, del canal 5 de televisión, en el cual interpretó sus éxitos.

En 1986 cambió su residencia a Morelia, Michoacán; ahí trabajó intensamente en el Sistema Michoacano de Radio y Televisión, donde tenía un programa en el canal 2, que a su vez se retransmitía en los canales 7 y 13 de Imevisión para la nación.

En forma paralela, escribía su libro Relatos de mi barrio, que apareció en el mercado nacional a finales de 1988, libro que Chava ya no vio.

En agosto de 1987 se enfermó y fue trasladado a la Ciudad de México, donde falleció el 5 de ese mismo mes y año; fue sepultado en el lote de los compositores del Panteón Jardín, con la notas de su canción La Bartola.