SABADO Ť 13 Ť ENERO Ť 2001

Ť Ampliará el corto a 400 millones de pesos diarios; crecen las presiones inflacionarias

Apretón a la política monetaria; busca BdeM contener el consumo

Ť Como efecto del retiro de circulante del sistema aumentarán las tasas domésticas de interés

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

El Banco de México determinó este viernes imprimir un mayor freno al consumo y la inversión en el mercado doméstico, como una acción orientada a contener la aparición de presiones inflacionarias que ponen en entredicho la meta oficial de crecimiento de los precios para este año.

La junta de gobierno del banco central decidió aumentar a partir de ayer de 350 millones a 400 millones de pesos diarios la disminución en la oferta de circulante, medida conocida como "corto monetario", y cuyo efecto inmediato es el aumento de las tasas internas de interés, lo que contribuye a frenar el consumo y la inversión.

El Banco de México apuntó que desde la segunda mitad de 2000 la inflación mostró una clara resistencia a continuar descendiendo.

La reversión en el comportamiento descendente de los precios obedeció principalmente a factores temporales. Sin embargo, señaló, las expectativas inflacionarias de analistas y público en general se ubican ahora en un nivel promedio de 7.6 por ciento, "cifra claramente incompatible con el objetivo oficial de lograr una tasa menor a 6.5 por ciento durante el presente año".

Además de la expectativa de mayor inflación por parte de analistas, el Banco de México añadió que en las últimas semanas "se ha materializado" uno de los escenarios de riesgo para un mayor crecimiento de los precios, que es el aumento en el gasto interno, "que ha venido creciendo a tasas elevadas y superiores a las de la producción", lo que actúa como una presión inflacionaria.

"Por lo tanto, es lógico anticipar que para 2001 el combate a la inflación enfrentará un entorno externo más complicado que en el pasado reciente. Específicamente, las cuentas externas del país se verán afectadas por una disminución en el ritmo de crecimiento de las exportaciones", añadió.

En un comunicado, el banco central sostuvo que "frente a la conjunción de los factores mencionados, resulta conveniente moderar el ritmo de crecimiento de la demanda interna para acomodarla tanto a los límites de la capacidad productiva nacional como a la menor disponibilidad previsible de recursos del exterior".

Con base en esas consideraciones fue que el organismo determino aumentar el corto monetario a 400 millones de pesos diarios, 50 millones de pesos más que la restricción vigente hasta el jueves.

El corto es un instrumento de la política monetaria que usa el banco central para abatir la inflación. Consiste en dejar menos liquidez en el sistema, lo que implica menor circulación de billetes y monedas.

El aumento decretado ayer constituyó la decimocuarta ocasión que el Banco de México aplica un corto. El primero fue impuesto el 11 de marzo de 1998, en ese entonces fue de 20 millones de pesos diarios, cantidad que ha crecido hasta los 400 millones de pesos diarios anunciados ayer.

Sigue cayendo el peso

La previsible subida en las tasas de interés después del corto, que hará más atractiva la inversión en pesos, no eliminó las presiones en el mercado de divisas, donde ayer la moneda mexicana volvió a perder siete centavos frente al dólar.

Al cierre de las operaciones, la cotización al mayoreo, la más representativa del mercado, se ubicó en 9.92 pesos por dólar, una depreciación de siete centavos respecto al jueves. En la última semana, el peso perdió 18 centavos en su valor de cambio frente a la divisa estadunidense, lo que representó un ajuste de 1.84 por ciento.

Sin embargo, en las dos primeras semanas del año el peso acumula una pérdida de 28 centavos, equivalente a 2.79 por ciento.