JUEVES Ť 11 Ť ENERO Ť 2001
Ť Serían operadas por el Cenapred o por personas de la misma comunidad
Instalaría la Coordinación de Protección Civil alarmas en las comunidades aledañas al Popo
Ť El volcán prácticamente ha retornado a su actividad normal, informó la dependencia
ALONSO URRUTIA Y LA JORNADA DE ORIENTE
La Coordinación General de Protección Civil analiza la posibilidad de instalar alarmas en las comunidades más próximas al volcán Popocatépetl.
Oscar Navarro, responsable del área, dijo que las alarmas podrían ser operadas desde el Centro Nacional de Previsión de Desastres (Cenapred), o bien por personas de la propia comunidad en estrecha comunicación con la dependencia.
Entrevistado en la sede de la Secretaría de Gobernación, Navarro Gárate indicó que el volcán Popocatépetl prácticamente ha retornado a su actividad normal, toda vez que las exhalaciones diarias oscilan entre 10 y 12 -número similar a las que había antes de la emergencia de diciembre-, y la sismicidad está dentro del promedio de las que se ha presentado en los últimos seis años.
Agregó que Protección Civil no cesará en su intenso monitoreo sobre la actividad volcánica, pues, aseguró, en la fase emergente que se presentó a fines del año pasado, el Popocatépetl acumuló mucha lava, la cual aún no ha sido desalojada.
Explicó que de acuerdo con los expertos vulcanólogos, lo que debería suceder es que ese domo se vaya autodestruyendo.
Una vez que ello ocurra, subrayó, entonces podremos decir que hemos regresado a la situación anterior a la emergencia, pero este es un proceso que puede durar meses.
Navarro Gárate mencionó que "inclusive estamos trabajando con unas técnicas de fotografía satelital para modernizar los programas operativos del volcán".
Estas nuevas técnicas, agregó, proporcionarán información muy importante sobre el comportamiento del volcán.
Al ser cuestionado sobre la propuesta que había de desocupar la zona, el funcionario señaló que en principio sólo se está analizando concretamente la reubicación de las 48 familias que habitan dentro del área comprendida en los lechos de los ríos, y que corresponden al poblado de Santiago Xalitxintla.
Comentó que esa delimitación la está realizando la Comisión Nacional del Agua (CNA), conjuntamente con el Cenapred, bajo el criterio de que no se ubiquen dentro del margen histórico alcanzado por los ríos.
Por otro lado, desde que el gobierno federal anunció su intención de reubicar a las personas que viven en la zona de riesgo en torno al Popocatépetl, habitantes de San Pedro Benito Juárez, Santiago Xalitzintla y San Nicolás de los Ranchos manifestaron abiertamente su oposición a esta acción.
En San Mateo Ozolco campesinos señalaron: "ƑPara qué quieren que nos vayamos si el volcán no nos ha hecho daño, además para qué nos volvieron a hacer las casas que tiró el temblor (el 15 de junio de 1999) y ahora nos piden que nos vayamos?".
En San Pedro Yancuitlalpan los vecinos expresaron que no han considerado la posibilidad de abandonar sus casas y propiedades para irse a otro lugar.
Al respecto, estudiosos de la zona volcanera, como el Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales, perteneciente a la Universidad Autónoma de Puebla, propusieron que en lugar de realizar una reubicación precipitada se instaure una microregión en el área de peligro, que tienda a desalentar el crecimiento poblacional.
Por otra parte, Navarro Gárate dijo que el número de muertos provocado por la temporada de frío ya asciende a 85, la mitad de los cuales corresponden al estado de Chihuahua.
El funcionario agregó que en muchos casos no es propiamente el frío el que provoca los decesos, sino la intoxicación de las personas por el mal estado en que se encuentran los sistemas de calefacción que utilizan.