MIERCOLES Ť 10 Ť ENERO Ť 2001
Ť Garantizar la seguridad de los 4.3 millones de usuarios, el propósito: Fuentes
Buscan autoridades del STC otorgar más facultades al personal de vigilancia del Metro
Ť Se enviará a la ALDF un proyecto de reformas a la Ley de Justicia Cívica, señala
LAURA GOMEZ FLORES
Con el propósito de garantizar la seguridad de sus 4.3 millones de usuarios diarios, la dirección del Metro enviará en el próximo periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal un proyecto de reformas a la Ley de Justicia Cívica, para que sus mil 400 policías auxiliares y mil 100 vigilantes tengan facultades de remitir a los infractores ante el Ministerio Público o los juzgados; y la policía preventiva pueda entrar a sus instalaciones.
El subdirector de Administración y Finanzas, Manuel Fuentes Muñiz, explicó que su plan integral de seguridad prevé la contratación institucional de elementos, ya no por agrupamientos; modificar el contrato colectivo de los adscritos al STC, pues los horarios de 24 por 24 resultan "inhumanos e inoperantes"; y analizar la prestación de servicio de 218 policías mexiquenses, que representan una erogación anual de 5.4 millones de pesos.
Además de estudiar la posibilidad de contratar policías bancarios; coordinar los trabajos de vigilancia con la policía preventiva y judicial en los paraderos considerados como conflictivos, tales como Tacubaya, Pantitlán, Observatorio e Indios Verdes; y acabar con el ambulantaje en estaciones y vagones, pues no sólo representa un problema de inseguridad, sino una fuente adicional de ingresos para algunos vigilantes, mencionó.
Así, se busca impulsar un programa de seguridad con una visión de ciudad, que deje atrás la imagen de empresa privada, como ha sido tratado el STC en los últimos años, dijo al aclarar que en esta administración no se considera la externalización del mantenimiento de unidades, pero sí el rescate paulatino de 50 trenes, para atender la creciente demanda de usuarios, en líneas como la B.
El funcionario explicó en entrevista que el impedimento legal para que los policías auxiliares y vigilantes pongan a disposición de un juez cívico o Ministerio Público a los infractores no sólo retrasa la aplicación de la ley, sino que las estadísticas del organismo no reflejan el mismo número de detenidos con los que se ponen ante las autoridades.
De ahí la necesidad de modificar la Ley de Justicia Cívica, para que los elementos de ambas corporaciones cuenten con facultades y los vigilantes puedan estar armados para atender cualquier contingencia, previa capacitación, y los policías preventivos y judiciales tengan acceso directo a las instalaciones y refuercen los operativos de seguridad en los paraderos, donde también participarán los vigilantes que se tienen.
"Estamos haciendo una revisión para que no sea necesario cambiar la Ley de Seguridad Pública y la policía preventiva ingrese a las instalaciones del Metro, y la PA y los vigilantes tengan facultades para remitir a los infractores", argumentó.
Mencionó que ante los pocos recursos considerados en la materia, se solicitará el apoyo del procurador de Justicia, Bernardo Bátiz, y del secretario de Seguridad Pública, Leonel Godoy, por vía directa y mediante el consejo de administración, que es la máxima autoridad del sistema, y se tomará en cuenta el punto de vista de los propios vigilantes, a quienes se prevé mejorar sus condiciones laborales.
Actualmente el costo de la nómina de mil 400 policías auxiliares asciende a 129 millones de pesos anuales, de los cuales 5.4 corresponden para el pago de elementos en el estado de México, sin que sus autoridades realicen alguna aportación, por lo que se estudia continuar con la prestación de sus servicios.
Además, se considera duplicar el número de policías y vigilantes para contar con un mínimo de 5 mil elementos y llevar a cabo una contratación directa de la Policía Auxiliar, pues la asignación del 70 agrupamiento no ha sido viable, tanto en el número de personal que falta a diario de alrededor de 200, como la obligación de estar parados en promedio 15 horas, sin mejorar su desempeño, afirmó.