JUEVES Ť 4 Ť ENERO Ť 2001
Ť Por los brincos de los fanáticos, el coloso de Santa Ursula se está cayendo
Las barras bravas han hecho temblar hasta al estadio Azteca
Ť Nada hicieron las autoridades para frenar la violencia en el próximo torneo
Ť La cerveza, reina del show futbolero, es causante de conflictos, afirman aficionados
MARLENE SANTOS A./I
A unos días de que inicie el torneo de Verano y tras los recientes hechos de violencia ocurridos en la campaña anterior, poco se ha hecho para prevenir nuevos brotes.
Una maraña de intereses creados que se cruzan, chocan y rebasan expectativas originales mueven a las principales porras y a las llamadas barras de los equipos del máximo circuito, cuyos estrechos nexos con directivos de clubes mantienen a éstos en la indecisión y en la inacción.
Jugosas ganancias de cervecerías, de patrocinios y de taquillas impiden soluciones tajantes como acabar con la venta de alcohol en las gradas.
Se dan hasta casos de negligencia, pues en el estadio Azteca -orgullo de Televisa y del futbol mexicano- han aparecido grietas que se ensanchan debido a los incesantes brincos de miles de hinchas aglomerados en la barra Monumental y que amenazan con derivar en una tragedia.
Las barras causan los incidentes
Las porras acusan a las barras de ser causantes de los incidentes que ensombrecieron el torneo de Invierno, que apuntan al público en general, a "algún desquiciado anónimo" y a la venta de cerveza.
Pero la bebida embriagante es la reina del show. El grupo Modelo con sus punteros equipos Toluca y Santos está más que presente en el deporte número uno del país.
Y la cervecería Cuauhtémoc-Moctezuma, que anuncia su producto estelar Sol en casi todas las playeras de los equipos, celebró en grande el título de Monarcas.
Organizó el desfile que estremeció a la ciudad de Morelia, donde aportó flamantes tráilers que condujeron a los campeones.
Lo cierto es que el aficionado se transforma bajo la pasión de un partido de futbol, se enciende por un mal arbitraje y hace corto circuito con la ingesta de bebidas alcohólicas.
Entonces basta un insulto, un recordatorio familiar o un resu
ltado adverso para dar rienda suelta a la violencia.
Líderes y miembros de las porras Ultra, de Pumas; Tito Tepito, del Atlante; Perra Brava y Tigre Toño del Toluca, así como las barras que imitan el estilo argentino: Rebel, de Pumas; 51, del Atlas; Fenomenal y Monumental del América, Adicción, del Monterrey, y Libres y Locos, de Tigres, cuestionan las tibias medidas para frenar la inseguridad, emprendidas por equipos y dirigentes de la Federación Mexicana de Futbol (FMF).
Aunque algunas entrecruzan advertencias y acusaciones por viejas rencillas, las unifica la conclusión de que el Congreso Nacional de Porras, realizado los pasados días 16 y 17 de noviembre en Guadalajara, Jalisco, "no sirvió para nada".
"ƑDe qué sirvió un congreso contra la violencia si nadie ha dado conclusiones? Ƒcuáles son los lineamientos a seguir?
"Los federativos debieron dar de inmediato conclusiones; ya pasó mes y medio y šno hay nada!
Pero eso sí, los de pantalón largo se paran el cuello y dirán ante FIFA que hicieron un congreso, que por cierto fue a iniciativa de las Porras Unidas del Morelia, no de la FMF que sólo puso la fecha", señaló Arturo Monroy, dirigente de la Tito Tepito, quien no asistió al evento.
No pasó nada en el Congreso
Oscar Sánchez, presidente de la Ultra, acudió con transporte y hospedaje pagado por la directiva del club UNAM, pero tampoco quedó conforme.
"Hubo cosas que no me agradaron. Nadie, absolutamente ningún directivo fue capaz de admitir: 'yo le pago a una porra para animar'; algo que es un secreto a voces, y si estábamos entre caballeros y buscábamos el bien del futbol, era el momento de hablar de frente, de sincerarnos.
"Debieron decir 'ok, yo les pago, soy el responsable', porque los directivos son los primeros en crear grupos y cuando hay problemas esconden la cabeza", acusó.
Además, criticó al titular de la FMF, Alberto de la Torre, porque sólo se presentó a la inauguración y la clausura.
Arturo Monroy fue más allá: "Son culpables directivos como Jiménez Espriú (Pumas), Javier Pérez Teuffer (América) y De la Torre (Atlas), quien una vez confesó que le daba 300 boletos a la Barra 51 y hasta donde se sabe, les pagan.
"Gente de la porra Amigos del América asegura que la Monumental fue rechazada por la directiva del Cruz Azul y que la del América invirtió en su creación 250 mil dólares", sostuvo.
Rolando González, de la barra Perra Brava, manifestó que en el congreso "nos llenamos de propuestas, todos dimos ideas, pero nunca hubo algo en concreto. No se llegó a ninguna medida.
"Sólo algunos representantes quedamos de acuerdo en que la guerra era deportiva y sólo de 90 minutos dentro del estadio, que termina al salir sin importar triunfo, derrota o empate", anotó.
Israel Celorio, de la Monumental, dijo: "No nos interesa el congreso, no somos porra oficial ni recibimos boletos del club. No tenemos nada qué ocultar; me molesta que nos digan delincuentes.
"Si se hace uno nuevo, para que valga la pena tendrían que ir barras, cervecerías, jefes policiacos, federativos y directivos: Si no es así, no tiene caso".
El presidente de la Ultra acepta que a las viejas porras les faltó innovar; sin embargo, rechazan a las barras. "Cuando apareció la Rebel en las gradas del estadio de Ciudad Universitaria nos pareció algo agradable, que le daba frescura a la forma de animar.
Sin embargo, "cuando vimos que eran copias de las porras sudamericanas y que tras la Ultra tuza surgieron otras como la Barra 51 y la Ultra de León comencé a vislumbrar problemas.
"Luego la Rebel tuvo pleito con la Tito Tepito y con la gente de Monterrey, entonces ya no tuvimos duda de su carácter negativo", comentó.
Que desaparezcan las violentas
Ahora, entre las planes de su grupo está evitar que la gente se siga yendo hacia la barra, y apunta: "Los jóvenes las han preferido porque consideran que la forma de animar en México es un tanto anticuada. Estamos pensando en sacar cosas nuevas".
Monroy indicó: "Las porras dirigidas por gente como Julio Sotelo (Necaxa) y el Gordo Ordóñez (Cruz Azul) han sido rebasadas;pero son personas que no quieren darle paso a los jóvenes.
Y abundó, "hasta cierto punto les convienen estos brotes de violencia, porque les ayuda a mantener sus posiciones y un ingreso económico de parte de los clubes, justo cuando se convertían en obsoletos".
Antonio García, de la porra Tigre Toño, dice que urge desaparecer a la Monumental del América. "En el 2-0 que Toluca le aplicó en cuartos de final hasta se salieron antes del partido para apedrear nuestros autobuses.
"Son un grupo de choque no una porra. Bueno, ni eso, son una sarta de cobardes porque nunca viajan a otras plazas, tienen temor porque la deben", afirmó.
"Están dirigidos por El Israel y El Matías que son gente conflictiva que no entiende y además está pagada por Televisa", apuntó, pero también descalificó a otras: "en la Rebel sólo hay porros, los de la Barra 51 son neonazis, los Pelones (Monterrey) son puro vago".
Clamó por no argentinizar a los grupos de animación, "porque al rato va a haber muertos. En esas porras hay puros chavos que buscan el relajo, el desfogue.
"Nosotros somos una porra familiar, soy el que más autobuses saca de Toluca, pero ahora muchas señoras ya no quieren ir y menos con niños, por lo riesgoso que esto se está poniendo.
"Y le voy a decir algo, el América tiene como siete porras y todas (Amigos, Aguilas, Camisetas Amarillas, etc.) piden que desaparezca la Monumental".
Rolando González señaló que las barras de imitación argentina "tienen características vandálicas estilo sudamericano. La nuestra (Perra Brava) es original y es mexicana; a nosotros no nos pagan, mientras que todas las demás perciben un sueldo.
Acepta que la directiva choricera les costea 50 por ciento de transporte y boletaje, pero puntualiza que sólo reciben 15 pases gratis que utilizan los miembros de la batucada de Neza, que se les unió al irse su equipo a la Primera A.
Monroy recuerda que Pachuca, con su directivo argentino Andrés Fassi, fue el importador de las barras en México al encargar a un costarricense apodado El Chino la creación de la Ultra Tuza.
"Fue un movimiento que de inmediato copiaron otros, por eso la porra se autoproclama como 'la madre de todas las barras'; ahora le corresponde a Jesús Martínez (presidente de Tuzos) frenar esta ola", afirmó.
Señaló que el joven que aventó el petardo contra Angel Comizzo, Carlos Pavón y Pedro Pineda no era de la Ultra; yo tengo mis dudas, si no, Ƒpor qué estaba ubicado entre la gente de la barra?", cuestionó.
Israel Celorio, uno de los líderes de la barra Monumental da su apellido con reservas. Dice estar en Acapulco. Con recelo acepta la entrevista vía telefónica y lo primero que señala es: "El estadio Azteca se está cayendo".
Niega haber recibido 250 mil dólares para organizar al grupo y explica su distanciamiento de la directiva.
"Al principio nos apoyó, después ya no porque nos quería dar boletos de la parte baja y nosotros no aceptamos, pues resulta que nuestro grupo original es de unas 150 personas y en partidos importantes la gente se nos une y llegamos a sumar hasta 3 mil.
"Pero nuestra ubicación tiene que ser en la parte alta, la del boleto económico, ahí brincamos y cantamos... pero la estructura se está cayendo.
"En el partido América-Pumas se fracturó otro sector, donde estaban los rivales, también en nuestro lado hay grietas y nadie hace nada por repararlas. El director del estadio, Alfonso Ortiz, no sirve para nada.
"En otro juego, contra Chivas, la gente de ellos nos lanzó piedras de cemento que arrancaba de las resquebrajaduras.
"Ya fui a pedir que hicieran reparaciones, pero los directivos nos quieren mandar abajo; no lo aceptamos para que arreglen las fallas, y si nos bajamos, entonces pedimos que el boletaje ahí se venda a precio popular, para no perder agremiados.
"Que me dieron 250 mil dólares, špor favor!, no estaría en Acapulco, sino en Cancún. También decían que recibíamos un sueldo y hasta la gente nos decía 'móchate con algo'.
"Todo eso es mentira. Tampoco somos el grupo más violento, nomás le hago una comparación: al estadio nosotros llevamos bombas de humo, de color azul y amarillo, mientras que la gente de Pumas mete petardos y bombas caseras", puntualizó.