JUEVES Ť 4 Ť ENERO Ť 2001

Orfandad múltiple

La mañana del 4 de enero de 1995 fue nublada por un acontecimiento que marcó el fin de siglo musical mexicano: el compositor, director de orquesta, humanista, hombre de cultura Eduardo Mata falleció en las inmediaciones de Cuernavaca con su mujer, Marina Anaya. Una falla mecánica en la avioneta, que piloteaba el músico.

La orfandad es honda y abarca muchos campos. En el de la dirección orquestal, por ejemplo, sólo una batuta mexicana, una sola, puede considerarse a la altura de Mata, la de Jorge Mester.

La conmemoración resulta relevante dada la necesidad de reflexionar sobre la vida artística de México, en un momento que se ha anunciado, nuevamente, como un cambio.

Verónica Flores Aguilar preparó para La Jornada este texto y forma parte del libro dedicado a Eduardo Mata que será publicado próximamente por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, como parte de la colección Periodismo Cultural. PABLO ESPINOSA