JUEVES Ť 4 Ť ENERO Ť 2001
Ť Revisar métodos, lo que queda tras perder la Presidencia
Para sobrevivir, el tricolor debe renovarse y resolver sus disputas
Ť Capitalizaremos errores de los otros partidos para ganar votos, dice
Ť Se buscarán estrategias para recuperar el sufragio de los jóvenes
ENRIQUE MENDEZ Y JOSE GIL OLMOS
En su primer año como oposición, el PRI no sólo debe renovarse para sobrevivir, también está obligado a resolver las disputas por las candidaturas a gobernadores de Yucatán, Baja California y Michoacán, así como de casi dos mil aspirantes en diez estados más donde habrá elecciones para alcaldes y congresos locales.
Tiene, además, que actualizar su oferta, reorientarse hacia la izquierda para asumir la defensa de programas sociales, y perfilar una nueva generación de políticos: hoy todavía el control lo ejercen los viejos.
A partir de enero, con la sesión extraordinaria del Consejo Político Nacional (CPN), el tricolor tendrá que operar en dos escenarios: Asumir y definir los mecanismos de autogobierno -después de seis meses de pugnas internas- ante la ausencia del poder presidencial, y hacer lo posible por ganar o al menos no perder más posiciones en las entidades donde habrá comicios, como son Yucatán, Durango, Chihuahua, Baja California, Zacatecas, Aguascalientes, Oaxaca, Chiapas, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Michoacán y Puebla.
La apuesta del PRI para ganar votos es muy simple, según lo ve el secretario de Elecciones del partido, Felipe Solís Acero: "Capitalizar los errores de los gobiernos, sobre todo panistas, y dejar que pase el tiempo en el cual podamos acumular errores tras errores, y que se reflejen en las elecciones". Empero, la operación electoral del partido tendría que ir más allá, reconoce el diputado tamaulipeco.
Estrategias menos efectivas
A partir del 2 de julio, las viejas estrategias son menos efectivas -salvo en el caso de Tabasco-, y con la experiencia de Jalisco el tricolor asume que no pueden imponerse métodos para elegir a sus candidatos.
De hecho, el 13 de enero el Comité Directivo Estatal de Baja California entregará al Comité Ejecutivo Nacional el resultado de una consulta entre los priístas de la entidad, para sugerirle cómo designar al candidato a gobernador, sin que ello implique que la directiva decline su derecho estatutario a definir las bases de la convocatoria. Tiene que haber candidato en mayo.
El primer reto para los priístas se centrará en Yucatán. El mismo día en que se realice su consejo político nacional -posiblemente en la segunda semana de enero- tendría que emitir las bases de la convocatoria para nominar al candidato, ya que el registro legal ante el Consejo Estatal es en marzo y la elección el 27 de mayo.
Del conflicto entre el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y el grupo parlamentario priísta, junto con el gobernador Víctor Cervera, por la designación de los integrantes del Consejo Estatal Electoral, el PRI se desentiende. "Nosotros no somos ni actores ni demandados en ese procedimiento; sin embargo, esperamos que haya una actitud mesurada y una resolución que atienda a la legalidad".
Y es que, explica, los consejeros fueron electos por los diputados priístas conforme establece la legislación local.
Solís Acero, quien formó parte de la negociación con el PAN para que se abrieran los paquetes electorales en Jalisco, lo que finalmente no ocurrió, ataja: "Los diputados AN que reclaman ahora que el tribunal puede sustituir al Congreso, porque dicen que se deriva de la interpretación de la ley, son los mismos que hace tres semanas afirmaron que no se podían abrir los paquetes porque no había un artículo que expresamente facultara al Consejo General para hacerlo.
"No hay ni en la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación ni en la Ley Electoral de Yucatán, o en otra que conozca, la atribución expresa que le dé al Tribunal Federal Electoral la facultad de sustituir al Congreso del estado en la designación de los integrantes del Consejo Estatal Electoral".
Se acabaron los zapatos
De acuerdo con fuentes del CEN, el PRI tiene escasas posibilidades de ganar en las tres elecciones para gobernador de este año.
En Yucatán, aseguran, el caciquismo de Víctor Cervera Pacheco y la confrontación a la que ha llevado al PRI con el Tribunal Federal Electoral menguan las simpatías al partido.
En Baja California desde hace dos administraciones gobierna el PAN, mientras en Michoacán el gobernador Víctor Manuel Tinoco Rubí ha dividido al partido y ya introdujo al juego de la sucesión a colaboradores suyos para frenar a los aspirantes de otros grupos políticos. A ello se suma que el candidato priísta eventualmente contienda con un perredista que se llama Lázaro Cárdenas.
El directivo priísta reconoce que en ambos estados el PRI enfrentará una situación electoral "difícil", aunque matiza: "pero de ninguna manera el PRI las considera perdidas".
Luego que el PRI perdió este año Chiapas y que oficialmente ganó por ocho mil y un votos en Tabasco, Solís Acero asegura que los partidosdeben acostumbrarse a que las elecciones ahora serán reñidas.
"Los zapatos se acabaron en este país porque hoy no cabe toda la sociedad en un solo color político, y eso hay que entenderlo. Vivimos tiempos en que nadie puede asegurar que tiene la victoria en la mano. Cualquiera que diga que tiene la victoria en las tres entidades está mintiendo".
-El método de consulta a la base, como se hizo para designar al candidato presidencial, Ƒno fue una experiencia negativa, desgastante, para el partido?
-En cada entidad debe definirse el método con la lógica de que debe ser un instrumento que una y no divida. El caso de Jalisco es muy elocuente; los tres aspirantes realizaron una negociación inteligente, un pacto de caballeros, llegaron a un acuerdo y lo notificaron al CEN. El método hay que escogerlo in situ, en cada entidad, y que sean los propios priístas los que lo definan y que el CEN tenga la capacidad de resolver con imparcialidad y tomar una decisión que fortalezca. El método que unifique, ese es el bueno, independientemente de cómo se llame.
-Aunque son dos asuntos distintos, Ƒse cruzarán el tema de la reforma interna y lo electoral? ƑCómo hacer para que no surja un conflicto?
-En el momento en el que se convoque a la asamblea nacional o un cambio de directiva se cruzará con una elección. Lo que debe evitarse es una contaminación perniciosa, negativa. "Sin embargo, hay un sentido de compromiso entre mis compañeros de partido por entender que lo más importante es hoy, y después ganar las elecciones y declinar ante cualquier acción que ejerza una influencia nociva al partido".
En búsqueda del voto joven
En los últimos seis meses, el PRI ha venido reconociendo su incapacidad de presentar una oferta atractiva a los jóvenes. Se olvidó de las universidades, y al integrar sus listas de candidatos al Senado y a la Cámara de Diputados les negó espacios.
La votación de la juventud fue en contra del PRI, especialmente en las zonas urbanas. Las cifras son elocuentes:
El 2 de julio, en las 40 ciudades con mayor población, de más de 400 mil votantes, el PRI perdió por 2.7 millones de votos, 300 mil más que la diferencia final de 2.4 millones por los que Vicente Fox le ganó a Francisco Labastida Ochoa.
En Chiapas, por ejemplo, en las elecciones para gobernador del 20 de agosto, la derrota de Sami David David fue por 56 mil votos de diferencia.
En los cuatro distritos electorales de las dos regiones urbanas, Tuxtla Gutiérrez y Tapachula, los votos en contra fueron 53 mil.
Ante ese panorama, Solís Acero señala: "De ese tamaño es nuestro reto para reconquistar el voto en las zonas urbanas; es decir, un partido que pierde la elección presidencial tiene que revisar sus métodos".
Además, asegura, el PRI buscará en 2001 establecer una estrategia específica para recuperar el voto de los jóvenes. "Un candidato que no sea capaz de articular propuestas inteligentes para ellos no le llegará al corazón a un sector que sistemáticamente está votando en contra nuestra".
-ƑEl PRI no llegará dividido, como partido de oposición que es ahora?
-No, de ninguna manera. Hay un partido en crisis, pero no liquidado, un partido que enfrentó la peor derrota de su historia, que no es cualquier cosa. Pero de ahí a que el Partido Revolucionario Institucional esté balbuceante y viviendo sus últimos años, eso no es cierto.
"No nos ven así en el extranjero, donde se realizan análisis de las potencialidades electorales del PRI.
"Los priístas no nos sentimos parte de un partido fragmentado, declinante, que no tenga nada que aportarle a la sociedad mexicana.
"Es muy distinto que, de la pérdida de la elección presidencial, se deduzca la desaparición del partido".