DOMINGO 24 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Beneficio adicional de firmas que envían remesas a México

Ganancias por 700 mdd al manipular tipo de cambio

Ť Gran negocio con los migrantes más pobres que viven en Estados Unidos

Roberto González Amador

Los emigrantes de origen latinoamericano que viven en Estados Unidos se han convertido en una fuente de altas ganancias para empresas dedicadas a la transferencia de remesas, aun cuando esas comunidades forman parte de los sectores de población más desfavorecidos en aquel país.

Con la manipulación del tipo de cambio, esas compañías obtienen, sólo por los envíos hacia México, dividendos por hasta 700 millones de dólares anuales, sin contar la comisión que cobran por cada remesa, que es en promedio de 15 dólares.

De la necesidad de los emigrantes, legales o sin documentos, de enviar dinero a sus familiares en México, las compañías dedicadas a la transferencia electrónica de fondos han hecho un gran negocio, que ahora comenzará a acotarse luego del fallo de una corte de Illinois, dado a conocer ayer por este diario, que ordenó transparentar esas operaciones.

Las personas que mandan dinero a familiares en México constituyen uno de los núcleos de población más vulnerable en Estados Unidos, según la Oficina del Censo de aquel país.

Un informe de ese organismo estableció que 8.7 millones de hispanos, 30 por ciento de la población de ese origen étnico que vive en Estados Unidos, obtiene un ingreso anual que la coloca por debajo de la línea de pobreza y que le impide acceder a "un estándar de vida mínimamente aceptable".

El reporte de la Oficina del Censo señaló que en Estados Unidos viven 28 millones 268 mil 895 hispanos, de los cuales 64 por ciento son de origen mexicano, y 30 por ciento de los hispanos percibe un ingreso menor a 16 mil dólares al año.

Raúl Ross Pineda, quien promovió el juicio que terminó con una condena a cinco compañías estadunidenses dedicadas a la transferencia de fondos, consideró que la sentencia permitirá abrir ese mercado a más empresas, lo que puede abaratar los servicios y beneficiar a los mexicanos de menor ingreso en Estados Unidos, al reducir el costo por los envíos de dinero a sus familiares.