INJUSTICIA A JUBILADOS
Conforme se acerca la fecha límite para aprobar el
Presupuesto de Egresos para el año entrante, el debate legislativo
se intensifica. Las fracciones del PRI y el PRD en el Senado exigieron
a los legisladores del PAN que el gobierno federal presente una nueva propuesta
de solución al problema de los jubilados, a más tardar este
jueves.
El tema es muy delicado, sobre todo porque se trata de
cerca de 2 millones de personas que sobreviven al borde de la miseria,
después de haber dedicado años de esfuerzo en el ámbito
productivo nacional.
El ingreso medio de este sector es de mil 150 pesos, y
700 mil reciben menos de un salario mínimo. Si de justicia social
se trata, estas cifras ilustran en forma dolorosa el menosprecio que se
les tiene a quienes tanto trabajaron y que ahora, por su edad, se les ha
relegado a una vida indigna. En la lógica del actual sistema de
pensiones, los jubilados parecen recibir una limosna en lugar de un merecido
y bien ganado trato por parte del Estado. A esta gente se le está
pagando con migajas y hay que decirlo en voz alta: es una injusticia.
Declarar que las limitantes del presupuesto impiden elevar
el gasto a esta partida es darle la vuelta al problema. Resulta que se
gastan miles de millones de pesos para salvarle el pellejo a banqueros,
para instalar sistemas de seguridad y comunicaciones con tecnología
de punta, pero para pagarles una pensión digna a los jubilados hay
que buscar de qué otro programa social se le puede restar para inflar
un poquito el rubro. Claro, si en el discurso oficial se publicita que
primero hay que ayudar a los pobres extremos, entonces sería injusto
resolver el problema de los jubilados que no están tan desplomados
en la miseria como los otros.
Con el paso de los días, el gobierno de Vicente
Fox está cayendo en cuenta de que el país no se puede hundir,
como amenaza su secretario de Hacienda, porque millones de mexicanos están
ya con el agua en el cuello; es decir, el país ya está hundido
y para sacarlo a flote es necesario repensar la responsabilidad social
del Estado en materia presupuestal. Debe quedar bien claro, pues, cuáles
son las verdaderas prioridades, con quién se tienen los compromisos
más fuertes y para quién se está gobernando.
Los senadores del PRI y el PRD ya pusieron un ultimátum
al gobierno para que empiece a dar respuesta a estas interrogantes. Por
lo pronto, importantes promesas de campaña del presidente Fox en
materia social se desvanecen ante los ojos de millones que no han perdido
la esperanza de un cambio. Hay cambios de fachada y cambios de fondo. ¿Cuál
de los dos rondará en la mente de los jubilados? |