Ríspido encuentro entre SNTE y disidentes

Claudia Herrera Beltrán

A nueve días de que el edificio del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) fuera tomado por maestros de Michoacán, los disidentes y la cúpula magisterial, encabezada por el secretario general, Rafael Ochoa, y la ex lideresa Elba Esther Gordillo, tuvieron una ríspida reunión sin llegar a acuerdos.

Inconformes por la destitución de su comité seccional, los michoacanos no aceptan la propuesta del Comité Ejecutivo Nacional de instalar una "comisión de reconciliación" que organice un plebiscito para elegir a la nueva directiva.

Ochoa, quien lleva cuatro días como secretario general y no ha podido ingresar a su despacho, rechazó dar declaraciones "para no entorpecer" las negociaciones que se reanudaron al cierre de esta edición.

En tanto, Juan Pérez, quien fue desconocido como secretario general de la sección 18 de Michoacán, señaló que centenares de trabajadores continuarán en posesión del inmueble hasta que obtengan el reconocimiento de la cúpula del SNTE y sean ellos quienes organicen los nuevos comicios.

El conflicto magisterial empezó el mes pasado cuando el CEN decidió adelantar la elección de la directiva michoacana, lo que provocó inconformidad. La tensión creció cuando el CEN acusó a Pérez de "excluir a expresiones críticas", lo que derivó en el desconocimiento del comité seccional.

Luego de las fuertes movilizaciones de los profesores de Michoacán, en las que incluso se amenazó con "tronar" la elección del secretario general, se acordó que los dirigentes sean elegidos mediante un plebiscito.

Pérez calificó esta decisión de "autoritaria y arbitraria", pues se dio en el marco de un congreso "ilegal", ya que fue excluida la disidencia, se realizó fuera de la sede original, en un pueblo a 57 kilómetros de Chihuahua, y en medio de un cerco policiaco que impidió el ingreso de los profesores inconformes.

La reunión duró dos horas, y a decir de Pérez fue un "encuentro ríspido", pues ninguna de las dos partes cedió en sus planteamientos. Ochoa y Gordillo insistieron en el plebiscito, mientras que los profesores disidentes rechazaron esa iniciativa.

"Gordillo está muy molesta porque ella tiene su estrategia y nosotros la nuestra", comentó el mentor, quien consideró que si los michoacanos son obligados a elegir a sus dirigentes mediante un plebiscito, entonces todos los maestros deberían hacer lo mismo para designar a la cúpula sindical.

Consideró que la destitución de la directiva michoacana es con el propósito de "cortar un brazo a la disidencia agrupada en la CNTE", por lo que señaló que este problema no es local, sino nacional.

Además de los profesores de esa entidad, en las guardias instaladas en las oficinas del SNTE también participan profesores de Guerrero, Tlaxcala, Zacatecas e Hidalgo ?quienes también alegan irregularidades en sus congresos seccionales? y los de las secciones 9 y 10, del Distrito Federal, y 22, de Oaxaca.