LUNES 18 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť La abismal diferencia en el gasto afecta la productividad nacional


México asignaría 3 mil mdd al campo; EU, 62 mil mdd: CNA

Ť Prevé la iniciativa de presupuesto una reducción a programas de apoyo, revela un estudio

Ť Al incluir pesca y alimentación en Agricultura, el sector tendrá menos recursos este año

Carolina Gómez y Angélica Enciso Ť La iniciativa de Presupuesto de Egresos del 2001 para el desarrollo rural integral representa sólo 4.8 por ciento -3 mil millones de dólares- de lo que Estados Unidos, el principal competidor de los agricultores mexicanos, destina a su sector y que asciende a 62 mil 200 millones de dólares.

En un análisis del Consejo Nacional Agropecuario (CNA) -distribuido entre los legisladores del Congreso de la Unión para sensibilizarlos acerca de la necesidad de incrementar el presupuesto- se hace una comparación entre los recursos que destina el gobierno estadunidense al agro y los subsidios que otorgan a productores.

Señala que los 26 mil 973 millones de pesos propuestos para la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, representan apenas un incremento de 0.1 por ciento respecto al actual ejercicio. Sin embargo, esto significa una menor asignación, ya que a la dependencia: se le sumaron dos actividades del sector rural que estaban en otras dependencias, pesca y alimentación.

El CNA advierte que la dependencia no tiene un peso preponderante en el gasto del gobierno destinado al desarrollo rural integral, ya que de esos recursos a la secretaría le corresponde ejercer sólo 33.6 por ciento.

Durante una reunión con el secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, integrantes de la Confederación Nacional Campesina (CNC) demandaron un aumento de 71 por ciento respecto al presupuesto total ejercido este año, ya que los recursos propuestos son insuficientes "para reactivar la producción agropecuaria".

Las diferencias entre los apoyos gubernamentales de Estados Unidos y México son abismales. Por ejemplo, en los programas sociales de alimentos, nutrición y servicios al consumidor los estadunidenses ocupan 36 mil 100 millones de dólares, mientras que aquí son apenas 5 mil 503 millones de dólares.

En cuanto a los subsidios la diferencia también es drástica, ya que aquí se orienta 8 por ciento -mil 474 millones de dólares- de lo que Estados Unidos otorga a sus productores -16 mil 200 millones de dólares. Sumado a estas diferencias de recursos para los productores, la iniciativa presupuestal prevé una reducción mayor en los programas de apoyo productivos.

Para apoyos a la rentabilidad agrícola (antes a la comercialización) en el 2000 se gastaron 3 mil 500 millones de pesos y sólo se apoyaban los granos básicos -con excepción del frijol-; ahora se pretende ampliar su operación, ya que además incluye reconversión de cultivos, Ťcampesinos-sinaloa-3-jpg agricultura por contrato y desarrollo de cadenas agroalimentarias, con un monto más bajo, 3 mil 344 millones de pesos, lo cual es 10.3 por ciento menor al del año anterior.

En cuanto al Programa de Apoyos Directos al Campo (Procampo), la propuesta considera 11 mil 506 millones de pesos, 1.6 por ciento más que en el 2000, pero no logra recuperar los niveles originales de 1993, cuando se estableció por decreto que el subsidio sería de 100 dólares por hectárea. Este año apenas llegó a alrededor de 700 pesos -70 dólares- y para el 2001 serían 827 pesos por hectárea, con lo que no se subsana la pérdida del valor del apoyo.

Sobre Alianza para el Campo, el análisis del CNA establece que para el 2001 el monto sería de 3 mil 837 millones de pesos, lo cual es 0.7 por ciento menor en términos reales al del presente año, 3 mil 630 millones de pesos.

El organismo advierte que en México los subsidios al sector agropecuario deben permanecer, pues sus socios comerciales los aplican y lejos de reducirlos los aumentan en beneficio de sus productores, "eliminarlos, indudablemente, implicaría la desaparición del productor nacional".

Además en Estados Unidos el gobierno estableció partidas de emergencia para situaciones como la caída de los precios internacionales de los granos, registrados en los dos últimos años, por lo que los apoyos al ingreso del productor se incrementaron 70 por ciento.

El CNA da a conocer que existen grandes desventajas competitivas porque en México los costos de producción son más altos. Las tasas de interés de los créditos son más elevadas. Entre marzo y septiembre fueron de 14 por ciento, mientras que en Estados Unidos en el mismo periodo fueron de 8 por ciento.

Otro ejemplo de la diferencia en los costos financieros es que en el cultivo de maíz en México se invierten 757 pesos por hectárea, en tanto que los estadunidenses gastan 554 pesos por hectárea.

Sobre uno de los principales insumos agrícolas, el diesel, también hay diferencias notables. Aquí el precio por litro es de 4.14 pesos y en Estados Unidos es de 2.11. Todo esto ha provocado una caída de la rentabilidad en la actividad agropecuaria. El texto indica que de 1993 a octubre de 2000 cayó 14 por ciento.

Reunión de cenecistas con Gil Díaz

La CNC demandó al secretario de Hacienda incrementar el presupuesto 71 por ciento respecto a lo ejercido este año, tras argumentar que "los campesinos no podrán ser más productivos si el gobierno federal limita los recursos económicos".

A los cenecistas les resulta preocupante que en la propuesta presupuestal se elimina Banrural como banco de primer piso, lo cual "agravará el acceso a las fuentes de financiamiento". En el análisis, que también fue entregado al funcionario, se mencionó que la federalización de los apoyos a la rentabilidad puede ocasionar que agricultores se queden sin el subsidio, por los criterios estatales de asignación que pueden ser diferentes.

La organización priísta ahora demanda para el campo 184 mil 655 millones de pesos, de los cuales 108 mil serían para programas de fomento y apoyo a la producción, y 76 mil 500 millones al financiamiento de actividades rurales.