DOMINGO 17 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Analista de la UNAM
Transgénico, 50% del maíz que importa México
Víctor Zendejas Ť El patrimonio natural de la humanidad -la biodiversidad mundial- puede quedar controlado en los próximos años por unas cuantas empresas trasnacionales si se permite que los alimentos enriquecidos con productos transgénicos formen parte de la cultura alimenticia de los países en desarrollo, entre los que se encuentra México, considerado uno de los 12 con mayor riqueza en ese rubro a nivel mundial, y en el cual se localizan 4 mil tipos de maíz, aseguró en entrevista la ecóloga Ursula Oswald Sprint.
La también investigadora del Centro de Investigaciones Interdisciplinarias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) aseveró que la mitad del maíz que se importa al país es transgénico, además de que la población consume papas y jitomate manipulados genéticamente sin saber dónde fueron cultivados o sin recibir la información al respecto por parte de los abastecedores.
Las empresas a las que se refiere la especialista son Novartis, Monsanto, Astrazeneca, Aventis y Dupont, de las que dijo que su "único interés es la maximización de las ganancias al monopolizar la venta de semillas manipuladas, agroquímicos, investigación, tecnología, transporte, alimentos y comercio mundial".
Señaló que de 10 empresas trasnacionales que dominaban ese mercado hace tres años ahora son sólo cinco, mismas que prefirieron asociarse o fusionarse para evitar problemas legales por las patentes y poder repartirse las ganancias.
Ninguna etiqueta previene
El Senado de la República aprobó en la legislatura pasada la obligación de que las empresas que expenden alimentos empaquetados etiqueten sus productos con las indicaciones del contenido alimenticio o si se trata de transgénicos. Al respecto, Ursula Oswald precisó: "todos sabemos" que las tortillas, las tostadas de maíz contienen transgénicos y no está definido "absolutamente en ninguna etiqueta". Precisó que el jitomate es alterado con un gen de origen pecuario y constituye, al igual que los otros perecederos, un riesgo para la salud.
Otra investigación hecha en la materia cita que a partir de ese momento se han obtenido cerca del centenar de vegetales con genes ajenos insertados, que se encuentran en distintas etapas de su comercialización, desde los que representan ya un porcentaje importante de la producción total en algunos países, hasta los que están pendientes de autorización.
Ursula Oswald añade que en Estados Unidos se retiraron al menos 2.5 millones de cajas de totopos de supermercados. Ayer, la agencia de noticias Dpa dio a conocer que la subsidiaria Aventis deberá cubrir los costos y los riesgos generados por el mal uso del grano de maíz transgénico Star Link en Estados Unidos, ya que no estaba autorizado para el consumo humano, pero fue hallado en tortillas para tacos, por lo que fue retirado del mercado.
Oswald Spring recordó que con esa base de alarma, de repente se descubrió que también las marcas Kellogƀs, Conagra, Tyson, entre otras, tuvieron problemas y se vieron obligadas retirar sus productos del mercado.
Agregó que los pediatras en Estados Unidos están preocupados porque en los últimos años han aumentado sustancialmente las alergias alimentarias, que pueden ir de una simple fiebre, erupciones en la piel hasta un problema muy grave que sería un shock anafílico que puede llevar a la muerte a un niño. Advirtió que la población en México no está exenta de ese fenómeno.