MIERCOLES 13 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Gira para supervisar el Programa Paisano
Fox define parte de su estilo: estar donde ocurren las cosas
Ť Anuncia el Presidente apoyo a migrantes en ambos lados de la frontera y nuevos mecanismos para transferencias de recursos
Juan Manuel Venegas, enviado, Nogales, Son., 12 de diciembre Ť El presidente Vicente Fox Quesada señaló que aquellos que consideren que sus giras de trabajo son sólo "fintas publicitarias", se van a llevar una sorpresa, cuando vean los resultados al final de su sexenio.
Y saliendo al paso desde ahora a las posibles críticas, subrayó: seguramente, al rato "me van a llamar el Presidente del celular, que porque nunca estoy en la oficina", y efectivamente, apuntó, así va a ser porque no piensa quedarse sentado en el despacho presidencial.
"Yo siempre estoy y estaré donde están sucediendo las cosas. šEse es parte de mi estilo!", dijo.
Incluso, advirtió que no le preocupa la posición de quienes a 10 días de haber tomado posesión ya gritan pidiendo resultados. Tenemos encuestas, agregó el jefe del Ejecutivo federal, que nos indican que la gente está de nuestro lado y que la mayoría "está dándonos el espacio de tiempo, porque sabe que estamos trabajando. No hay desesperación por tener resultados". Según el Presidente, la mayoría de los ciudadanos esperan los primeros resultados de este nuevo gobierno hacia finales del año próximo y hay quienes incluso los esperan hasta el tercer año de la administración.
El presidente Fox inició este martes una gira por los estados de Sonora y Chihuahua, donde supervisará que se cumpla con los objetivos del Programa Paisano, que en épocas vacacionales el gobierno pone en marcha para recibir y tratar de apoyar a los mexicanos que trabajan en Estados Unidos.
En la garita Agua Zarca (kilómetro 21 de la carretera Nogales-Magdalena de Kino), anunció que el gobierno de la República buscará apoyar a los migrantes mexicanos, no sólo en la defensa de sus derechos humanos y por un trato digno y justo en ambos lados de la frontera, sino también con nuevos mecanismos para la transferencia de sus recursos, y que se reduzca de manera importante la comisión que las empresas dedicadas a este servicio les cobran actualmente.
Anunció, asimismo, el inicio de una gran cruzada para combatir el contrabando, que tanto lesiona a la industria nacional y afecta significativamente la generación de empleos en México.
"Vamos a combatir decididamente el contrabando; el combate apenas inicia y lo vamos a dar aquí, en la frontera, para evitar que pasen ilegalmente las toneladas de mercancías que tanto afectan la industria y el comercio en todo el territorio nacional", puntualizó el mandatario.
De igual manera se refirió al tráfico de estupefacientes y no dejó de deslizar una crítica al gobierno de Estados Unidos por no cumplir con la parte que a ellos les toca. "Nuestra tarea es detener la producción de enervantes en el país, es detener el consumo de drogas en nuestro país y detener el tráfico de este lado de la frontera; pero Estados Unidos tiene la obligación de detener el contrabando, esa es tarea que a ellos les corresponde. Ya lo hemos señalado, allá cruzan toneladas y toneladas de droga y la pregunta es Ƒpor qué no se detiene?, Ƒpor qué surge tanto y tanto consumo de droga allá en aquel país que al final se convierte en dólares, millones de dólares que se utilizan para corromper autoridades mexicanas?".
Insistió en que espera de parte del Congreso estadunidense una respuesta positiva a su planteamiento de suspender el proceso de certificación unilateral y establecer, a cambio, un compromiso multilateral, "donde todos, incluyendo a los estadunidenses, tengamos obligaciones que cumplir".
El nuevo trato presidencial
Fox Quesada inició su gira de dos días en la mencionada garita de Nogales. Aquí, en plena carretera, encabezó una reunión de trabajo con los responsables del llamado Programa Paisano. Asistieron decenas de connacionales que aprovecharon el momento para manifestar, con porras, vivas y pancartas elaboradas espontáneamente, su apoyo al nuevo mandatario. Le tienen confianza, eso es lo que le gritaban al sonriente jefe del Ejecutivo que se deja querer y no desaprovecha un solo momento para marcar la diferencia con la "rigidez" -como definió Martha Sahagún- que caracterizó a los presidentes salidos del PRI.
Son otros tiempos. Y así lo hace sentir Fox Quesada, que hace hablar a los servidores públicos de mediano y bajo nivel; que hace hablar a los migrantes; que cotorrea con ellos y les tutea, para pedirles apoyo y paciencia, a cambio de su promesa y de su compromiso de que las cosas en México "poco a poco serán diferentes".
En Agua Zarca, el Presidente, saliéndose totalmente del programa, hizo que tomaran el micrófono empleados aduanales y de cada una de las dependencias que participan en los programas de apoyo a los migrantes. Hablaron trabajadores de la aduana de Nogales; de los Angeles Verdes; del Banco del Ejército; del Instituto Nacional de Migración; del Programa Only Sonora y, por supuesto, del Programa Paisano, entre otras instituciones.
Claro que todos le dijeron al Presidente que estaban cumpliendo con su cometido; que estaban facilitando la llegada de los paisanos, que se estaban respetando sus derechos y que, no faltaba más, están evitando cualquier acto de corrupción, a fin de no afectar el patrimonio de los trabajadores mexicanos en Estados Unidos.
A todos, Fox les dio su abrazo y su palmadita, pero no evitó la advertencia: a'i de aquel que se pase de listo con los paisanos, a'i de aquel que no los trate como se merecen, "porque esos mexicanos que van a trabajar a Estados Unidos son auténticos héroes del país.
"šA'i se los encargo! šQuiero resultados hoy!", recomendaba el presidente Fox.
"Por supuesto", "Seguro que sí, señor Presidente", "Claro que sí", "Ya usted verá los resultados", fueron las respuestas que se escucharon en Agua Zarca.
Al ojo del amo, engorda el caballo...
Fox se hizo acompañar en esta gira por el secretario de la Contraloría, Francisco Barrio; por el responsable de la Oficina Presidencial para Asuntos de la Frontera Norte, Ernesto Ruffo, y por el titular de la Oficina Presidencial de Apoyo a los Migrantes, Juan Hernández, entre otros funcionarios. Además viajaron en la comitiva senadores y diputados de PRI, PAN y PRD, destacando entre ellos el senador priísta Eduardo Bours, el mismo que manejó las finanzas de la fracasada campaña de Francisco Labastida Ochoa.
Explicó el Presidente los motivos que lo hicieron viajar al norte de la República a supervisar el Programa Paisano y dar él mismo la "bienvenida" a los connacionales. "Nos gusta supervisar porque, como reza el dicho, al ojo del amo engorda el caballo. Por eso estamos aquí, porque es importante estar cerca de donde están sucediendo las cosas y porque existen antecedentes que no hablan muy bien del servidor público que trabaja en las aduanas y garitas del país, entonces, venimos a asegurarnos de que se cumpla con el propósito de cambiar la actitud y la línea de conducta".
Después hizo un reconocimiento a "héroes" que hace algún tiempo, "todavía chiquillos o jóvenes, con lágrimas en los ojos, salieron de sus comunidades y dejaron a sus familias para venir a esta dolorosa aventura de buscar un empleo y una oportunidad que no encontraron en su propio país".
Y el tercer objetivo de esta gira, señaló, es "echarle un ojo al problema del contrabando, que ha crecido mucho en nuestro país, seguramente por la mucha corrupción que existe y por las componendas que han existido. šEste es un problema que necesitamos detener!".
Seguimos en campaña: Sahagún
Seguido por las decenas de paisanos que todo le aplauden, Fox recorrió toda la garita. šHasta los baños, supervisó que estuvieran en condiciones! Al lado de él alguien le iba explicando el funcionamiento de cada ventanilla y, apenado cuando el Presidente decidió entrar a los sanitarios, no tuvo otro remedio que advertir: "No siempre podemos tenerlos totalmente limpios".
El Ejecutivo federal platicó con los paisanos que a su paso se encontró y cuando se topó con el nayarita Mariano Chávez, que se quejó que por cada 400 dólares que manda mensualmente para su padres, tiene que pagar otros 20, Fox Quesada hizo el anuncio: "Vamos a buscar un sistema, algún mecanismo para evitar que les sigan tumbando tanto dinero".
De Agua Zarca, el Presidente se trasladó a la garita número uno de Nogales, la conocida como Puerta México. Allí fueron cientos los que se arremolinaron en torno de la figura presidencial. Fox besa a niños y niñas y mujeres, también se deja besar; platica con ancianos, con los campesinos y minusválidos que se encuentra; no deja carta sin recibir. Su inseparable secretario, Felipe Zavala, no sabe qué hacer con tanto sobre, con tanto fólder.
El Presidente anda en su ambiente y organiza el tumulto. Silba y extiende sus largas manos, ondeándolas, alza la voz: "A todos vamos a atender, a todos, abran una valla, abran una valla", ordena para tratar de abrirse paso entre el gentío.
Uno le pregunta a su vocera Martha Sahagún: "ƑNo que ya se había quedado atrás la campaña?".
Sonriente, la vocera presidencial aclara cualquier duda, muy sonriente ella: "Lo que no sabes es que seguimos en campaña; esa es la verdad, šseguiremos en campaña!".
Y Fox sigue silbando, abriéndose paso entre la multitud que cada gesto, cada broma, se la festejan.
Y más tarde el mismo Presidente lanzaría el reto: "Para quien diga que estos actos son sólo fintas publicitarias, šya lo veremos, ya lo veremos! Tenemos seis años por delante. šYa veremos si hay resultados o no...!".
Fox se trasladó por la noche a Chihuahua y Tamaulipas, donde continuará este miércoles la supervisión del trabajo que se hace en las aduanas y garitas de esta frontera.
Antes de abandonar Sonora, dejó un mensaje que más bien sonó a aclaración, en torno al homicidio de Luis Donaldo Colosio: "Yo no comprometí que iba a aclararlo. Yo no puedo hacer ese compromiso. Lo que sí comprometí es que buscaremos por todos los caminos que se haga justicia y que hay voluntad completa de hacer justicia".