MIERCOLES 13 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Exige el PRI la aplicación recta de la ley y no crear chivos expiatorios


México debe ser país de justicia, afirma López Obrador

El arresto en Nicaragua del ex secretario de Turismo, Oscar Espinosa Villarreal, fue recibido con beneplácito por la directiva del PRD y el jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, al plantear que el detenido posee información clave para investigar al ex presidente Ernesto Zedillo, por el presunto financiamiento ilegal de la campaña de 1994, así como de las irregularidades cometidas en Nacional Financiera durante la gestión del ex funcionario al frente de esa institución.

A su vez, el PRI exigió la ''aplicación recta de la ley'', y dijo que si el gobierno de Vicente Fox actúa con justicia en este asunto, lo respaldará. Pero ''si usa la ley o pretende manipularla para establecer venganzas, persecuciones ajenas a los propios motivos de la ley, no estaremos de acuerdo. Ojalá no sea el primer chivo expiatorio del sexenio; si hay un primero, habrá un segundo, y un tercero'', acotó Dulce María Sauri.

La dirigente priísta dijo que el tricolor no es defensor oficioso de nadie. ''Si las autoridades tienen elementos que inculpen a Ernesto Zedillo, que procedan; pero si no, deben poner atención, cuidado y respeto para la figura de un ex presidente de la República''.

A una pregunta de si defenderán a su compañero de partido, el secretario de Operación Política del PRI, César Camacho Quiroz, atajó: ''La ley le dará a cada uno su lugar''. Sobre la posibilidad de que se le inicie un proceso interno en la Comisión de Honor y Justicia para expulsarlo o sancionarlo, dijo que estas medidas se tomarían hasta que concluya el proceso penal en contra de Espinosa.

Por otra parte, los grupos parlamentarios del PRD y del PAN en el Senado de la República estuvieron de acuerdo en que se investigue si Ernesto Zedillo solapó las corruptelas y la salida del país de Oscar Espinosa.

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, declaró que en el caso de Espinosa Villarreal es importante se acabe con la máxima de que no se podía tocar al intocable. ''México no debe ser el país de la impunidad, sino el país de la justicia, y se deberá castigar toda ilegalidad caiga quien caiga''.

Consideró que el ex funcionario capitalino puede ''informar mucho'', no sólo de las anomalías que presuntamente se cometieron en el entonces Departamento del Distrito Federal, durante su gestión (diciembre de 1994 a noviembre de 1997), sino también de ''asuntos claves'' como las irregularidades en Nafin, así como de las aportaciones que en 1994 hicieron empresarios, como Carlos Cabal Peniche, a la campaña de Ernesto Zedillo cuando Espinosa tenía a su cargo la Secretaría de Finanzas del PRI.

En el PRD, el secretario general de ese partido, Jesús Zambrano, opinó que la detención de Espinosa Villarreal ratifica la acusación de peculado hecha por la Procuraduría del Distrito Federal durante la gestión de Samuel del Villar, y que existen fundamentos para sancionarlo penalmente.

Espinosa ''deberá ser juzgado con estricto apego a las leyes mexicanas, y las investigaciones tendrán que poner en claro quiénes se enriquecieron con recursos del gobierno de la ciudad. Esperemos que con esta acción empiece a hacerse realidad la promesa de Vicente Fox, en su toma de posesión, de que no habrá borrón y cuenta nueva''.

Por otro lado, en el Senado de la República, el coordinador parlamentario del PRD, Jesús Ortega, advirtió que si la investigación judicial correspondiente prueba que el ex presidente Zedillo cometió ilícitos para proteger a Espinosa Villarreal, se le debe aplicar la ley.

Consideró que actuar contra el ex presidente no significaría ''una cacería de brujas. Es satisfacer una exigencia de la ciudadanía de que se termine con la impunidad. No debe perderse de vista que, por principio, el Ejecutivo federal debe completar el proceso y lograr la extradición de Espinosa Villarreal, para proceder a enjuiciarlo en el país''.

El presidente de la Comisión de Justicia del Senado, el panista Jorge Zermeño, dijo que el presidente Fox ya dejó claro que no emprenderá una persecución de priístas, pero tampoco propiciará impunidad y, en el caso específico del involucramiento de Ernesto Zedillo, son las autoridades judiciales las que deben investigar.

Armando Quintero, presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, dijo que el arresto de Espinosa abre la posibilidad para que el ex funcionario demuestre con documentos su inocencia, o de lo contrario, que se le aplique todo el peso de la ley.

Por su parte, la coordinadora del grupo parlamentario del PAN, Patricia Garduño, pidió un juicio justo en contra del ex secretario de Turismo, porque no se trata de perseguir a funcionarios de las administraciones priístas.

El presidente de la Comisión de Procuración de Justicia, el priísta Manuel Moreno Garavilla, precisó que su partido demandará someter a Espinosa Villarreal a un proceso justo, basado en lo que establece la Constitución. ''Hay que dejar fuera de esto las cuestiones políticas y evitar que el ex regente se convierta en un chivo expiatorio de la administración panista que inicia''. Advirtió que en una cacería de brujas podrían salir afectados tanto funcionarios del PRI como del PAN, pero no ofreció nombres. (Andrea Becerril, Gabriela Romero, Víctor Ballinas, Juan Antonio Zúñiga, José Gil, Raúl Llanos y Enrique Méndez)