LUNES 11 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Vigilia de decenas de personas para asistir la histórica sesión de la Corte
Jueces podrían decidir hoy la presidencia de EU
Ap y Reuters, Washington, 10 de diciembre Ť En una iniciativa que podría decidir quién ganará la presidencia de Estados Unidos los abogados del candidato republicano George W. Bush pidieron hoy a la Suprema Corte de Justicia federal que revierta la decisión de la Suprema Florida de ordenar un recuento de miles de votos.
Pero los abogados del candidato demócrata, el vicepresidente Al Gore, dijeron a los jueces que los electores tienen derecho a que "se cuenten sus votos".
Los jueces escucharán los argumentos de las dos partes este lunes por la mañana en la segunda sesión histórica en el máximo tribunal de Estados Unidos para ventilar el caso de Florida, que ha prolongado más de un mes el proceso electoral.
En su presentación final, los abogados de Bush dijeron hoy que el tribunal de Florida, al ordenar el recuento de votos, incurrió en una revisión "al por mayor" de las leyes estatales "que hace caso omiso de numerosas opciones legislativas encarnadas en el Código Electoral" del estado.
"El nuevo plan diseñado por el tribunal para retabular los votos es lisa y llanamente arbitrario, caprichoso y desigual", dijeron los juristas republicanos.
Los abogados de Gore replicaron que "los votantes tienen el derecho importante a que se cuenten sus votos, y la magnitud de esos derechos empequeñece cualquier cuestión de procedimiento que (Bush y otros) afirmen aquí".
"Debe afirmarse el juicio de la Suprema Corte de Florida", subrayaron los abogados del aspirante demócrata.
El gobernador de Texas pide a los jueces que revoquen la inesperada decisión del tribunal supremo de Florida de disponer el recuento de votos en disputa, que darían a Gore una posibilidad de descontar la ínfima ventaja que le lleva Bush, para conseguir los sufragios electorales de Florida y, con ellos, la presidencia.
Se anticipa una rápida decisión de los jueces, que han demostrado dos veces estar sumamente divididos en el caso, durante el argumento del pasado día en la primera sesión de apelación de Bush, y nuevamente ayer, cuando la corte decidió detener el recuento que votos que se realizaba en Florida y escuchar la apelación de Bush.
El juez Antonin Scalia, que fue uno de los cinco que votó en favor de oír la argumentación de Bush, escribió que la medida sugería que la mayoría de los jueces cree que los republicanos "tienen una probabilidad sustancial de éxito".
Por su parte, el juez John Paul Stevens, uno de los cuatro que votó en contra, dijo que la mayoría actuó en forma poco sensata al interrumpir el recuento.
A todo esto, un ex asesor del presidente Bill Clinton, Lanny Davis, consideró que Scalia podría querer descalificarse del caso del recuento de votos en Florida porque su hijo, Eugene Scalia, es socio en el bufete de abogados de Washington Gibson, Dunn and Crutcher, que representa a Bush ante la Suprema Corte de Justicia.
Pero Eugene Scalia señaló que no trabaja en el caso de Bush y la vocera judicial Kathy Arbero dijo que el tribunal no comentará sobre la cuestión. En todo caso, Scalia no recusó la primera vez que ese bufete argumentó su caso, por lo que parece improbable que lo haga esta ocasión.
Las dos partes reconocieron que la decisión de la Suprema Corte de Justicia federal probablemente será el factor decisivo en la lucha por la Casa Blanca.
"Si ellos pudieran emitir un fallo que fuera definitivo, sería la mejor manera posible de poner fin a estas elecciones", declaró James Baker, partidario de Bush, a Fox News Sunday. Pero agregó de inmediato: "No puedo decirles que eso es definitivamente lo que va a suceder".
En el mismo programa, el principal abogado de Gore, David Boies, reconoció que necesitaban convencer a la Suprema Corte del país que levante la prohibición para el recuento de votos en Florida.
"Si no se cuentan los sufragios, es como si de algún modo se le dijera a Florida que 'no cuentan los votos que fueron sufragados', y creo que ese sería el fin del camino, en lo que respecta a desafiar los resultados de las elecciones".
Sin embargo, el jurista no aclaró si el vicepresidente aceptará su derrota si la Suprema Corte favorece a Bush, y sugirió que Gore podría aguardar las apelaciones de otras demandas de líderes demócratas que quieren eliminar hasta 25 mil votos de residentes en el exterior.
Así las cosas, decenas de personas desplegaron carpas, extendieron sus sacos de dormir y se protegieron del frío esta noche, mientras aguardaban en fila para conseguir este lunes una banca en la Suprema Corte de Justicia y presenciar la que se anticipa como una sesión histórica.