Ť Inaugura con el cardenal Norberto Rivera la casa del peregrino 

Respeto, no adhesión, ofrece López Obrador a las iglesias

Ť Anuncia la realización del proyecto Catedral-Basílica, que tendrá un costo de $500 millones

Laura Gómez Flores y Alma Muñoz Ť El gobierno del Distrito Federal mantendrá una relación de respeto con todas las iglesias, pero no se adherirá a alguna en particular, pues hay que mantener una sana diferencia respecto de los campos de competencia correspondientes, afirmó Andrés Manuel López Obrador, luego de anunciar la realización del proyecto Catedral-Basílica de Guadalupe, que tendrá un costo de 500 millones.

En la inauguración de la casa Juan Diego, donde estuvo presente el cardenal Norberto Rivera Carrera, López Obrador aseguró que su administración será respetuosa del derecho de los mexicanos de manifestar libremente sus ideas, profesar sus creencias religiosas y practicar los actos y ceremonias vinculados a su fe, "pero manteniendo una visión civilista, como corresponde al poder público".

El propósito, dijo López Obrador, es buscar la unidad con todas las fuerzas políticas, sociales, ciudadanas y religiosas de la ciudad, pero en un ambiente de respeto y fraternidad, donde cada cual se desempeñe en el espacio de acción y competencia que le corresponde".

Así, como una manifestación de reconocimiento y respeto a las tradiciones del pueblo mexicano y a los profundos y antiquísimos sentimientos de veneración a la Virgen de Guadalupe, el gobierno capitalino colaborará en la ampliación del atrio de la Basílica, anunció.

El jefe de Gobierno capitalino aseguró que la aplicación de un programa integral para esta área tiene un indudable sustento histórico y cultural, por lo que en su tercer bando informativo dio a conocer el proyecto para mejorar la infraestructura de servicios turísticos, de comercialización, gastronomía y hospedaje de la zona, así como la ampliación de la explanada del atrio para la creación de la plaza mariana y la operación del albergue para el peregrino, que ayer se inauguró.

El mandatario capitalino agregó que de esta manera se ofrecerán condiciones de seguridad y comodidad al turismo religioso y a los 7 millones de peregrinos que acuden a la Basílica anualmente, entre los días 9 y 12 de diciembre. El proyecto, informó, se apoyará en una primera instancia en el Fideicomiso Villa de Guadalupe, que preside el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez.

El gobierno capitalino, por su parte, destinará, en principio, 10 millones de pesos para elaborar el proyecto arquitectónico y los estudios de viabilidad económica, con el fin de alentar la participación de la iniciativa privada y lograr que su ejecución, estimado su costo en aproximadamente 500 millones de pesos, sea autofinanciable.

López Obrador mencionó que son varios los empresarios interesados en participar en este programa, así como en los proyectos de parques industriales de alta tecnología en Iztapalapa, en el antiguo rastro de Ferrería y en el corredor Fuente de Petróleos-Reforma-Juárez-Alameda-Madero-Zócalo, los cuales se darán a conocer próximamente.

Aunque se negó a precisar los nombres de los empresarios, adelantó que se planea integrar un consejo de hombres de negocios para que colaboren en la promoción económica de la ciudad, en proyectos como éstos, que se concretarán durante el próximo año. Para ello solicitó la confianza y respaldo de los habitantes de los ciudadanos del DF.

Agradece Rivera Carrera colaboración de las administraciones perredistas

El arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, calificó este día como "inconfundible", dado que se logró la edificiación de la casa Juan Diego, que está llamada a ser el refugio del peregrino guadalupano, que muchas veces no encuentra un lugar digno y accesible antes o después de su visita a la Virgen de Guadalupe.

Luego de agradecer el apoyo de Cuauhtémoc Cárdenas, Rosario Robles y López Obrador, por las gestiones realizadas para que un módulo de la extinta Ruta 100 sirva de techo para los millones de visitantes que recibe cada año la Basílica, Rivera consideró que "estamos viviendo un laudable esfuerzo de ayuda social, pero también una bella expresión de la caridad cristiana que nos enseña a salir de nosotros mismos para tender la mano al necesitado".

El prelado confió en que esta obra será un constante aliciente para todos los mexicanos que desean construir un país donde impere la equidad social y se exprese con hechos la caridad cristiana.

El director del Fideicomiso Villa de Guadalupe, Pedro Ramírez Vázquez, mencionó que, como parte del proyecto Catedral-Basílica, se logró que las autoridades delegacionales otorgaran un predio de 23 mil metros cuadrados, donde se construyó dicha casa, que permitirá a los peregrinos alojarse con seguridad.

El lugar cuenta, además, con 10 vehículos eléctricos, con cuatro palzas cada uno, para trasladar a las personas con discapacidad. En el atrio se construirá también la plaza mariana, donde se realizarán dos celebraciones en promedio al mes, afirmó el arquitécto al destacar la necesidad de poner en marcha ese programa para dignificar la zona.

La delegación Gustavo A. Madero otorgó a la Arquidiócesis un permiso administrativo temporal, revocable e indefinido, para el funcionamiento de la casa Juan Diego.