SABADO 9 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Necesaria para el agro
Nueva banca de desarrollo, pide agrupación rural
Angélica Enciso L. Ť La falta de financiamiento de los últimos años en el sector agropecuario, por la caída de la banca de desarrollo y el limitado interés de la comercial, hace urgente que se den cambios en las instituciones vigentes y que se creen otras, señaló la Asociación Mexicana de Uniones de Crédito del Sector Social (AMUCSS).
La agrupación indica que más allá de la liberalización financiera y de los esfuerzos y subsidios para promover agentes privados en el sistema financiero rural, la presencia y cobertura de la banca de desarrollo es la más importante en número y cobertura; "el desarrollo de las iniciativas microfinancieras no sería viable sin el desarrollo y complementariedad de la infraestructura bancaria en el medio rural".
Ante las voces que se han levantado con el planteamiento de que Banrural desaparezca, lo rescatable de esta institución es que se trata de uno de los pocos instrumentos de política económica rural que le quedan al Estado y más bien se tendría que dar un cambio radical de la institución para establecer una red bancaria privatizada en favor de los pequeños y medianos productores rurales, indica la AMUCSS en el documento Un sistema financiero al servicio del desarrollo rural, que presentó en la Cámara de Diputados
Instituciones financieras semipúblicas, la salida
Una de las propuestas de la organización es que Banrural entre en un proceso de privatización en favor de los pequeños y medianos productores rurales, y se transforme en un sistema de banca semipública durante un periodo de transición de diez años, tiempo en que el Estado tendría la obligación de financiar directamente la construcción de un nuevo sistema financiero rural.
Cada sucursal de Banrural se convertiría en un banco local propiedad de los productores y de los actores económicos locales, los cuales estarían integrados financieramente en bancos rurales regionales y éstos, a su vez, en un banco o financiera rural en el ámbito nacional. El sistema, propone AMUCSS, estaría construido con el principio de subsidariedad. Entre los servicios que ofrecerían en el ámbito microrregional están los créditos, depósitos de ahorro, cambio de cheques y créditos de inversión.
Asimismo el Fideicomiso Instituido en Relación con la Agricultura podría orientarse a hacer descuentos crediticios para operaciones con la banca social y comercial de crédito rural, agrícola, o para la micro y pequeña empresas rurales. También podría diseñar y operar un amplio sistema de financiamiento a la comercialización.
La banca de desarrollo, argumenta la AMUCSS, debe permanecer como instrumento de política económica de equidad, a fin de propiciar el desarrollo de mercados financieros mediante el apoyo de emergencia a instituciones financieras locales, regionales y nacionales.