SABADO 9 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Felipe Arizmendi afirma que sólo aporta puntos de vista a Luis H. Alvarez
Reitera el episcopado que no mediará en Chiapas
Andrea Becerril, enviada, Juan Balboa, corresponsal y Alma E. Muñoz Ť A la Iglesia católica "no le interesa" conformar el grupo de intermediación entre el gobierno de Vicente Fox y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), aseguró el secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Abelardo Alvarado.
Incluso, el obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi Esquivel, negó su participación como mediador y se manifestó porque el Ejército Mexicano continúe progresivamente el retiro de tropas de la zona de conflicto.
El prelado aseguró que en sus viajes por la llamada zona de conflicto ha comprobado que no existen retenes en las carreteras y en algunos municipios el propio Ejército Mexicano analiza los lugares de los que pronto se retirarán. ''Pienso que es un proceso gradual que se viene dando progresivamente", puntualizó.
Al finalizar el acto oficial de la toma de posesión de Pablo Salazar Mendiguchía como gobernador constitucional de Chiapas, el obispo de San Cristóbal de las Casas confirmó que mantiene un diálogo permanente con el comisionado para la negociación, Luis H. Alvarez, con quien comparte información sobre la región de conflicto y aporta su punto de vista sobre la situación en la entidad. Todo esto, dijo, para ayudar en la construcción de la paz en el estado.
"Estamos en las comunidades donde hay los problemas más grandes de división y tratamos de reconciliarlas, por que si se firmara sólo un papel entre el gobierno federal y el EZLN, y las comunidades no están unidas y reconciliadas, de poco serviría esa firma", dijo en el momento en que abandonaba el recinto oficial.
Insistió en que lo más importante para la Iglesia católica es la reconciliación de las comunidades más fragmentadas. Ahí, subrayó, estamos trabajando, al igual que las demás iglesias.
Agregó que cada uno de los ciudadanos chiapanecos debe construir un estado con justicia. ''Yo tengo mucha ilusión y mucha esperanza en que sigamos avanzando por esos caminos que se están abriendo de reconciliación y de paz'', enfatizó.
En la ciudad de México, el obispo Abelardo Alvarado manifestó que al momento no hay ninguna propuesta para que la institución religiosa sea parte de la intermediación en el conflicto. "Nosotros contribuiremos en todo lo que tenga que ver con la paz pero no nos interesa ser parte de la mediación".
No obstante, externó que con Pablo Salazar Mendiguchía se abre un camino de esperanza para Chiapas y confió que haya más coincidencias entre los gobiernos federal y estatal para "dar una solución". "Ahora toca al EZLN dar respuestas satisfactorias a las propuestas del gobierno", consideró.