Ť El canciller de la isla reconoce la posición de Fox contra el bloqueo de EU
Zedillo estancó la relación México-Cuba: Pérez Roque
Ť Pensó que sus intereses estratégicos con Washington se verían dañados, comenta el diplomático
Ť Cualquier país que nos apoye pone su independencia a prueba y desafía a la Casa Blanca, dice
Blanche Petrich y Georgina Saldierna Ť Cualquier país que decida ''dar un paso por Cuba'' pone su independencia a prueba y desafía el poder de la presión estadunidense, asegura el canciller cubano, Felipe Pérez Roque. El gobierno en La Habana está consciente de esta condición y por tanto reconoce, en lo que vale, la voluntad expresa del gobierno que encabeza Vicente Fox Quesada para ''sacar las relaciones bilaterales del estancamiento en el que están hoy''.
No
por panista o por conservador los comunistas cubanos dejan de ver en Vicente
Fox a un amigo: ''No tenemos prejuicios. El mundo requiere grandes alianzas
por encima de preferencias ideológicas'', asienta el diplomático.
En entrevista, el joven ministro señala que como resultado de la larga conversación que sostuvo ?la medianoche del pasado viernes? con el nuevo secretario de Relaciones Exteriores, Jorge G. Castañeda, hay una primera definición de México: ''Nos dejó claro que hoy comienza su trabajo en contra del bloqueo a Cuba, en contra de la aplicación extraterritorial de leyes que esto significa''.
Y acusa: ''Fue con el ex presidente Ernesto Zedillo que se estancó la relación. Cambió de prioridades, prevaleció la percepción de su gobierno de que las relaciones con Cuba podían dañar sus intereses estratégicos con Estados Unidos''.
Esperanzado, prevé a muy corto plazo gestos y resultados. Por lo pronto, en los primeros meses de 2001, tendría lugar la reunión binacional que debería haber sido periódica, pero que durante la gestión de Rosario Green Macías, ex titular de la cancillería, se interrumpió. Espera también que ''muy pronto'' los empresarios mexicanos percibirán señales positivas de Fox para reanudar las inversiones y el comercio con Cuba, que en los dos años anteriores cayeron en 30 por ciento.
''Un discurso valiente''
A Pérez Roque el discurso inaugural de Vicente Fox le pareció ''serio, interesante, valiente'' y comprometido con los tres grandes temas ''de extrema sensibilidad para Cuba''. Esto es: no injerencia en los asuntos internos de otros países, respeto a la igualdad soberana de los Estados y el rechazo a la aplicación extraterritorial de las leyes internas propias de cada país.
Concluye, pues, que para Cuba este discurso significa ''que la política exterior de México se atendrá a esos principios''.
La
charla con el canciller cubano se produce en medio del estruendo de los
mariachis. Hay globos, aire frío y euforia en las primeras horas
del pasado sábado. Un centenar de fidelistas mexicanos festejan
al presidente Fidel Castro con rosas blancas y apapachos desbordados,
bajo una escultura gigante del chihuahuense Sebastián. Los roperones
de la seguridad cubana viven horas de alerta máxima. Fidel se deja
querer, se explaya, se regala a quienes se mueren en la raya por la Revolución
Cubana.
Y Pérez Roque, en los alrededores de la fiesta, externa ese sentimiento que hace percibir que el gobierno de Cuba ?por fin? vuelve a pisar tierra firme en México.
?¿No está demasiado optimista? ?preguntamos los escépticos.
?Sí. Siento confianza porque hemos identificado una agenda clara de temas de interés común para Cuba y México.
?No es por aguarles la fiesta ni por amarrar navajas entre ustedes y el nuevo gobierno, pero nosotros identificamos a un sector importante del foxismo como muy conservador. Algunos de sus personeros tienen un historial de derecha, anticomunista. ¿No le preocupa que México decida, bajo este nuevo activismo internacional que pretende llevar a cabo, promover premisas que son afines a quienes más presionan a Cuba, como las condenas por lo que llaman derechos humanos y democracia universales?
?Creemos que existen condiciones para una relación respetuosa de la situación interna de cada país, que evite acciones injerencistas e irrespete el ordenamiento interno que cada nación tiene derecho a darse. No tenemos prejuicio en nuestra relación. Tenemos relaciones con fuerzas de derecha, de izquierda y de centro, y creemos además que el mundo de hoy requiere una gran alianza por encima incluso de preferencias ideológicas y ordenamientos políticos en temas que son de interés para todo político responsable del planeta, que tienen que ver con la situación del Tercer Mundo, con la lucha contra la pobreza creciente, por la preservación del medio ambiente. No creemos que esos temas puedan estar excluidos hoy de ningún partido, aun de derecha. El presidente Fox, al asumir su cargo, expresó una serie de prioridades y aspiraciones que nosotros suscribiríamos totalmente: a favor de los pueblos indígenas de México, a favor de los pobres de este país.
Luz verde para comercio e inversiones
?¿Qué temas se abordaron en la reunión entre Fox y Fidel? ¿Qué resultados hubo?
?La
conversación fue excelente. Se habló de la necesidad de reactivar
la relación entre los dos países, que está en un nivel
de estancamiento; de dar una clara señal de apoyo al empresariado
mexicano para superar los niveles actuales de comercio. Este ha caído
en los dos últimos años en 30 por ciento (ha bajado a 279
millones de dólares), a partir de que los empresarios mexicanos
dudan; hay temor a la ley Helms-Burton. La inversión mexicana en
Cuba también ha bajado sensiblemente. Se han suspendido los intercambios
habituales que había. La reunión del convenio educativo-cultural
está pendiente, la reunión binacional que habitualmente presiden
los cancilleres toca hacerla en México, y no se ha podido acordar
fecha. En fin, hay una agenda pendiente que creo va a ser reactivada.
?¿En qué momento se produjo este estancamiento?
?Durante el gobierno de (Ernesto) Zedillo. No fue responsabilidad de Cuba, nosotros mantuvimos nuestra misma vocación de amistad e interés hacia México. Es una relación histórica, cultural. Es un pueblo al que queremos como a pocos. Pero nuestro interés no fue correspondido. Hubo una percepción en el gobierno anterior de que las relaciones con Cuba podían dañar sus intereses estratégicos, las relaciones con Estados Unidos, y esto dañó la relación. Hubo en determinados momentos pronunciamientos irrespetuosos que decidimos con toda madurez no responder. Se violaron principios fundamentales de la política exterior mexicana; cosas como aquello del Benemérito, de que el respeto al derecho ajeno es la paz.
?En concreto, ¿qué pasos veremos en los próximos meses?
?Debe darse en algún momento, los primeros meses de 2001, la reunión binacional aquí en México. Eso va a dar oportunidad a un examen más amplio y profundo de las relaciones. Creo que vamos a trabajar seriamente ambas partes para organizar una visita del presidente Fox Quesada a Cuba, los primeros meses del año próximo, tal y como es su deseo. No hemos ajustado fechas.
?¿Su impresión personal de Jorge G. Castañeda, el nuevo canciller?
?Un
hombre que quiere trabajar por las relaciones con Cuba con seriedad, que
conoce el país y su historia ampliamente. Que tiene voluntad de
adelantar el trabajo y que comprende la importancia que esta relación
tiene para México. En la relación con Cuba, México
pasa una prueba de si realiza o no una política independiente. Es
una relación que requiere valor político, más en la
coyuntura actual.
Prueba de fuego
?¿Diría que está a prueba la relación? ?se le preguntó.
?No, yo diría que Cuba pone a prueba la independencia y el sentido de actuar conforme al interés nacional de cada país que se relaciona con ella, porque la presión estadunidense contraria a que se establezcan relaciones es muy fuerte; porque las embajadas norteamericanas perciben en todo el continente las relaciones con Cuba: amenazan a empresarios, aplican la ley Helms-Burton. Cada país que da un paso a favor de Cuba tiene que desafiar el poderío formidable de esa presión. En este caso de México se va a dar esta particularidad. Impulsar la relación con Cuba sería coherente con el deseo de la mayoría del pueblo mexicano, que alienta hacia Cuba un gran sentido de solidaridad, una gran simpatía y amistad.
''Fue el único país que no pudo ser obligado a romper relaciones con Cuba en América Latina. No se puede olvidar que el ex presidente Lázaro Cárdenas se alistó para ir a combatir junto a milicianos cubanos en Playa Girón; no se puede olvidar que la madrugada del 2 de diciembre se cumplen 44 años en que Fidel llegó a Cuba en un yate con 81 hombres, proveniente de México, no de otro lugar. No se puede olvidar que México fue tierra de la libertad para los luchadores cubanos. No creo que el pueblo de México haya dado a sus gobiernos autoridad para cambiar ese legado'', concluyó el canciller cubano.