MARTES 5 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Niega que sea un perseguido político


Improcedente, la petición de asilo a Oscar Espinosa: PGR

Ť Ibarrola Nicolín asegura que tendrá un juicio justo

Ť La solicitud, una artimaña legal, dice funcionario nicaragüense

Gustavo Castillo y agencias Ť Oscar Espinosa Villarreal no es de ninguna manera un perseguido político, por lo que es totalmente improcedente que se le brinde asilo diplomático, consideró el subprocurador de Asuntos Jurídicos e Internacionales de la Procuraduría General de República (PGR), Eduardo Ibarrola Nicolín.

Aseguró que en contra del ex secretario de Turismo pesa la orden de captura emitida por un juez y no por un partido político. "Es una orden de un juez penal de la ciudad de México, y desde luego que Espinosa Villarreal, como cualquier otra persona, tiene todas las garantías procesales en nuestro sistema para tener un juicio justo y apegado a derecho", señaló.

Rechazó, como lo ha declarado el ex regente de la ciudad de México, que sea un perseguido político, y aclaró que "respetuosamente, creemos que por ningún motivo se puede conceder ese asilo y lo que se debe hacer es iniciar el procedimiento de extradición".

Ibarrola Nicolín, quien está encargado del despacho del titular de la PGR, informó que de acuerdo con el tratado de extradición entre Nicaragua y México, el proceso contra Oscar Espinosa ya inició y se cuenta con 60 días para formalizar la solicitud. Junto con esa petición se enviará a Managua la orden de aprehensión y "las pruebas necesarias que la sustentan, NICARAGUA_MEXICO el hecho del delito por el que se le persigue, para ver si en Nicaragua también es delito el peculado y si no ha prescrito el acto ilícito; en fin, todo lo que es normal en este tipo de procedimientos".

Se debe recordar que Oscar Espinosa Villarreal enfrenta una orden de aprehensión, ya que es considerado como responsable del delito de peculado al haber ordenado el desvío de 420 millones de pesos a actividades distintas de lo programado durante su gestión como regente de la ciudad de México.

Espinosa Villarreal se convirtió en prófugo de la justicia desde agosto pasado, luego de que a partir de una gira de trabajo por el estado de Coahuila, que realizó en calidad de secretario de Turismo, ya no volviera a la ciudad de México y no acudiera a los distintos citatorios que le formularan tanto el Ministerio Público como un juez para responder de las acusaciones en su contra.

El subprocurador indicó que en caso de que Espinosa Villarreal sea extraditado a México sin que le haya sido otorgado algún amparo, lo pondrán inmediatamente a disposición de un juez y dependerá "de la justicia del fuero común en la ciudad de México si se le dicta el auto de formal prisión o no".

Juicio de amparo suspendido

El Juzgado Cuarto de Distrito en materia de amparo, a cargo de Jorge Carenzo Rivas, mantiene suspendido el juicio de amparo que promovió Oscar Espinosa contra la orden de aprehensión. El tribunal de alzada que debe resolver la queja que presentó la defensa del ex regente aún no le ha notificado si debe aceptar o no la participación de peritos de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal en los peritajes contables que elaborarán a las constancias que presentó Espinosa Villarreal.

En Managua, Nicaragua, el ex funcionario mexicano "inició una gira por los medios de comunicación de esta capital para manifestar públicamente su posición" de que no ha cometido ningún delito en México, según un cable de Ap.

La agencia estadunidense asegura en su nota que "más que vigilarlo, la policía parecía protegerlo". Viajaba "en un auto rojo, seguido por una camioneta con cuatro policías enfundados en chalecos antibalas y armados con fusiles de asalto AK-47", según publicaron diaros nicaragüenses.

En tanto, Jaime Morales Carazo, asesor del presidente de Nicaragua, Arnoldo Alemán, declaró a la misma agencia que "la petición de asilo de Espinosa Villarreal es una artimaña legal, porque no es un perseguido político. Es perseguido por un delito común" y habría dicho que "mientras más rápido se vaya mucho mejor; creo que no es nada afortunado que haya venido a Nicaragua", y rechazó que la policía de ese país lo esté protegiendo, dijo que sólo lo están vigilando para que no se vaya del país centroamericano.