LUNES 4 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Sin vicios y con buena condición, asegura


En el 2001 regresaré para ser campeón nacional ligero: Vampiro

Jorge Sepúlveda Marín Ť Con dos meses de preparación a plenitud, un año sin consumir ninguna sustancia prohibida, tomada la distancia sobre el cuadrilátero como en sus mejores tiempos y con la técnica boxística de antaño, Eduardo Vampiro Gómez asegura que ésta es su última oportunidad y antes de finalizar el 2001 será nuevamente campeón nacional ligero.

Dice que no habla a la ligera, puesto que sabe que luego de dos años de haber dejado los enlonados se pierde mucho, pero tiene los ejemplos recientes de Miguel Angel González y Ricardo López, quienes dejaron más de un año de boxear y regresaron el pasado fin de semana para ganar.

Admite que sólo tiene la licencia vencida de 1999 de la Comisión de Box Profesional del Distrito Federal, que renovará en enero siguiente, pero niega que el jefe de los Servicios Médicos de la citada oficina, Horacio Ramírez Mercado, haya condicionado su regreso si no se sometía a una evaluación técnica.

"Para qué quieren eso, si ya me conocen y saben que tengo las aptitudes necesarias para seguir en el boxeo profesional. En todo caso, mi mejor prueba será la primera pelea que espero hacer a principios de año, y si no gano, pues me voy. Pero lo que van a ver es que sé todavía ganar", anticipa.

Con un acumulado de 26 pleitos, de los cuales ha perdido seis y ganado por nocaut el resto de las contiendas, Gómez asegura que fue hace unos 20 días cuando le notificaron que tenía los permisos médicos en orden para regresar al boxeo.

El se retiró hace un par de años, por segunda ocasión en su carrera, y si no se ha vuelto a presentar para hacer los trámites, "ha sido porque no tiene caso ir este año, en el que ya sólo me resta prepararme, pero en enero regreso para terminar el papeleo", señaló.

A sus 25 años de edad, dice que debería estar en plenitud de facultades y a punto de ser campeón del mundo, o ya serlo, de cualquier organismo.

Pero ahora debe hacerlo como al principio, entrenar fuerte, estudiar a los rivales, aunque tiene una reserva de experiencia que espera sacar cuando le haga falta.