SABADO 2 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Anuncio de Carlos Abascal Carranza, secretario del Trabajo

Consulta nacional para modificar la LFT

Ť Propone una reforma "gradual, consensada, incluyente, con la participación de todos"

Elizabeth Velasco C. Ť Carlos Abascal Carranza, nuevo secretario del Trabajo y Previsión Social, adelantó anoche que este lunes se iniciarán las pláticas con el Congreso de la Unión para que, a través de un acuerdo político entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, se convoque a la sociedad a iniciar el proceso de consulta para la reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT).

Al PAN, dijo, "le hemos pedido que retire su anteproyecto de reforma laboral" que presentó en 1995 en el Senado, ya que se trata de construir un nuevo proyecto consensado. "No estamos proponiendo una reforma con ruptura, sino gradual, consensada, incluyente, con la participación de todos".

abascal-frenk-gertz-tomaAseguró que no hay un proyecto de reforma a la legislación laboral. Los cambios se harán luego de llevar a cabo una "auténtica consulta nacional y de diálogo" con los trabajadores, empresarios, abogados, académicos y legisladores, que podría durar de ocho a 12 meses. Esa deliberación también incluiría la libertad y autonomía sindical, así como el ejercicio político de los agremiados; "la intención es acabar con los contratos de extorsión".

El Ejecutivo, dijo, "será el facilitador del diálogo y de esa consulta nacional" que se convocará en los primeros dos meses del 2001, con el fin de que en el segundo periodo de sesiones de la Cámara de Diputados, o en el primero del 2002, se emprenda dicha reforma. "No hay prisa".

Abascal precisó que el Código de Procedimientos Laborales ?redactado por empresarios, sector obrero oficialista y autoridades de la pasada administración para presentarlo como anteproyecto de reforma a la legislación laboral? tendrá que "subordinarse" a la discusión y consulta de donde surja el proyecto integral correspondiente.

En su primera conferencia de prensa como funcionario público, el ex dirigente empresarial delineó su política en torno a los salarios mínimos. Estos, dijo, tenderán a convertirse en un mero "indicador macroeconómico, porque la regla en la relación laboral debe ser que empresa por empresa revise los salarios con la participación de los trabajadores" y los incrementos se otorguen en función de la productividad y las condiciones materiales de cada compañía.

Hizo notar que habrá libertad para la revisión de los salarios contractuales, pero "eso no quiere decir que a tontas y a locas se demanden aumentos de 80 por ciento, porque cada empresa tiene su propia realidad y sus límites; ante una inflación esperada de 6.5 por ciento para el próximo año tiene que haber una racionalidad de la demanda y, por supuesto, deberá estar sujeta a la capacidad empresarial".

Agregó que este lunes iniciará los "contactos" con los sectores obrero y patronal representados en la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (CNSM), a fin de llegar a una solución que más favorezca a los trabajadores, "con principios de estabilidad y gradual recuperación sostenida del poder adquisitivo del salario".

Del salario mínimo puntualizó que este gobierno no pretende recuperar "de un solo golpe lo que se hizo mal durante 27 años, sería un error comunicarlo así a la comunidad; sería antisocial".

Dio a conocer algunos de los cambios que impulsará en la STPS. "Vamos a hacer una reforma a fondo (de la institución y sus órganos descentralizados) para volver a ésta autoridad promotora, impulsora y facilitadora del trabajo productivo a favor de los trabajadores y empresarios, así como del equilibrio entre los factores de la producción". Comentó que la próxima semana dará a conocer a los integrantes de su equipo.

Iniciador de la "nueva cultura laboral" ?en 1992 como presidente de la Coparmex delineó las nuevas tendencias en la materia?, Abascal sostuvo que el gobierno jugará un papel de apoyo para impulsarla. "A través de los programas de capacitación puede impulsar esa nueva cultura laboral, apoyar a sindicatos y empresarios para que ésta se expanda, profundice y convierta en una nueva manera de relacionarse" entre los sectores obrero y patronal.

En ese contexto, precisó que se continuará con los esquemas vigentes de los acuerdos mensuales entre los sectores productivos, pero se "procederá a perfeccionarlos".