VIERNES 1o. DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Critica Robles a los detractores del proyecto al inaugurar segundo tramo
Cumple norma la línea B: reporte de Systra
Ť Estuvo acompañada del secretario de Comunicaciones, Carlos Ruiz, y del gobernador Montiel
Ť Pide la mandataria del DF atender el problema del tranasporte con una visión metropolitana
Laura Gómez Flores y Javier Salinas, corresponsal Ť La jefa de Gobierno del Distrito Federal, Rosario Robles Berlanga, puso en operación el segundo tramo de la línea B del Metro y criticó a aquellos que consideran irresponsable inaugurar una obra de tal magnitud sin tomar en cuenta las necesidades de la población de menos recursos, que son la mayoría de los capitalinos y mexiquenses.
Pidió a quienes han levantado sus voces de desconfianza porque las obras y funcionamiento de la línea recayeron en manos de técnicos mexicanos, considerados los más experimentados en América Latina, que se tranquilicen, porque todo ha sido debidamente supervisado y avalado por una connotada empresa extranjera.
En el reporte de la empresa Systra, que opera la red del Metro en París y otras líneas en Francia, se concluye que los equipos que forman parte de los sistemas de señalización, de alimentación y distribución de la energía eléctrica y del mando centralizado cumplen con las medidas de seguridad y confiabilidad para que la línea B opere sin mayor problema.
Además, está garantizada la circulación de trenes en las vías principales y de retorno en las terminales, por lo que no existe ningún peligro de colisión y se impide cualquier error humano a lo largo de los 23.7 kilómetros, que comprenden las 21 estaciones de la línea, la cual se concluyó a seis años de iniciarse su construcción, en beneficio de 300 mil usuarios diarios en ambos lados.
Sin embargo, a mediano plazo, con un incremento gradual de trenes y sin inversión alguna en obras e instalaciones, puede transportarse a más de 600 mil pasajeros al día, dijo la mandataria capitalina al manifestar la necesidad de atender la problemática de transporte y otros rubros mediante una visión metropolitana, que obligue a las autoridades a compartir respon- sabilidades y costos.
A las 10:43 horas Robles, acompañada del secretario de Comunicaciones, Carlos Ruiz Sacristán, en representación del Ejecutivo federal --quien no asistió al acto por atender audiencias de los visitantes extranjeros invitados a la toma de posesión de Vicente Fox--, inició un recorrido por 14 estaciones que concluyó en Ciudad Azteca, donde develó la placa de inauguración y fue recibida con el Son de la Negra, a cargo de policías mariachis.
Con el aplauso y porras de la gente, que buscaba un lugar en las escaleras del Metro, el gobernador del estado de México, Arturo Montiel, fue el primero en tomar el micrófono para agradecer el apoyo de la administración capitalina para concluir la obra, reconocer la brillante labor de Robles al frente, a quien calificó de una digna mujer mexicana, y solicitar el cambio de nombre de la estación Continentes por el de Nezahualcóyotl.
El siguiente fue el titular de la SCT, quien exaltó los esfuerzos de ambas entidades para concretar la línea B, que contribuirá a solucionar de fondo los problemas de transporte, contaminación del medio ambiente y mejorar las vialidades, en beneficio de cientos de miles de mexicanos.
En clara alusión al presidente municipal de Ecatepec, Agustín Hernández Pastrana, quien no asistió al acto y denunció la existencia de fallas técnicas en la línea, que ponen en riesgo la seguridad de los usuarios, Robles Berlanga señaló: "el día de hoy, de manera responsable, estamos poniendo en funcionamiento esta obra, porque nosotros sí confiamos en los ingenieros mexicanos, y conocemos los sentimientos y necesidades del pueblo de México".
Al término de su intervención, Arturo Montiel precisó que la línea cuenta con todas las medidas de seguridad necesarias, por lo cual se analiza la posibilidad de ampliar la red hacia Cuautitlán Izcalli.
"Quien tenga pruebas, que me denuncie"
Gabriela Romero Sánchez y María Es-ther Ibarra Ť "Si algún director del Metro, funcionario, ex regente o jefe de Gobierno tiene una sola prueba contra mí, que me denuncie". Es el reto que Fernando Espino Arévalo, líder del sindicato del Metro y diputado local por el PRI, lanza a todos.
Sentencia que ni siquiera el hasta ayer presidente de la mesa directiva de la ALDF, el pevemista Maximino Fernández Avila, tiene autoridad para solicitar que se le investigue. Más aún, revira a las reporteras: "quién es él, nadie puede venir a entregar un papelito, aventarlo y acusar sin pruebas a tal o cual diputado".
De esta manera se defiende de la supuesta campaña que La Jornada ha iniciado en su contra."No entiendo por qué a un órgano, que se ha identificado con el PRD, lo agarran como medio para atacar a los trabajadores, porque no me están atacando a mí, sino a todos los trabajadores del país".
Espino rechaza que quienes interpusieron la denuncia sean trabajadores del Metro y los define como esquiroles al servicio de funcionarios del gobierno como Saúl Escobar, o del STC, como Mario Zepeda, a quien ha cuestionado por la manera en que ha ejercido el presupuesto, por su falta de conocimiento, de voluntad política e ineptitud. "Pero, díganlo", exige.
--Y si la Asamblea Legislativa le pide aclarar su situación, Ƒlo va hacer?
--"Con base en qué me lo van a pedir. O qué, la prensa, La Jornada, le va a decir a la Asamblea lo que tiene qué hacer.
--Pero, si no no tiene nada qué ocultar, Ƒpor qué no dar la cara? --se le insiste.
--"Es una conquista laboral que ganamos, la Ley Federal del Trabajo y el Reglamento de Condiciones Generales de Trabajo del STC nos protege. Es un logro que le arrancamos al patrón para que nos diera una licencia con goce de sueldo y así poder trabajar como representante sindical", responde.
E increpa: "El mismo director del Metro o la Contraloría capitalina tendrían la obligación de cancelarme automáticamente mi salario si existiera una irregularidad, porque de lo contrario incurrirían en una falta. O ustedes creen que si tuvieran los elementos jurídicos, legales, para no dar la comisión, Ƒlo harían? Ahora el Metro es un organismo descentralizado, con recursos propios, y yo les digo que la nómina se paga con la venta de boletos, no con subsidios".
El líder sindical remata: "No tengo de qué avergonzarme, nunca me he robado nada. Soy gente que vengo del campo con la intención de prepararme. Que trabaja 20 horas al día para sacar adelante a su familia. Vivo en un departamentito".