SABADO 25 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Es hora de no rendirse al régimen de la chusma, dijo Joseph Lieberman
Bandas republicanas intimidan a funcionarios
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 24 de noviembre Ť La campaña presidencial del demócrata Al Gore acusó hoy a "bandas" republicanas, encabezadas por estadunidenses de origen cubano, de irrumpir en el recuento de votos en Florida y de intentar intimidar a funcionarios electorales para obstaculizar un conteo pleno y justo del voto para determinar al próximo presidente de Estados Unidos.
"Este es un momento para honrar el régimen de leyes, y no para rendirse al régimen de la chusma", declaró el aspirante demócrata a la vicepresidencia, Joseph Lieberman. "Estos son tiempos para paciencia y respeto, no intimidación y violencia".
Acusó a las bandas republicanas de obligar a los funcionarios electorales del condado Miami-Dade a abandonar el recuento manual autorizado por la Suprema Corte estatal el pasado miércoles, y señaló que este viernes bandas similares se estaban congregando frente a otros puntos de recuento del voto en otros dos condados.
Pero mientras procedían los recuentos manuales de boletas en Florida, que reducían la ventaja de 930 votos de la que aún goza el candidato republicano George W. Bush sobre Gore, la Suprema Corte de Estados Unidos anunció este día que aceptara la petición de escuchar argumentos sobre la legalidad del proceso del recuento de sufragios de Florida.
En un triunfo para los republicanos, la máxima corte del país anunció que el próximo viernes habrá una audiencia para considerar argumentos de que los recuentos manuales de las boletas en Florida, autorizada por la Suprema Corte de ese estado, violan la Constitución federal.
Con el resultado de la elección presidencial en Florida que determina los resultados de la elección nacional, el recuento de votos en ese estado es el centro de atención de la prensa nacional.
Varios canales de cablevisión trasmitieron hoy en vivo el recuento manual, con imágenes de funcionarios que levantaban cada boleta hacia la luz para determinar si un votante perforó, y hasta dónde, la boleta, y con abogados de ambos candidatos que debatían las interpretaciones sobre la "intención" de cada votante.
La secretaria de Estado de Florida está bajo orden judicial de aceptar los resultados de los recuentos manuales en varios condados del estado que sean recibidos antes de las 17 horas del domingo, y este día la funcionaria dijo que "certificará" esos resultados finales esa misma noche.
Pero como todo el mundo espera, ya nada es "final" en esta elección, y ese hecho casi seguramente no será la palabra final.
Además de la audiencia ante la Suprema Corte de Estados Unidos a fines de la próxima semana, republicanos y demócratas han anunciado su intención de presentar apelaciones judiciales sobre la imparcialidad del conteo electoral en Florida.
Manipulación de resultados
Los republicanos han acusado a los abogados de los candidatos demócratas de buscar la forma de excluir del conteo boletas enviadas por correo por personal militar en el extranjero y de intentar "manipular" los resultados del estado con técnicas cuestionables de evaluación.
"No están contando, están emitiendo votos", afirmó hoy el ex candidato presidencial republicano y ex senador Bob Dole, quien como muchas figuras nacionales de ambos partidos está en Florida para participar en la batalla de relaciones públicas.
Sin embargo, las acusaciones más severas de hoy fueron las del Partido Demócrata, que señaló que la estación cubana Radio Mambí de Miami había orquestado el miércoles las manifestaciones frente al centro de recuento manual en el condado de Dade, lo cual eventualmente llevó a que los funcionarios electorales abandonaran sus esfuerzos allí para el recuento manual del voto de ese condado clave.
Un funcionario demócrata local fue internado brevemente en un hospital después de ser atacado durante estas manifestaciones, y funcionarios del condado admitieron que esas protestas contribuyeron a la decisión de suspender el recuento de boletas.
Seis legisladores federales del Partido Demócrata solicitaron al Departamento de Justicia comenzar una investigación de los responsables de estas manifestaciones.
Pero también había más indicaciones hoy de que algunos demócratas estaban empezando a dudar de las perspectivas de su candidato presidencial a pesar de todo este alboroto del recuento.
El senador demócrata Robert Torricelli comentó al diario The New York Times que ahora parecía "muy improbable" que Gore obtenga los votos suficientes por el recuento para superar la ventaja del gobernador Bush, y agregó que "la matemática se está complicando".