SABADO 25 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Ningún funcionario que los viole será solapado


Se reforzará la protección a los derechos humanos: Fox

Ť Demanda al Senado debatir un estatuto internacional para el combate de crímenes de guerra, de lesa humanidad y genocidio

Alma E. Muñoz Ť Vicente Fox anunció que durante su gobierno México adoptará una política que refuerce los mecanismos de protección a las libertades fundamentales; "no solaparemos a ningún funcionario público que viole los derechos humanos, incumpla las recomendaciones de instancias encargadas de tutelarlos o entorpezca sus acciones", advirtió.

A siete días de recibir la banda presidencial, demandó al Senado de la República debatir sobre la ratificación del Estatuto de la Corte Penal Internacional, con competencia para juzgar los crímenes de genocidio, guerra, agresión y lesa humanidad, y garantizó suscribir aquellos tratados internacionales -con injerencia en la materia- que "no lesionen la soberanía nacional".

Fox clausuró los trabajos del quinto Congreso de la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO), a cuyos integrantes convocó a "mantenerse firmes" frente a los gobiernos de sus países, como él hará en México, para lograr el respeto a las garantías individuales y sociales, pues "sin derechos humanos no hay democracia, y éste es un pendiente sumamente oneroso que tenemos que saldar con nuestros pueblos".

Para el próximo jefe del Ejecutivo "no es suficiente un cambio de gobierno o de régimen para asegurar el pleno respeto" en la materia.

"El problema es más profundo. La falta de educación, de salud, de vivienda, de empleo, de acceso a oportunidades, de agua potable, de electrificación, de drenaje, de comunicación telefónica y por Internet, además de generar desigualdad e injusticia, corrompe las normas de convivencia", añadió.

Intolerable, la indolencia en la materia

En un estado de derecho, a decir del guanajuatense, los gobiernos "estamos obligados a actuar con eficacia y oportunidad para ser los primeros en respetar los principios esenciales a la naturaleza del hombre, y alentar una cultura dirigida a crear hábitos, actitudes y comportamientos que hagan de la vida en sociedad un espacio de concordia y entendimiento".

Por eso, le resulta "intolerable la simulación y la indolencia de las autoridades, porque dañan profundamente la relación entre gobernantes y gobernados".

Su administración tendrá como uno de sus ejes fundamentales el reconocimiento a la dignidad de la persona y la promoción de los derechos humanos de todos los mexicanos, externó ante los integrantes de la FIO, quienes después de cuatro días de trabajo emitieron la Declaración de México, en la cual patentizan su preocupación por actos de tortura, discriminación, xenofobia, migración, ataques a grupos vulnerables, racismo y otros, en todo el mundo.

El futuro jefe del Ejecutivo puso especial énfasis en los trabajadores indocumentados, cuya situación provocó en los ombudsman un llamado urgente al gobierno de Estados Unidos para que vigile, controle y castigue la caza de migrantes en la frontera sur de su territorio.

Los connacionales en el extranjero, sostuvo Fox, "siempre tendrán en mí un aliado dispuesto a defenderlos. Como presidente de México rechazaré la instrumentación de estrategias que los penalicen y me pronunciaré a favor de políticas comprensivas, que no sólo los reconozcan como sujetos, sino también a las redes familiares a las que pertenecen".

El respeto que exigimos para los connacionales que se desplazan hacia el norte, agregó el presidente electo, "será el mismo que daremos a quienes cruzan nuestro país por la frontera sur".

A partir del primero de diciembre, reiteró, defenderemos los derechos fundamentales de los indígenas, las mujeres, los niños, los adolescentes, los adultos mayores y las personas con discapacidad. Y, en el caso de la tortura, "me comprometo a dar la batalla definitiva para erradicarla del país".

Previo al discurso del próximo mandatario, el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, José Luis Soberanes -anfitrión de la FIO y único ombudsman que acompañó a Fox en el presidium durante la ceremonia-, externó su confianza por que con un gobierno electo democráticamente se respeten los derechos humanos.

"Su llegada (a la Presidencia) no fue un volado, sino una decisión consciente de todos los mexicanos", expresó.