VIERNES 24 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Propone capacitación para el manejo de productos


Invitación al no pago, estrategia de otorgar microcréditos: Amedec

Víctor Cardoso Ť La estrategia que prevé el gobierno de Vicente Fox de otorgar microcréditos a fondo perdido a pequeñas empresas es una "invitación" al no pago, advirtió el presidente de la Asociación Mexicana para la Defensa del Consumidor (Amedec), Arturo Lomelí Escalante.

En el caso del sector comercial, hizo notar que los changarros, como los define el presidente electo, se encuentran en una situación de crisis precisamente por la falta de financiamiento, pero no será contemplando de antemano apoyos económicos que deban irse a fondo perdido como se solucionará el problema.

Indicó que mediante capacitación para el manejo de los productos y la consecución de menores precios al consumidor se puede revertir la tendencia a desaparecer del pequeño comercio.

Además, dijo, no queda claro de dónde saldrían los recursos para apoyar a los microempresarios.

Durante los últimos tres quinquenios, recordó Lomelí Escalante, las misceláneas y tendajones representaban 70 por ciento de la distribución de mercancías, frente a 30 por ciento de las tiendas de autoservicio, y ahora es a la inversa.

Explicó que esa tendencia se deriva del manejo más eficiente de una mayor cantidad de productos. Según estudios realizados por la Amedec, dijo el presidente del organismo, una tienda de autoservicio maneja alrededor de 60 mil productos, mientras que, en el mejor de los casos, una tienda bien surtida sólo tiene alrededor de 200.

Eso, dijo, procova un manejo asimétrico en la relación de costos de operación que permite a las grandes cadenas de supermercados ofrecer descuentos y ofertas, que sirven como un "gancho permanente" para atraer a los consumidores.

Canastas básicas

Arturo Lomelí señaló que esa asimetría de costos de operación, que repercute en el precio final de los productos incluidos en la canasta básica, es la que provoca una importante diferencia en la capacidad de la población para acceder a determinadas mercancías.

Así, por ejemplo, recordó que aunque la canasta básica se compone, en términos generales, de unos 33 productos, el Banco de México establece diferentes mecanismos para determinar la variación en sus precios. Mientras el instituto central -explicó- aplica mecanismos "ponderados" para determinar la cotización, otras instituciones como la UNAM, la Universidad de Sonora, la Universidad Autónoma del Estado de México, la Cámara Nacional de Comercio de la ciudad de México y la propia Amedec utilizan otros parámetros.

No obstante las diferencias en el concepto, dijo Lomelí Escalante, es un hecho que el precio de los productos que integran la canasta básica se ha elevado muy por encima de la inflación registrada a lo largo del sexenio, en particular aquellos que se consideran como "superbásicos", como leche, tortilla, huevo, frijol, sal, azúcar, carne y pescado.