Lunes en la Ciencia, 19 de noviembre del 2000



Propuestas de la AMC

Urge replantear el vínculo con el Estado, consideran científicos y tecnólogos

Drucker-rene1 Bajo la premisa de que la experiencia demuestra que las nuevas tecnologías se promueven gracias a la investigación científica básica, la Academia Mexicana de Ciencias -asociación civil independiente encabezada por René Drucker Colín y que agrupa a más de mil 300 de los más destacados científicos y tecnólogos en México- hizo públicos los lineamientos estratégicos para el diseño de una política pública que eleve el desarrollo de la ciencia y la tecnología al nivel de "políticas de Estado".

El documento Estrategias para el desarrollo de la ciencia y la tecnología en México, en los umbrales del siglo XXI establece, al inicio, una consideración fundamental: "Las naciones que produzcan innovaciones en el campo de la ciencia y la tecnología están en mejores condiciones de controlar su desarrollo inmediato y futuro".

México, a pesar de haber logrado construir en los últimos cuarenta años un sistema científico y tecnológico significativo y de calidad, enfrenta retos derivados de la globalización económica que hacen que ese sistema de investigación sea "insuficiente".

"Es prioritario avanzar en consolidar y ampliar nuestro sistema de ciencia y tecnología", sostiene el documento, mismo que ha sido canalizado, por las vías oficiales, al equipo de trabajo del presidente electo, Vicente Fox.

En busca de tal consolidación, la Academia Mexicana de Ciencias propone, entre otras, las siguientes acciones estratégicas:

* Las políticas de desarrollo de la ciencia y la tecnología deberán ser elevadas al nivel de políticas de Estado.

* Las instituciones académicas o aquellas que como el Conacyt fomentan y apoyan el desarrollo científico y tecnológico, necesitarán contar con autonomía frente a los gobiernos.

* Las academias con reconocido prestigio, como la Academia Mexicana de Ciencias, la Academia de Ingeniería o la Academia Nacional de Medicina, podrían convertirse en cuerpos consultivos de alta calificación para la Presidencia de la República o el Congreso de la Unión.

* Incrementar gradualmente el financiamiento a la ciencia y la tecnología, que es una inversión fundamental para el desarrollo del país, con la meta de alcanzar 1 por ciento del producto interno bruto (PIB).

* Vincular la industria y el sector privado con las universidades y centros de investigación, mediante estímulos fiscales e incentivos económicos.

El documento considera que "en este nuevo escenario político de México, los científicos y tecnólogos consideramos urgente replantear nuestro vínculo con el Estado.

"Reafirmamos nuestra decisión de contribuir al desarrollo de México, así como la voluntad de asumir nuestra responsabilidad como comunidad científica frente a la sociedad mexicana", concluye.


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