DOMINGO 19 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Pidió en Panamá apoyar una cumbre por la infancia
Educación básica para todos los niños, propone Zedillo
Ť Con excepción de Fidel Castro, jefes de Estado y de gobierno de la región encomian el afán democrático del Presidente
David Aponte, enviado, y Fernando Martínez, corresponsal, Panamá, 18 de noviembre Ť En su última participación en un foro internacional, el presidente Ernesto Zedillo propuso en la décima Cumbre Iberoamericana que los niños y adolescentes de la región tengan educación básica, y que las naciones erradiquen el trabajo infantil en un plazo de 10 años.
''Se trata de hacer más y más pronto por nuestros niños y nuestros jóvenes para que puedan ejercer, sin cortapisas, sus derechos, sus libertades y para que dispongan de verdaderas oportunidades en beneficio de las familias, de sus comunidades, de nuestras respectivas naciones'', argumentó.
Los jefes de Estado y de gobierno del foro de concertación política dieron la despedida al mandatario mexicano con frases de demócrata, solidario con Latinoamérica, amigo leal y hombre que cumplió el papel de llevar la modernización a México.
La anfitriona de la reunión, la presidenta panameña, Mireya Moscoso, dijo al jefe del Ejecutivo mexicano: "Aquí está entre amigos; tiene 21 jefes de Estado amigos y cuando usted quiera regresar, este también será su país, Panamá, y muchas gracias por darle esa democracia a México".
El presidente español, José María Aznar, consideró que Zedillo realizó un papel "histórico" en la modernización de México. "Como español creo que ha sido un amigo leal que ha llevado las relaciones entre México y España a un nivel que nunca antes habíamos disfrutado", afirmó.
Alfonso Portillo, mandatario de Guatemala, mencionó el espíritu solidario del Presidente de México en los momentos difíciles afrontados por América Central, principalmente ante los desastres naturales, como el huracán Mitch en 1998.
El colombiano Andrés Pastrana expresó su admiración y respeto por la obra de gobierno y el "talante democrático y social" de Zedillo, quien dio muestras de apoyo a la comunidad internacional. "Gracias por la generosa solidaridad que usted siempre ha tenido con Colombia", agregó.
Durante su intervención en la reunión plenaria, el presidente de Cuba, Fidel Castro, fue el único que no hizo ninguna mención a Zedillo. Sólo agradeció la presencia del monarca español:
"Me sumo a las justificadísimas felicitaciones a su majestad el rey Juan Carlos, a quien estimo mucho, mucho, mucho. Espero que no se disguste si le digo que quedamos dos (los únicos que han participado en las diez cumbres de la región). Es que Dios quiso que usted fuera rey y Dios quiso que yo estuviera vivo", expresó.
En el salón Islas del Centro de Convenciones Atlántico-Pacífico (Atlapa), los jefes de Estado y de gobierno llevaron a cabo los trabajos plenarios del encuentro. Todos y cada uno tuvieron una participación para exponer los problemas relacionados con la niñez en los países iberoamericanos.
Zedillo expuso que los pueblos de la región han trabajado con especial ahínco para mejorar las condiciones de vida de los jóvenes. Incluso en un contexto de escasez de recursos, los países latinoamericanos han logrado avances significativos para elevar los niveles de educación, salud y nutrición de ese sector de la población.
Por eso, solicitó el apoyo de los jefes de Estado y de gobierno de Iberoamérica para celebrar una segunda Cumbre Mundial en favor de la infancia en el 2001, como lo ha propuesto el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia.
"En particular yo sugeriría que la Cepal haga un estudio que nos muestre con toda claridad cuáles son las tendencias que en este momento, en materia de desarrollo social, específicamente referidas a los aspectos de la niñez y la juventud, lleva nuestra región... para comprometernos en un esfuerzo adicional en términos de política, de recursos, dentro de las posibilidades de países como los nuestros".
El mandatario consideró que los apoyos a la niñez podrían llevar a compromisos más fuertes a favor de los niños y jóvenes de la zona: acceso universal a la educación básica; elevar al menos en 30 por ciento la secundaria; reducir en 50 por ciento la tasa de analfabetismo para la población mayor de 15 años; aumentar en 20 por ciento la matrícula de educación superior, y poner al ciento por ciento los servicios básicos de salud en el año 2010.
"Y deberíamos podernos comprometer a que todas las mujeres, todas las madres embarazadas, puedan contar con atención prenatal. Deberíamos comprometernos... a disminuir la tasa de mortalidad de niños menores de un año, al menos 20 por cada cien y de los menores de 5 años a 22 por cada cien. Deberíamos comprometernos a reducir a la mitad de las tasas actuales de mortalidad materna, de erradicar la desnutrición grave en nuestra región y los nacimientos de bajo peso'', manifestó.
El jefe del Ejecutivo dijo que el gobierno mexicano apoya la celebración de una segunda cumbre en favor de la infancia -la primera tuvo lugar en 1990- para hacer evaluaciones periódicas, tal vez anuales, de los avances que tengan los países de la región en el desarrollo de sus políticas en la materia.